28. DESVERGONZADA

1.1K 82 20
                                    

Durante la tarde había estado dando vueltas sin poder creerse las palabras que Borja le había dicho, una vez entrada la noche aquellas palabras cobraban credibilidad en la cabeza de Cayetana quien se angustiaba a esperas de que su hija y su sobrino llegaran, pero llegó el día siguiente y en la habitación de su hija no había rastro de ella, no había llegado a dormir a casa ni ella ni tampoco Samuel...

El sonido del mar y la brisa se colaban en aquella habitación en la que por primera vez Samuel y Andrea dormían como personas normales, ella sentía el calor de sus brazos apretándola fuertemente sin opción a huir a ninguna parte, hizo varias muecas antes de abrir los ojos y verle allí acostado a su lado, hizo que de nuevo los remordimientos comenzaran a aparecer.

Samuel: no le des más vueltas-la apretó de nuevo acercándola a su desnudo cuerpo y abrió los ojos mirándola.

Andrea: es imposible no dárselas, Samuel-suspiró mirando su torso- hemos dormido juntos... y esta vez nadie nos ha encontrado.

Samuel: esta vez tampoco te has ido-ella sonrió.

Andrea: no me has dejado opción-acarició sus brazos mientras él la miraba.

Samuel: quedémonos aquí para siempre... hagamos vida en otra ciudad donde nadie sepa de nosotros y podamos estar juntos...

Andrea: ¿dejarías todo lo que tu padre te dejó por mi?-él suspiró.

Samuel: si...-ella sonrió y se acercó a besar sus labios.

Andrea: sabes que no podemos...

Samuel: yo ya me rendí a este sentimiento, ¿por qué sigues luchando?

Andrea: ¡Somos primos Samuel!-se apartó de él y envuelta en las sábanas se levantó de la cama, Samuel se apresuró a ponerse los calzoncillos para salir detrás de ella.

Samuel: vale, Andrea, somos primos, ¿y qué? ¡Igualmente te quiero!-ella se giró viendo como él lo daba todo por ella, como desde que se acostaron en el ático estaba dándolo todo por ella.

Andrea: desde que regresé a la hacienda no hemos hecho otra cosa que hacernos daño, nos hemos estado haciendo jugarretas el uno al otro y yo todavía no olvido que me hiciste organizarte una fiesta de compromiso con Patricia, además de que le has dado unas acciones a Flavio que me correspondían a mí.

Samuel: vigila esa avaricia Andrea, empiezas a parecerte a tu madre.

Andrea: ¡Pienso en mi futuro!

Samuel: ¿Y crees que mi dinero y el de Borja te la dará?-ella se quedó en silencio sabiendo perfectamente que el único dueño de su felicidad era él, pero no podían, no se lo podían permitir.

Andrea: ¿Sabes que es la endogamia?-Samuel dio un suspiro resignado-esto lo es-se señaló a ambos-¿sabes cuantas probabilidades hay de que si tenemos un hijo pueda salir con alguna malformación o algún tipo de problema?

Samuel: ¡Hay más opciones!

Andrea: ¿¡Como cuales!? ¿Adoptar? ¿Que tengas un hijo con otra mujer o yo con otro hombre para criarlo como nuestro? ¡NO! ¡Yo quiero hijos propios Samuel! ¡Míos y de la pareja con la que esté! Y esta relación de incesto no nos lo va permitir, fin de la discusión...

***

Borja entraba en la hacienda Gallardo, durante varios minutos el joven esperó solo sin que nadie lo recibiera, Cayetana lo observaba desde su habitación decidiendo que era mejor no bajar para no desvelar que Andrea no había dormido en la casa y que sus palabras cobrasen mayor fuerza, sin embargo vio a Patricia salir de la casa a recibirlo viendo como todos sus planes se tambaleaban.

PECADO CAPITALDonde viven las historias. Descúbrelo ahora