Me dirás: ¿quién eres? [En Proceso]

Capítulo 1

Hanny Gils

—Buenos días, chicos. El día de hoy tenemos un nuevo alumno en la clase —musitó la maestra, captando al instante la atención de todos los presentes—. Este es Belz Beckett, su nuevo compañero.

Al ver al chico me quede impactada, sus hermosos ojos verdes y su sonrisa captaron de inmediato mí atención. Se podría decir que me enamore a primera vista.

La maestra volvió hablar y esta vez, le pidió al chico llamado Belz que se presentará ante todos.

—Hola a todos, mi nombre es Belz Beckett. Como la maestra ya lo dijo, soy nuevo en la escuela me mude aquí a Atlanta, Georgia, por asuntos del trabajo de mi padre —tomo una pausa para luego continuar—: espero llevarme bien con todos ustedes y también poder hacer nuevos amigos.

—Bueno Belz, puedes sentarte en ese asiento. —la maestra lo señaló con su dedo justo en el lugar donde se encuentra el asiento.

De inmediato me fije que al lado de donde me encontraba en ese momento, era el lugar donde la maestra señaló.
El chico hizo un asentamiento con la cabeza, para luego de inmediato acercarse al puesto y posteriormente procedió a centrarse a mi lado.

Capte toda su acción como si estuviera en cámara lenta, desde como sonreía de manera tímida a la profesora, hasta como dejaba su mochila a un lado para luego sentarse; esto hizo que me golpeara a mi misma mentalmente, por quedarme mirándolo todo ese tiempo.

Cuando ya estaba en su lugar, él se percató de mi mirada, por lo cual volteo a verme para luego sonreírme.

—Hanny Julie Gils, despiértate en este mismo momento o llegarás tarde a tú último día de escuela. —Mi madre me sentenció desde la puerta de mi habitación—. Y también estarás en problemas, señorita.

Me despierto de golpe, medio dormida y asimilando lo que acababa de soñar hizo que me sintiera mucho peor. ¿Por qué? pues, ese día era el ultimo día del segundo año de la high school, y eso implicaba que el chico más popular de la escuela Belz Beckett, pronto se mudaría a otro Estado por asuntos de trabajo de su padre y a su vez implicaba no volverlo a ver nunca más. El rumor corría por toda la escuela desde hace un par de semanas. Es así que desde que lo supe he estado muy triste y preocupada a la vez.

Belz Beckett siempre ha sido mi enamorado desde aquel primer día que llego a la escuela, hace más de cuatro año. Y en donde exactamente termino sentado al lado de mi pupitre para que al cabo del final del día el director llegó a nuestro salón diciendo que él, es decir, Belz, no pertenecía al salón A sino el salón B. Y lo peor de todo esto es que: acababa de soñar todo sobre la primera vez que lo vi.

Mi mejor amiga Anils, me aconsejó que es mejor que le confiese mis sentimientos a Belz antes de que este se marché a otra cuidad y no lo vuelva a ver más, pero desde que supe el rumor me debatía cada día en si hacerle caso a mi amiga o no. Es por eso que aquí estoy. Llego el día en el cual no me queda más tiempo en si decirle lo que siento por él y al menos tener la satisfacción de haberlo intentado, y quizá haya alguna posibilidad o simplemente no decirle nada y quedarme con mis sentimientos en juego.

—Hanny, necesito que vayas a darte una ducha rápida y bajes para que desayunes. Por favor, que sea lo más pronto posible —afirma mi madre. Algo furiosa—. Rápido Hann, o se te hará tarde.

Me levante de mala gana, porque era el día y aun no decidía que hacer al respecto. Aunque tengo aun el resto del día para pensarlo bien.

Cuando baje las escaleras, ya vestida y con todas las cosas listas para irme a la escuela.  Mamá se percató de mi presencia y me indicó con un gesto en la mano para que me acercara hasta ella.