Habló un soldado de las puertas del castillo haciendo una reverencia.
Abrieron las puertas, ella ingreso inmediatamente sin mirar a nadie, subió por unos peldaños siguiendo el aroma de su cachorro llegando a la habitación de él y golpeó la puerta con suavidad.
—madre.
Ingreso y vio a su cachorro en el balcón, su vista fue dirigida a un bulto en su cama.
Sesshomaru se giró a ella pero la atención de su madre estaba en la joven dormida.
Irasue: ¿para esto me has llamado?.- Pregunto desinteresada.
Sesshomaru: no.- Camino a la cama y observo a la joven.- ella es mi compañera, por ahora se encuentra dormida.
Irasue: despiertala, quiero hablar con ella.
Sesshomaru: lleva más de seis días en ese estado, su padre me dijo que le otorgó inmortalidad y no despertará hasta que su cuerpo se adapté, su nombre es ___ hija de un dios y una humana.
Irasue: es un híbrido.- Lo miró severamente.
Sesshomaru: no, por su energía lo corroboras.
Aprovecho la ocasión de contar todo lo que Zeus le dijo respecto a ella y lo que ___ le reveló hace un tiempo.
Irasue: ¿estas seguro de desposarla?, en el momento de cópular puede que sienta temor por lo que le hicieron esos repulsivos humanos y la temporada de celo está al comienzo de la próxima luna.
Sesshomaru: un obstáculo menor.
Irasue: debes recordar que cualquier macho qué olfatee una hembra sin marcar la montara hasta dejarla preñada.- Se dirigió a la puerta de la habitación y la abrió.- cuando despierte adviertela de ese peligro.
Dejó a Sesshomaru pensando acerca de la decisión que debería tomar, si no se lo revelaba la ponía en riesgo pero si le advertía la presionaria para que lo dejara montarla.
[...]
Me despertó un horrible dolor de cabeza, por le tacto sabia que me cubría un edredón cálido, al abrir mis ojos observe a mi alrededor confundida.
Estaba en una habitación decorada con muchos objetos hermosos, algunas talladas con mucha delicadeza, me levante y camine a un ventanal grande que daba a un pequeño balcón.
El cielo estaba naranjado con suaves toques de amarillo y gris por algunas nubes, volví a mirar al interior y de alguna forma sabía que esta habitación era de alguien que conocía, me transmitía una tranquilidad abrumadora.
Me dirigí hacia una puerta doble con una luna en cuarto menguante dibujada y deliniada con algo dorado.
Al abrirla me mostró un pasillo largo adornado por pilares de piedras sosteniendo jarrones con flores y algunas hiervas pequeñas que caían con elegancia en cada lateral de las puertas que había.
Al tocar un pétalo de una flor sus colores se intensificaron, el polen de su núcleo brillaba en parpadeo, al dejar de tocarla algunas partículas del polen flotaron destellando luces tenues, toque la tierra y todas las flores del jarrón se vieron de la misma manera.
Sonreí y toque la tierra de los jarrones del pasillo, para cuando termine todas las flores de los jarrones soltaban destellos de luz dejando el pasillo como una imagen de algún cuento mágico.
Giré en una esquina y baje por una escalera que me llevó un salon amplio con sus paredes de color crema el cual tenía tres puerta, al abrir una observe un enorme jardín con muchos tipos de plantas.
Me senté sobre el pasto tierno apreciando la tibia brisa, recorde sobre un deseo que tenía desde que supe de mis poderes y no podía lograrlo en ese momento, pero ahora creo que será distinto, cerre los ojos visualizando mentalmente el jardín junto a las flores del interior brillando con su fuerza vital.
Volví a abrir mis ojos y habían pequeños destellos flotando a mi alrededor como si fueran luciérnagas, las venas de las hojas en los árboles destellaban con sutileza, las flores, los arbustos, todo tenía su propia luz demostrando la vida en ellos.
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Algo calló sobre mi cabeza y al acercar mi mano unas patitas saltaron a ella, al bajar a la altura de mi rostro y era una pequeña ave lastimada en una de sus patas.
Mi mano brillo sanando su pata,el ave pío antes de batir sus alas yéndose con otros de su especie, me levante para volver a aquella habitación y al girar mi cuerpo vi a muchas personas observandome, una de ellas en particular era Sesshomaru.
Se acercó hasta quedar en frente y beso mis nudillos de la mano izquierda, subí mis manos a su nuca y lo acerque a mi rostro tocando nuestras frentes, las personas nos dejaron solos en aquel mágico jardín que se oscurecia por la escasez de luz solar pero alumbrado por las pequeñas luces que levitaban.
