Laura

Capítulo 31

-Ese chico de allí, el número tres- Roxanne señala a Emilio- se ve guapo- la miro con las cejas levantadas- No me mires así- me da un leve empujón- No me digas que ninguno te parece guapo- mira al frente comiendo unos Doritos picantes.

-No, ninguno me parece guapo- conozco a todos y todos ellos me molestan.

-No mientas- dice mirándome fijamente y abriendo sus ojos como platos mientras levanta una ceja- Dime la verdad, estamos en confianza.

-Vale, vale- me río- Cuando entré a este instituto, me parecieron guapos todos- me lanza una mirada como diciendo, yo sabía- Sobretodo, Emilio y John.

-Señálame a ese tal John- dice curiosa y lo hago- Madre mía, tienes buenos gustos.

-Obvio- digo entre risas.

-Que creída- dice riendo conmigo.

Seguimos hablando sobre todo esto mientras Eduardo y Kevin hablan de otra cosa, como los choques que se dan los jugadores y como caen rodando al suelo. Hacen caras graciosas al ver como se golpean y esto nos provoca más risas a Roxanne y a mí. Voy a decir algo, cuando Roxanne recibe una llamada.

-¿Hola?... - silencio- ¡Miranda! Ya decía yo que te estabas tomando tu tiempo en llamar...- se ríe- Debiste verte como una niña pérdida...- silencio- Chica, estamos en la cancha. No te enojes tanto- se ríe mucho y sus carcajadas provocan que el equipo nos mire. Le doy un codazo y ella los ve al tiempo que les guiña un ojo y les lanza un beso. Muchos se ríen y otros copian el acto- mira, sigues en la cafetería ¿No?... Vale, iré a traerte- dice levantándose y riendo.

Yo me quedo allí sentada mirando la práctica mientras Kevin intenta hacer una cara que Eduardo hizo al ver volar a uno de los jugadores. Me río, su cara esta terriblemente graciosa.

Se acercan al ver que estoy muriendo, literalmente, estoy muriendo de la risa. Kevin pasa uno de sus brazos por encima de mis hombros y sigue haciendo caras graciosas mientras que, Eduardo hace aire con sus manos porque estoy tan roja que ya no puedo respirar. Obvio los tres estamos riendo sin parar.

-¿Que están haciendo?- dice Roxanne junto a una chica que es igual a Roxanne, tiene las mismas trenzas que Roxanne, pero su cabello es completamente negro. Sus ojos son color miel. Y su ropa es idéntica a la de Roxanne.

-Oh, nada, nada- dice Kevin secándose las lágrimas que salieron de sus ojos- estábamos viendo la práctica con Laura- dice acercándome más a él. La desconocida hace una cara de desaprobación al ver el acto de Kevin.

-Ya suéltala- dice la chica empujando levemente a Kevin- Le vas a pegar tus desgracias- todos ríen- Por cierto, me llamo Miranda, tú debes ser la famosa Laura. Un gusto conocerte. Mi hermana ha estado hablando de la maravillosa chica bonita que encontraron en la cafetería.

-Miranda, hablar contigo es como pasarle el chisme a medio mundo- dice Roxanne llevando una de sus manos hacia su frente.

-Eso lo que dijiste- dice Miranda levantando uno de sus dedos hacia su hermana. Son tan idénticas y a la vez tan diferentes.

-Bueno chicos, no es que quiera arruinar sus risas, pero faltan cinco minutos y no sabemos en donde están nuestros salones.

-Laura nos va a llevar, ya nos dijo que su salón está al lado del nuestro. Ustedes tres- señala a las mellizas y a mí- estarán juntas.

-¿En serio?- digo algo sorprendida- Creí que todos ustedes estarían juntos.

-Asi tendría que ser, pero estos chicos son tan inteligentes que avanzaron un año- dice Miranda con los brazos cruzados.

-¿Que te puedo decir?- dice Kevin mirando sus manos, como si acabara de hacerse una manicura- La inteligencia nos sigue a todos lados.

-No... No seas... Ta... Tan... Creído- dice Eduardo golpeando el hombro de Kevin, luego, me mira- No le... Le cre... Creas. Él es m... Más ton... Tonto de lo... Que se ve.

-Tiene razón- dice Roxanne- Kevin va con Eduardo porque se fue a estudiar a Londres un año y avanzo mucho en sus estudios. Y al venir aquí el director quiso adelantarle un año.

-Que gran historia- miro a Eduardo- ¿Y tu, estás aquí por lo mismo?

-N... No, y.. yo est.. estoy aquí... Por... Porque si... Estu... Estudié- dice algo rojo.

-Lo que quiere decir, es que la inteligencia SÍ lo persigue a él- dicen Miranda y Roxanne al mismo tiempo.

Miro a Kevin y esta de brazos cruzados haciendo pucheros. Todos lo miramos con ojos de pocos amigos tratando de no reírnos. Pero fallamos. Explotamos en carcajadas.

Termina la práctica y nos damos cuenta porque el entrenador hace que suene el silbato. Los jugadores van adentro a ducharse. Esa es mi señal de ir al salón.

-¿Y si los seguimos?- dice Roxanne a mi lado con una mirada pícara. Miranda voltea a verla seria- Vale, yo solo decía, de todas formas somos nuevas y tendríamos escusas.

-¿Roxanne quieres decirme quién va a creerte? ¿Que se supone que les dirás? Ay, disculpen, pensé que este era el salón en el que me tocaba, no pensé que las duchas de los chicos estuvieran cerca de la cancha en donde practican- dice Miranda hablando tratando de imitar a su melliza.

-Muchos estarían felices si lo hicieras.