Especial 10K: Ladrón robado

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7 MESES ATRÁS.



-No importa Fargan, lo haremos sin ti.

Su sonrisa inocente le entrecerró los ojos. Su cara de ángel era incuestionable, no existía nadie en la tierra o en el cielo al que Willy no pudiera manipular con esa sonrisa, y muy pocos sabían leer las intenciones detrás de tan bonito gesto. Los presentes allí no eran una excepción.

-No es justo, yo también quiero reventarle la casa a Lolito.

-Eso te pasa por presentarte a policía -Rubius se reía de Fargan.

-Como me entere de quién ha sido el rata de los agujeros le reviento la casa, ¡los asuntos de la Hermandad son sagrados!

Willy seguía sonriendo mientras Fargan seguía quejándose. Él mismo había llenado Karmaland entera de trampas. Los aldeanos no hacían más que caer en ellas y en la ciudad el ambiente de malestar estaba a punto de costarle la cabeza al recientemente nombrado, alcalde Lolito, por lo que el pelirrojo se vio obligado a nombrar al mismísimo Fargan agente de policía, con tal de que alguien solucionase el caos formado. Alexby, el también recién nombrado comisario, no hacía más que llamar a Fargan por el dispositivo divino para reunirse.

-Lo siento Fargan, otra vez será. Pero de todas formas nos vendrá bien que tengas ocupados a Alexby, a Lolito y a Auron, mientras Rubius y yo nos ocupamos de todo.

-Que asco que dais. Ratones.

Fargan emprendió la marcha hacia la ciudad y los otros dos chicos se acomodaron las máscaras de la Hermandad Oscura sobre sus rostros.

-¿Listo Bromas?

-Ya tardamos.

Faltaba poco tiempo para el anochecer, Rubius salía de la casa de Lolito para encontrarse con Willy, que lo esperaba no muy lejos, en la parte de atrás

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Faltaba poco tiempo para el anochecer, Rubius salía de la casa de Lolito para encontrarse con Willy, que lo esperaba no muy lejos, en la parte de atrás. Los dos habían colocado más de veinte TNT cada uno y solo faltaba mandar la nueva casa del nuevo alcalde, a mejor vida.

-Casi me da pena que Fargan no pueda ver esto -comentó el albino.

-¿Lo dices enserio? -se rió Rubius.

-Naaaaaaa. El rata se lo buscó.

Levantó el control remoto, con ese enorme botón rojo bajo su pulgar, que atrajo la mirada de Rubius al instante, debajo de su máscara estaba ansioso porque lo presionase. Pero Willy no lo hizo, su mano bajó olvidándose de lo que había estado a punto de hacer.

-Luego podemos esperarlo en la Base Oscura.

-Aaaah, lo siento Willy, ya he quedado con Vegetta, vamos a volver a buscar meteoritos.

Olor a manzanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora