desconocidos ~ Shawn mendes

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_pov Shawn_

a La noticia nos golpeó como un torrente helado.

Según tengo entendido, Sofía, Nathen, Mila y yo recibimos las cartas de despedida de Tina, sin olvidar a su padre.

La noticia se difundió rápidamente en las redes sociales, dejándonos a todos en estado de shock. La gente pedía pruebas o que alguno de nosotros desmintiera la noticia, pero era real: Tina ya no estaba con nosotros, y carecíamos del coraje para confirmarlo. Estábamos sumidos en el luto.

Camila y yo comenzamos a asistir a terapia psicológica, la noticia fue demasiado impactante y necesitábamos ayuda profesional.

Todavía no he superado su pérdida, y no sé si algún día lo lograré.

Aún no comprendo por qué lo hizo, ella parecía tan feliz. A pesar de todo, ella irradiaba felicidad.

Me culpo por no haber intervenido a tiempo para ayudarla.

Camila es la más afectada. Ha dejado de comer, y aunque ambos hemos adelgazado, su deterioro es aún más evidente. Sus ojeras y su sonrisa rara vez aparecen.

Ambos nos hemos refugiado en la composición de música.

Jordan se llevó a Aaliyah a España para distraerla. No quería que ella también necesitara terapia psicológica. Es solo una niña y quiero que sea feliz. Aunque, según me contó mi madre, lloró durante tres días encerrada en su habitación cuando se enteró.

Aunque Nathen esté casado y a punto de ser padre, también se vio muy afectado. Tina fue su primer amor y iba a casarse con ella. Me siento culpable por haberme entrometido.

Mis dudas siempre persisten. ¿Y si ella realmente quería casarse con él, pero yo la confundí?

Nathen me llamó llorando, diciendo que la culpa era suya por invitarla a su boda.

Oh, amigo, si supieras que yo también tengo la culpa.

Durante los primeros dos meses después de la noticia, Camila y yo nos encerramos en mi departamento en Los Ángeles.

En la tercera semana, comenzamos a recibir ayuda psicológica.

En la cuarta, todavía no me atrevo a visitar su tumba.

En la quinta, sueño con ella todas las noches y siempre intento salvarla, pero siempre llego tarde.

En la sexta semana, me tomé un descanso de la música.

En la séptima semana, estas navidades no fueron las mismas.

(...)

—¿Tú qué opinas, Shawn? —dijo ella, mordiéndose la uña nerviosa.

—Si tú lo deseas, yo también lo deseo. —tomé su mano y la miré a los ojos. —Quiero compartirlo todo contigo. —nos abrazamos.

—Siento su presencia. Siento que está con nosotros. —dijo ella.

—Ella sigue aquí con nosotros, cariño. —respondí, cerrando los ojos y recordando las palabras de Tina en la carta.

“No derrames lágrimas por mí, Shawn, no lo merezco. Recuérdame siempre y no digas que me has perdido, porque no me he ido.
Estoy presente en el viento que acaricia tu mejilla, en las flores, en las estrellas que brillan en la noche, en la melodía de los pájaros que cantan junto a tu ventana, en la sonrisa de tus hijos por venir. Permanezco en tus recuerdos y en tu corazón.”

—Permanecerá en nuestros recuerdos y en nuestros corazones", suspiré— conteniendo las lágrimas.

4 meses después.