Honey Honey

19. Frikeando sobre algo

¡Hola mazapanes!

El día de los les traigo un AU normalito que me quede largo porque sigo incursionando en esto de no hacer pinches AU que quedan más largos que ciempiés. La verdad me divirtió mucho hacerlo más que nada porque usé nombres europeos a los que de a poco les voy tomando mas gusto not gonna lie

Abróchense porque será una lectura algo larguita

Gócenlo~

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¿¡Quienes se creía ellos!? ¿Acaso no se daban cuenta de a quien estaban echando del equipo? ¡A él! ¡ÉL! Un centrocampista mucho mejor que el ace sticker podría ser jamás, que fue gracias a él que anotaron los goles necesarios para poder calificar en el torneo del año pasado y en el de este año llegaron incluso a las semifinales.

Malagradecidos, eran todos una panda de malagradecidos. ¿Podía tener cierto problema con su mal humor? Quizá, a ver, él exigía a los demás lo que se exigía a sí mismo. Si alguien terminaba llorando por cómo le gritaba, era cosa suya, él no se juntaba con debiluchos en el campo. No si quería ganar.

. — ¡Jordan, espera! —. Le gritaba una voz femenina a la distancia. Su amiga Pandora, corriendo a todo lo que le permitía su fuerza tras el entrenamiento, llegaba a su lado con suplica en sus ojos. — Que ya no seas capitán no significa que te estemos echando del equipo-

El moreno la cortó. — Mira Pat, a otro perro con ese hueso. Claramente creen que no puedo llevarlos a la victoria, y si no les sirvo para eso pues no les serviré para nada—. Pretendía volver a irse de no ser porque la chica lo detuvo tomándolo del brazo.

. — Vamos, Jordi—. Empezaba, sabiendo bien como el chico tenía su costado suave cuando lo llamaba por ese apodo. — Fue decisión de la entrenadora, no nuestra. Aun te queremos en el equipo, te lo juro.

. — Si amas algo, déjalo ir, Box—. Se soltó a regañadientes, sumamente ofendido cómo la chica que nunca llama por el apellido. El sabía perfectamente como la entrenadora Aquilina no hubiese tomado esa decisión tan repentinamente de no ser porque sus compañeros se lo rogaron. Maldición, la adulta siquiera le ocultó que fueron sus propios compañeros quienes se lo pidieron. — Y si te ama devuelta, ya volverá.

Pat entendió. "Veremos cuando se me pase el calentón". Ella nomás se quedó allí viendo a su ex capitán alejarse, esperando que no cogiese alguna pelea con un desprevenido estudiante que tuvo mala suerte de cruzarse en su camino.

Jordan Greenway era... bastante impopular, por ponerlo en palabras cortas. Tenía una actitud autoritaria, sádica y repelente. Todo el alumnado supo no reírse de Greenway cuando le rompió la nariz al primer payaso que aseguró que su sabiduría en refranes era ñoña.

Tan solo aquellos que podían darle una paliza y sobrevivir eran más respetados que él, aunque no mejores, porque seguían siendo delincuentes. Irónicamente el que peor paliza le dio alguna vez a Jordan fue el superior Dave Quagmire, mejor conocido entre los suyos como Dvalin meramente porque sonaba genial e imponente. Dave, lejos de ser un delincuente, era en su momento el capitán del equipo de futbol en su tercer y último año en el instituto Alius; mostrándole su lugar a Jordan meramente porque usó un balón de futbol para destruir propiedad del colegio para acertar dominancia.

Quagmire sí que le había acertado unos buenos puñetazos. Pero lejos de encabronarse, en Greenway creció un gran respeto hacia el portero. Llegó incluso atarse el cabello en una coleta cómo él y meterse en el club de futbol cuando Dave se graduó, prometiéndole ganar la copa que en su era no se pudo conseguir.