ERROR: Artificial || Zodiaco

!#02: Chocolate y Galletas

No me gusta cuando llueve porque se cancela la salida al jardín y nos tenemos que quedar encerrados todo el día. Es aburrido estar siempre adentro, con las paredes sin color y todo en perfecto orden. No nos permiten dejar nuestros juguetes tirados cuando es hora de la cena, sin importar si ya acabamos de jugar o no, así que es un poco molesto. ¿Cómo pretenden que me divierta si no puedo continuar con la historia al día siguiente? La última vez que llovió, entre todos armamos una gran cuidad que era atacada por monstruos gigantes, pero cuando íbamos a llegar a la mejor parte, nos dijeron que debíamos guardar todo.

La lluvia, como siempre, arruina los planes de todos. Aunque no todo es malo, porque la comida que sirven cuando llueve es la mejor del mundo. ¡Hay chocolate caliente! Yo soy el segundo en la lista, por lo que puedo pasar primero al comedor y eso significa que siempre está todo lleno, recién salido de la cocina y caliente. Además de que Raffa no gusta tanto de la comida, por lo que siempre me deja pasar primero en la fila. ¡El mejor amigo del mundo!

Algunas veces me siento un poco mal por Didio, porque a pesar de ser mi hermano, es el último en la lista y la mejor comida se acaba rápido. Una vez intenté guardarle comida, pero para cuando llegó ya estaba fría y a nadie le gusta eso. Se enojó conmigo por eso, lo que me hizo sentir muy triste, pero después salimos al jardín a jugar, así que me alegré un poco.

Ahora no podemos hacer eso. Y todo por la tonta lluvia. No entiendo por qué existe algo así como la lluvia, no tiene sentido: No es como que en el cielo existan lagos o regaderas que se activen de vez en cuando. Es ilógico. Lo único que hace es arruinar las tardes de juegos y poner triste a los pajaritos. Porque a ellos tampoco les gusta mucho que caiga agua del cielo: Les moja las alas y ya no pueden volar. ¡Y es tan frío!

Si hay algo que detesto más que la lluvia, eso es el frío. Me obligan a usar más ropa de lo normal, la comida se enfría más rápido, no puedo estar descalzo y bañarse es una tortura. En definitiva, el clima puede ponerme triste.

Al sentarme en el comedor, en mi mesa favorita, me siento un poco feliz. Tengo mi taza llena hasta el tope de chocolate caliente que suelta un poco de humo y uno de mis mejores amigos está sentado a mi lado mientras esperamos al resto. El comedor se llena rápido a estas horas, porque todos tenemos mucha hambre y hasta se podría decir que nos peleamos por la comida. Por eso debemos correr para llegar aquí, aunque los cuidadores nos regañen por hacerlo. Pero ellos no saben que debemos hacerlo.

— ¡Ten cuidado!— Me advierte Raffa, uno de mis mejores amigos cuando me decido a tomar el primer trago de mi chocolate. Lo veo fruncir el ceño, enojado conmigo, porque no hice caso a su advertencia. Me quemé la lengua y ahora la tengo que sacar— Te lo dije.

— Do siento— Pronuncio con la lengua de fuera. Escucho las carcajadas de un niño que apenas va llegando y no tengo que verlo para saber que se trata de Leiv. O Zinc, como los cuidadores nos piden que lo llamemos. No me gusta llamarlo así, es mi otro mejor amigo.

— ¡Héctor tonto!— Grita en forma de burla, lo que hace que me ponga rojo de la pena. Todo el mundo me voltea a ver y algunos se ríen— ¿Te volviste a quemar con el chocolate?

El niño de cabellos rubios se sienta de su lado de la mesa. Los cuidadores nos dijeron que Leiv no se puede sentar junto a otros niños porque su habilidad es muy especial y, si llega a tocar a alguien, lo puede lastimar mucho. Eso no me importa mucho, porque es de mis mejores amigos. ¡Aún si me dice tonto! Yo no creía que él, de entre todos, iba a ser mi amigo: Su habilidad es congelar y yo odio el frío. ¡Pero es divertido pasar el tiempo con él!

— ¿De quién se burlan sin mí?— Pregunta Julián llegando con su bandeja llena de galletas, pero sin una taza de chocolate. Nunca entenderé por qué ese niño es tan extraño. ¿A quién no le gusta el chocolate caliente? Lo miro feo, porque se supone que esas galletas son para acompañar la bebida caliente, no para que te robes todas para ti solo.