Pro-20J

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🧠👥

Divido entre quien era

Y quien solía ser

El reflejo, con mano de muerte

Entre sus garras lo atrapó.


Su corazón

a gritos sordos

Imploró por el alivio

Un alivio intangible

Que entre aguas oscuras perdió.


Perdido entre lagunas

Perversas

Fue succionado

Profundo

Hasta lo más denso.


Para que en su pecho marcara

Lo que su ser fragmentado

Se adueñara

Al recordar.

Al recordarme.


🧠👥

La lluvia y la ausencia de un paraguas hizo que sus zapatos sonaran gracioso mientras corría, en mitad de la madrugada, hacia su edificio. Su oído izquierdo, inundado de agua dulce y sangre agria, dejaba pitidos dolorosos en su cabeza cada cierto segundo que su pie chocaba fuerte contra el pavimento mojado.

Detrás suyo percibía los gritos lejanos y los pasos desesperados del Doctor J, pero nada lo hizo detenerse. Nada en el mundo podía detenerlo en ese momento.

Porque había encontrado una parte más del puzzle de su cabeza. Y algo muy dentro de él sabía que al fin podría obtener respuestas. Parpadeó rápido para alejar el agua de sus ojos, mientras repetía la información que, forzosamente había podido conservar en su cabeza.

Ahí estaba, ahí estaban las respuestas.

Taehyung.

Ese era. Esa era su persona.

Dijiste que serían dos meses, la ciudad se siente extraña.

¿A dónde había ido? ¿Por qué se había ido?

Se tardó más de lo que esperaba.

¿Qué se había tardado? ¿Estaba su persona atascada en alguna ciudad por el colapso en las fronteras por su tardanza?

¿Estás dejándome?

¿Jungkook iba a dejarlo? ¿Por qué iba a dejarlo? ¿Estaba cansado de esperarlo? ¿Se había mudado aquí por él?

El persistente ruido de su cabeza no dejó que escuchara al hombre que, tras suyo y tan empapado como él, imploraba su pausa.

—¡¡Jungkook!! ¡¡Detente, por favor!!

Fragmentado «KookTae»©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora