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Sábado 6 de Junio.

Querido diario.

El alejarme del cabo Levi esta llamando más la atención, sabía que no sentiría nada al ver morir a personas que no son su equipo, pero aún así no puedo perdonarlo, estaban a mi cuidado, pero no me ofreció ninguna palabra, no esperaba que lo hiciera...

Eren se dió cuenta que me había distanciado ¿qué debería hacer entonces? ¿Regresar a sus brazos? Espero que no sea esa la respuesta.

Creo que puedo conceder tu deseo, Petra.

X

El comedor contaba con unas bancas vacías y con suerte comida para todos, al ser Sábado tenían el privilegio de probar el sabor de la carne.

—___(Tn), perdón por meterme, pero ¿de verdad esta bien estando aquí? —el chico de cabello castaño había aguantado unos cuantos minutos sin hacer la pregunta.

—Esta bien Eren.

—¿Segura?

—¡Eren, ya tienes la respuesta! —Armin parecía más nervioso que su amigo, quizá era por la presencia de la chica o por el hecho de que podía sentir la mirada del capitán a sus espaldas.

—Si, esta bien.

—Pensé que comerias con el capitán Levi —al parecer Eren no estaba conforme con las respuestas tan simples que recibía.

—¿Por qué lo haría?

—Se ven muy cercanos.

—No lo somos —su voz parecía más seria de lo usual y su expresión tampoco ayudaba, estaba molesta.

—¿De verdad? Pero siempre comias con él y con el capitán Erwin y Hanji.

—Eren no creo que sea buena idea seguir insistiendo —de verdad quería detener a su amigo, quizá sus palabras estaban llendo más lejos de lo normal.

—Comía con él por temas de trabajo —la chica no levantaba la mirada, el apetito se había ido, pero no comer sería grave.

—¿Ya no trabajan juntos?

—Si, pero quería dejar las cosas claras, las cosas de trabajo se hablarían en su despacho, aún si conlleva a horas extras.

—¿Eso no sería alejarlo? —Por primera vez en todo el almuerzo la chica lo miró, Eren apartó la mirada.

—No se de que hablas.

—Perdón.

—¡___(Tn)! —Petra apareció con una sonrisa radiante en la cara, saludó con educación a los demás de la mesa y se dirigió a su amiga de nuevo —¿Acabaste?

—Si —mintió, el plato con algo de sopa y medio pan seguían casi intactos, la carne y la otra mitad había disfrutado comerlo.

—¿Podemos hablar un poco?

—Ahora voy.

—Te espero afuera, no tardes mucho —le dirigió una sonrisa y se alejó de la mesa.

La chica se levantó y con una mirada sería ordenó:

—Comanlo.

—¿Eh? Pero señorita, no ha comido mucho hoy —habló Armin un tanto alarmado.

—No lo necesito, así que aprovechar esto.

—¿Segura no quiere más? —Mikasa se atrevió a pronunciar esas palabras luego de un largo rato callada.

—No, nos vemos luego.

Y con eso salió de comedor, como había dicho, Petra la esperaba con las manos detrás y una sonrisa.

—¿Paso algo?

—La verdad... Quiero decirte algo ¿te importaría si vamos a nuestra habitación?

—¿Nuestra?

—No puedo decir que es mía, siempre hemos estado las dos, así que no estés es algo difícil de aceptar.

Sonrieron, (Tn) asintió con la cabeza antes de comenzar a caminar había su dormitorio, estaba tan impecable, no había ni un poco de polvo, se veía mucho mejor que cuando estaba ella.

—Puedes usar la cama, me quedaré con la silla.

—¿Segura?

—¡Claro!

Con algo de incomodidad (Tn) se sentó en la cama, estaba segura que no sólo quería hablar de algo, sino de alguien. Petra poco después acomodó la silla quedando a un lado de la cama.

—Se los problemas que has tenido con el capitán Levi —soltó Petra sin delicadeza ni tacto —, pero deberias entenderlo.

¿Entender que no siente compasión? Eso sería difícil, ella se quedó callada.

—Él también perdió a sus amigos.

—No son mis amigos, eran mi equipo.

—___(Tn)... —la miró preocupada y suspiró —quiero proponerte algo.

—Dime.

—Dejame hacer tu trabajo.

Los ojos de Petra parecían determinados, ¿su trabajo? ¿Se refería a llevar el té y quedarse despierta hasta tarde? ¡Claro que podía dárselo! Pero algo le molestaba, no quería que Petra sufriera como ella o quizá no la quería cerca del cabo.

—Petra, lo que me pides es demasiado, pondrás en riesgo tu salud.

—¡Tu lo has soportado muy bien!

—Es...distinto.

—¡Por favor solo quiero estar un poco más cerca del cabo! Te lo suplico.

Un suspiro salió de sus labios, sin decir nada se levantó y se dirigió a la puerta, antes de girar el pomo, con un nudo en la garganta pudo pronunciar:

—¿Puedo pensarlo un poco?

La desilusión de Petra había cambiado a unos ojos llenos de vida.

—¡Claro que si! Dame una respuesta cuando estés lista.

Y con eso salió de la habitación ¿de verdad cedería su lugar?























Espero que esta forma de escritura no sea cansada para ustedes. T-T

Querido diario. [Levi Y Tu] HAITUSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora