CAPÍTULO 14b La Leyenda De Liocott

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-¡Arisa! ¡Arisa! - ¿Marky? ¿Caleb?

Me desperté lentamente mientras un fuerte pinchazo invadía mi cabeza y notaba como todas mis extremidades estaban encadenadas. Abrí poco a poco los ojos mientras los gritos con mi nombre se escuchaban mas cerca, no podía responder no tenía fuerza.

-¡Arisa!. -Levanté mi vista del suelo y allí estaban algunos miembros de japón y Celia junto a Thiago, Dylan y Marky. Los demás han debido de ir a por Sue.

-Creí haberos dicho que no os metieses en los asuntos divinos, mortales. -Dijo mi captor.

-¡Sueltala Destra! -Grito Marky. Menudo nombre.

-Me temo que eso no es posible, vuestra amiga es necesaria.

-¿Qué quieres decir? -Por una vez Jude pregunta algo que me interesa.

-Arisa será nuestro sacrificio hacía el rey demonio aunque...-Se acercó mucho a mi y agarrandome del mentón, me hizo mirarle a los ojos mientras nuestras narices estaban casi juntas. -A mi también me parece desagradable tener que entregar todo este increíble poder y belleza. -Su vista se volvió seria y mientras dijo lo siguiente me soltó la cara enfadado. -Esto le pasa por entrometerse en las decisiones divinas.

-¿Que? -Volvió a preguntar Jude.

-Ja, sois más ingenuos de lo que parece, mira que no daros cuenta de su poder. -Todos a excepción de Caleb y Marky me veían confusos.

-¡Devuelvenosla!- Ordenó Hurley.

-¿Queréis que libere al sacrificio? -Preguntó con una sonrisa ladina Destra. ¿Que estas tramando?

-¡Si! -Gritaron todos a coro.

-Está bien, usaremos vuestro método humano denominado fútbol. Si ganamos nos la quedamos, si perdemos el sacrificio es todo vuestro. -¿Por qué tengo la sensación de que pase lo que pase no me voy a librar tan fácilmente?

El partido iba a empezar y yo solo podía limitarme a mirar mientras las cadenas me seguían sosteniendo. Tenía miedo por lo que el DarkTeam pudiese hacerles a los chicos y mis peores temores se confirmaron cuando estés empezaron con el juego duro. Cada vez que Destra se acercaba a Marky o Caleb se me acortaba la respiración. Vamos Arisa, Dark te entrenó para esto. Creo que pese a mis intentos de disimular Destra se dio cuenta de esa debilidad por lo que la mayoría de ataques iban hacía ellos dos. Es como volver a estar en el campo de la Royal con Joe y Dark.

No podía soportarlo más eso no era fútbol, cerré mis ojos y me concentré en mis manos donde cientos de pequeñas esferas empezaron a salir hacía el campo. Las coloqué delante de Caleb puesto que era el que iba a recibir el balonazo y conseguí ralentizar el golpe sintiendo yo el dolor. No se cuanto tiempo podré hacer esto pero es mejor que nada. 

Jude miraba confuso a Caleb, no entendía como seguía en pie después de ese golpe. Caleb por su parte me miraba intentado encontrar en mi mirada la respuesta que quería.

-¡Ja! -Rió Destra volviendo a coger el balón y preparándose para chutarlo contra Marky.

Volví a mover las esferas, esta vez delante de Marky y lo que parecía un tiro imposible de resistir fue suavizado por mi poder provocandome dolor pero dejando a mi amigo de pie.

-¡Eres mejor de lo que pensaba! -Volvió a gritar Destra al aire sin mirar a nadie.

Como pude esbocé una sonrisa y pese al cansancio que tenía por estar controlando tantos puntos de oscuridad seguí toda la primera parte evitando daño innecesario a mis dos chicos, puesto que eran los únicos que ahora recibían ese juego duro. No puedo mas.

La estúpida princesa de la oscuridad~Inazuma ElevenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora