"Ayo Lena" Kara gritó con toda la fuerza de sus pulmones, adoptando de repente una especie de acento. Tal vez una combinación de texanos y británicos, pero honestamente, Lena no podía decirlo. "¡Lena! Quiero— "hipo" Quiero que me engañes "ella terminó, muy seria perdiendo el acento tan rápido como llegó. Ella comenzó a reír, lentas risas que se volvieron histéricas.
La rubia obviamente estaba borracha. Lena se sonrojó un tono que no sabía que podía alcanzar naturalmente y se acercó a la mesa en la que estaba sentada la kriptoniana. Alex, también sonrojada, miró a su hermana confundida, con la boca abierta y luego se volvió lentamente para mirar a Lena. "Lo siento mucho, ella está ehm ... bueno, definitivamente está borracha"
"Estoy borracha" Kara gritó "Espera un ... hol 'on jus' un segundo ... ¡te ves como mi hermana!"
"Eso es porque soy tu hermana"
"Bueno ... eres mi hermana favorita!"
"Kara" Alex se calló "Soy tu única hermana y necesitas llegar a casa. Honestamente, ha tomado una (1) bebida toda la noche y parece que ha inhalado suficiente pegamento para quebrar una fábrica de trenes modelo "
En ese momento, Kelly cruzó las puertas del acogedor bar alienígena, luciendo profundamente incómoda y algo fuera de lugar. Alex la saludó y ella rápidamente se abrió paso entre la pequeña multitud que rodeaba un juego de póker improvisado. "¿Es demasiado pedir una sola noche en paz?" Alex susurró mirando a su hermana severamente. Lena, que había visto la decepción en la cara de Alex la última vez que interrumpió su cita con Kelly, intervino. "Puedo llevarla a su casa si lo desea, sé dónde vive y estaba a punto de salir de todos modos". Alex suspiró aliviado "¡Muchas gracias Lena! Te debo una." Ella susurró mientras Kelly se acercaba. "Oh, ¿qué le pasó a ella?" Kelly comenzó, mirando a Kara con preocupación en sus ojos. "Oh nada. Solo iban a ir ".
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"Kara, maldita sea! ¿Dónde están tus llaves?"
"¿Quién son las llaves?" se arrastraba apoyándose en Lena. Lena empujó hacia atrás y sostuvo sus hombros firmemente; "Mírame Kara. Atención. ¿Dónde están tus llaves?" después de un momento de silencio, Lena exhaló lentamente "Estás tan borracha "
"¿Qué? ¡No, no lo soy!
"¿Oh si? ¿Puedes decir la hora? Preguntó Lena sacando su teléfono de su bolsillo.
"No estoy borracha", dijo Kara firmemente a la pantalla del teléfono que mostraba las doce y media. Sus ojos se alejaron en la distancia y finalmente se posaron en Lena. "Alguien alguna vez, ¡guau! ... ¿Alguien te ha dicho lo injustamente fotogénica que eres?"
"No en realidad no. Escucha, tenemos que irnos ...
"Estás caliente"
"Duerme ..." Lena terminó, sonrojándose una vez más. Como si fuera una señal, Kara se quedó dormida y casi se cae, afortunadamente Lena la había atrapado antes de que su cabeza golpeara la puerta del ascensor. Lena sacudió a la rubia despierta. "Muy bien loca, vamos a llevarte a un lugar cómodo"
Lena arrastró a Kara a uno de sus autos más modestos, un elegante modelo blanco Tesla S. Condujo mientras Kara se quedaba dormida en la parte trasera. Diez minutos más tarde se habían detenido en la gran altura en la que Lena vivía. Kara se arrastró, con la ayuda de Lena, por supuesto, al ascensor y al ático de Lena.
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Kara se despertó lentamente, con la cabeza palpitante. Ella gimió enterrando su cara en las sábanas y solo entonces se dio cuenta de que, de hecho, no eran sus sábanas. Saltó de la cama blanca como la nieve solo para darse cuenta de que llevaba pantalones. Sin embargo, no eran sus pantalones. Salió de la habitación buscando respuestas con timidez. Su boca se abrió ante la vista ante ella. Allí estaba Lena. Pero no era solo Lena. Era Lena en toda su gloria. Llevaba una camisa azul muy suelta de cuello bajo descuidadamente metida en un par de pantalones cortos negros de buen gusto. Sin embargo, lo más importante es que Lena estaba cocinando. Y no solo cocinando, ella estaba haciendo tortitas .
"Buenos días dormilóna. Te pasaste anoche "La genio habló, sonriendo.
"Hola" kara habló con timidez.
"¡Hice el desayuno!"
"¿Qué paso anoche?"
"¿Quieres que te responda honestamente?"
"Oh mi ... que mal eh. Sí"
"Bueno ... gritaste 'Lena, quiero que me engañes' me llamaste y luego llegamos aquí" Lena se rió. Kara se sonrojó y se sentó en silencio en uno de los taburetes alrededor de la encimera de mármol frente a Lena. La morena sacó un plato del armario y le sirvió a la kryptoniana un montón de tortitas. Comieron en silencio hasta que Lena decidió preguntar; "No bebes mucho, solo fue un vaso"
"Nunca bebo" murmuró la rubia mirando su montículo de potsticker.
"Kara? ¿Estás bien?"
"Lena, lamento mucho lo de anoche".
"No, no te preocupes por eso. Fue divertido. Está bien si te arrepientes pero realmente está bien "
"Yo ... quise decir lo que dije" La kriptoniana se sonrojó más profundamente "Que tienes calor"
"¿Y la otra parte?" Lena preguntó tímidamente.
"Bueno, yo ... ¡Lena!" ella se quejó.
"Puedes ser honesto, sabes".
"Lo hice ... quiero decir ... ¿Qué hicimos? ¿Te forcé a las cosas? ¿Nos... dormimos juntas? La kriptoniana tartamudeó. Lena comenzó a reír suavemente.
"No Kara, nunca me aprovecharía de ti así. No te preocupes, dormí en el sofá.
"Oh..."
"Pero escucha Kara ... Si quisieras decir lo que dijiste ... ¿Podríamos?" ella levantó una ceja. Kara se sonrojó, su mente le escupió ruidos de fax.
"¿Qué podría?" Preguntó inocentemente incluso mientras le ardían las mejillas. Lena se acercó con confianza y se presionó contra los labios de kara. La mente de Kara no registró nada de eso, todo lo que sabía era que este momento era fugaz y quería aferrarse a él.
