desconocidos ~ Shawn mendes

-015-

_POV Shawn_

Llevaba un hermoso vestido celeste, haciéndola parecer un ángel.

—Me gusta tu vestido —comenté.

—A mí, no —respondió ella.

—Entonces, ¿por qué te lo has puesto? —pregunté, mirándola.

—Porque no tenía otro —sonrió, con un tono sarcástico.

—Bueno, pero a mí me gusta —dije, notando cómo sus mejillas se sonrojaban.

—¡Shawn! Es hora —apareció Maddie.

—Ahora vuelvo —dije.

—No te preocupes por volver —dijo ella, y solté una carcajada.

(...)

Después de cantar "Try My Best" para los novios, decidí buscar a Martina. La encontré escondida entre unos arbustos, tomando tequila y murmurando palabras entre lágrimas, evidentemente borracha.

—No entiendo por qué vine —suspiró—. ¡Qué estúpida soy! —gruñó—. Todos deberían saber que fui su primer amor, ¡La primera! y no esa estúpida muñeca Barbie —suspiró—. Estúpido Shawn.

—¿Y yo por qué? —se sobresaltó al escucharme.

Se giró y me miró.

—¡Nunca debiste haber aceptado! —exclamó en voz alta, y revisé si alguien estaba cerca, pero todos estaban adentro bailando.

—Martina, cálmate.

—¡No me llames así! —su maquillaje estaba corrido—. Por mi culpa, Camila está con el corazón roto.

—No es tu culpa.

—¡Sí lo es! —terminó su trago—. ¿Por qué demonios no mejor me ignoraste aquella vez en el hotel? ¿Eh? Ahora todos seríamos felices —sonrió mientras se tambaleaba.

—No digas esas cosas, estás borracha.

—Los borrachos dicen la verdad —sonrió—, y tengo ganas de decir la verdad.

—¿De qué hablas? —pregunté confundido.

—¿Cómo crees que reaccionarían todos si supieran que fui la ex comprometida de Nathen? ¿Que lo hice cornudo con su mejor amigo, o sea, tú? —rió.

—Martina —la agarré—, no dirás nada, porque no te dejaré.

—¿O qué? —me miró—. ¿Me besarás? —se rió burlona—. Te superé.

—Yo también, Martina, pero quiero recuperar a mi mejor amiga.

—Vete a la mierda —dijo, y comenzó a caminar, pero se volteó para vomitar en una planta.

—Lo que faltaba —suspiré.

Tomé una servilleta y la ayudé a limpiarse. No podía dejarla irse sola, tampoco sabía dónde se estaba quedando, así que preferí llevarla a casa.

Coloqué mi chaqueta sobre su vestido y nos subimos al auto que nos esperaba afuera.