Delicate

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Capítulo 7

Escucho el eco de sus pisadas en las escaleras, tan distantes ... arrugo la sábana debajo de mi mano, cerrando fuertemente los ojos mientras froto mi cabeza contra la almohada. Me incorporo ligeramente en la cama aún con la sábana sobre mi, la cual cae un poco dejando mi hombro descubierto. Miro hacia la puerta, pensando en ese chico, en Takano Masamune, no se como vaya a volver a casa, ni siquiera se donde vive, o si vive aquí siquiera, realmente no debería importarme, no debí siquiera haber hecho esto ... " tu novia ... si se entera" "no tiene por qué enterarse" fue lo ultimo que nos dijimos antes de caer dormidos abrazados.

Una parte de mi no sabe por qué sigo haciendo esas cosas, poner a los demás antes que a mi, mi cerebro me reclama diciendo "es lo correcto" pero todos aquellos que se metieron con ese sujeto no lo pensaron, no les importaba si me herían, a pesar de saber bien que estábamos juntos, todos lo sabían después de todo. Entonces pensé en "solo esta vez", solo por esta ocasión decidí hacerlo, no es como que vaya a volver a ver a ese chico de nuevo, ni siquiera se quien es realmente, entonces supuse que estaría bien, no traería consecuencias y podría pasarle bien después de tanto haber llorado, y vaya que la pasé bien, nunca había estado con alguien tan bueno en la cama ... supongo que al menos hice algo bien después de tanto.

Me levanto de la cama y busco mi ropa por toda la habitación, colocándomela en cuanto la encuentro, pero tardo más buscando mi corbata, hasta que veo que sigue atada a la cabecera de la cama, y en seguida mi rostro se enciende cual luces navideñas, Dios mío, ¿hice todo eso ayer en serio? Pensándolo ahora, me duele todo el cuerpo, llevaba mucho sin hacer nada de esto. Miro la cama, hecha un desastre, la sabana que cubre el colchón está completamente desacomodada, sin mencionar lo sucia que la dejamos, muchos fluidos, pobre del que tenga que lavarla. Desamarro rápido la corbata y tomo el resto de mis cosas para salir de la habitación.

Me detengo un momento en la puerta, sigo sin entender como llegué a esto, respiro profundamente, disfrutando del fresco aire de la mañana, quizá esto ayude un poco a despejarme. Continuo por el pasillo y bajo las escaleras de forma lenta, así el dolor está mucho más presente, es como una punzada en la parte baja de mi columna, que me dificultar caminar. En la recepción pregunto sobre los cargos extras, pero al parecer él ya ha pagado todo, eso me hace sentir algo culpable. Camino lentamente hasta mi auto, arrastrando los pies, aunque pasé una noche increíble me siento mal, me duele la cabeza, el estomagó, y todo mi cuerpo en general, una noche de sexo desenfrenado no estaba en mis planes, y llevo días sin dormir, es lo único que quiero ahora mismo, dormir, dormir y olvidar que esto pasó, así quizá también logre olvidar mi culpabilidad.

Abro la puerta del auto y entro al asiento del pelito, me quedo ahí sentado sin saber que hacer, seguramente hasta olvidé ya como conducir, ¿que estoy haciendo? ... y lo único que atino a hacer es golpear mi cabeza contra el volante una y otra vez. Luego me quedo ahí un momento, frotando mi frente contra el objeto, me dejo caer en el asiento suspirando. ¿No es esto lo mejor? Mi reputación nunca había sido tan mala ... mi vista va hasta el espejo retrovisor, en donde veo su saco junto al mío, en el asiento trasero, mierda, lo había olvidado. Me estiro y lo tomo, es casi en automática mi reacción y abrazo aquella prenda, huele a él. La acerco hasta mi cara e inhalo, es embriagante, la mejor droga que pueda existir es el aroma de una persona, y el suyo es adictivo. Mis pensamiento hacen que mi piel se erice, esto es peligroso.

Pongo el saco en el asiento del copiloto y me pongo el cinturón de seguridad, es hora de irme, pero no quiero volver a casa aún, enciendo el carro y salgo del estacionamiento del motel. No entiendo como hay gente que sale con alguien una noche y a la mañana siguiente salen como si nada hubiera pasado, no puedo fingir que no ha pasado nada, y lo peor es que se muy en mi interior que lo volvería a hacer, si no hubiera sido en esa fiesta, hubiera sido en otra, porque Dios mío, ese chico lo era todo, me imagino tantas cosas divertidas que pudimos hacer ... ¿está bien que haya dicho todo eso?, ¿está bien que esté en mi cabeza? Porque se que esto es delicado. Nunca olvidare esto, en el tercer piso de un motel, él era como una mansión con una vista hermosa, una noche larga con sus manos en mi pelo. Cuando lo escuché levantarse estuve a punto de decirle "quédate aquí", porque no quiero compartirlo, porque me gusta, de verdad me gustó. Pero aunque lo quiera, debo recordarme que fue solo una noche, y muy probablemente no volveré a verlo nunca.

Cruel Summer  [Sekaiichi Hatsukoi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora