PECADO CAPITAL

37. ¿Quieres que me vaya?

Flavio e Irina por fin se habían convertido en marido y mujer, Samuel observaba atentamente como aquella pareja desprendía felicidad y emoción por todos los poros de su piel sintiendo una enorme envidia de aquella dicha, mientras, Andrea seguía hablando con el cura que ofició el enlace.

Irina: ¡No me lo puedo creer! ¡Ya soy tu mujer!-alzó su anillo de casada al mismo tiempo que su marido besaba sus labios-y tú mi marido... ¡qué bien suena eso!

Flavio: al final conseguiste atraparme, loquita...

Irina: sin Andrea y sus planes locos a la vez que fallidos creo que nunca lo hubiese conseguido-soltó una carcajada mientras él fruncía el ceño sin entender.

Flavio: no sé qué quieres decir con eso, pero ahora deberías cambiarte-ambos resoplaron-debemos ir a la hacienda de tu hermano, hablaré con él y después de esto te vendrás conmigo a la hacienda Gallardo.

Irina: hablar con mi hermano...-dio un suspiro y pasó la mano por su frente-debería considerarse deporte de riesgo extremo.

Flavio: ni tan extremo, por mucho que diga y se ofusque ahora eres mi mujer... y te vendrás conmigo, viviremos con Samuel por el momento, pero pronto tendrás tu casa, no permitiré que vivas en ningún lugar indigno de ti.

Irina: cualquier lugar que escojas será digno de mi si tú estás conmigo-Flavio sonrió embobado y le dio un beso en los labios.

Flavio: ve a cambiarte preciosa...

Irina sonrió una vez más, se alejó de su marido y se encerró en un pequeño cuarto de la capilla, allí se acercó a su mochila para tomar otro tipo de ropa más acorde a la situación, tenía que plantarle cara a su hermano, decirle la verdad, decirle que se había casado con Flavio, que ahora viviría con él, que se iría a vivir su vida... Y consideraba prudente no hacerlo con el vestido de novia puesto.

Borja: si estás pensando en que decirme puedes ahorrártelo-Irina se giró sobresaltada viendo a su hermano entrar por otra puerta-ya sé lo que vas hacer y no te lo pienso permitir.

Irina: llegas tarde-alzó su mano-ya lo he hecho-Borja frunció los labios-Flavio es el amor de mi vida, ahora es mi marido y es la persona que escogí para pasar el resto de mi vida, me voy con él.

Borja: eso si yo te lo permito.

Se acercó a ella tajantemente y la agarró del brazo, Irina opuso resistencia mientras que su hermano intentaba llevársela de aquel lugar, Irina hizo un amago de soltar un grito pero Borja rápidamente le colocó las manos a su boca para evitar que se enterasen de aquel encontronazo entre hermanos y comenzó a arrastrarla hasta que cerca de la puerta, cuando la estaba sacando de la capilla, tiró con algunas sillas provocando un fuerte ruido.

Flavio: ¿habéis escuchado eso?-Andrea se reunía con ellos.

Andrea: ¿Qué ocurre?

Flavio: he escuchando un fuerte ruido en el cuarto, Irina está dentro cambiándose.

Samuel: se le habrá caído algo.

Flavio: voy a mirar-se acercó a la puerta.

Tocó brevemente sin obtener una respuesta inmediata, entró y el corazón se le paró al no ver a Irina en aquel lugar, su ropa estaba tirada y la otra puerta que daba acceso al exterior estaba abierta, corrió hacia la puerta dándole tiempo a ver claramente el coche de Borja Herrero dejando una fuerte polvareda.

Flavio: ¡¡SE LA HA LLEVADO!!-de nuevo volvió a junto de Samuel y Andrea quienes se quedaron estupefactos-¡Acabo de ver el coche de Borja, se la ha llevado!

Andrea se quedó petrificada ante aquella información que le llegaba de golpe, vio como Flavio se montaba rápidamente en el coche de Samuel y se iba mientras que Samuel miraba a Andrea atentamente quien comenzaba a estar palidecida, estaba claro que había sido su madre quien le había dado el aviso a Borja de lo que estaban haciendo y aquello le rompía el corazón.