Styllins~ A New Beginning

El baile

El RAW acabado, la fiesta esperando a los trabajadores... La noche perfecta. Cada uno se preparaba en su camerino para vivirla.

Rebecca, Pamela, Ashley y Mercedes se encontraban en el de la pelirroja, ya arregladas a la perfección, parecían diosas. Estaban reunidas para echar un par de tragos y así calentar motores. Además, habían invitado a Leah (Carmella) y a Lexi (Alexa Bliss), por lo que estaban las seis con los vasitos, recibiendo la bebida de Ashley, quien, al acabar, alzó el suyo.

—Propongo un brindis. Porque hoy va a ser nuestra noche, señoritas. —anunció— ¡Salud!

—¡Salud! —repitieron las demás, brindando a la vez y luego bebieron. Sintieron que les ardía la garganta cuando el líquido bajó, pero así debía ser y soltaron todas a la vez un poco de aire.

—Esta mierda es buena. —comentó Leah, saboreándolo, las demás se rieron de su comentario.

En ese momento, alguien llamó a la puerta y, tras decidir quién abría con un duelo de Piedra, Papel, Tijera (Becky, ¿por qué tuviste que sacar piedra?), la perdedora se levantó y abrió la puerta, quedando boquiabierta.

—¿¡Saraya!? —las demás no creyeron que estuviese ahí Saraya (Paige) y fueron a comprobarlo.

Efectivamente, la Diva Antidivas estaba en la puerta, sonriendo y abriendo sus brazos, reclamando un abrazo.

—¡Pero bueno! ¿Tú qué haces aquí? —ellas abrazaron a la recién llegada y la hicieron pasar y sentarse en el sofá.

—He regresado. —dijo Saraya, simplemente.

—¿Cómo que has regresado? ¿Al ring? —preguntó Rebecca, rogando para que así fuera.

—Claro, con una lesión en el cuello que me impide subirme al cuadrilátero... —le respondió, sarcástica— No. Es que.... —hizo una pequeña pausa para mirar a sus amigas, una a una— ¡Soy la nueva Manager de RAW!

Ante el notición, las seis se pusieron a gritar y a saltar de emoción, abrazando a la pelinegra.

—¡Pero eso es genial! —exclamó Ashley.

—¿Y cómo es que te han vuelto a admitir? —le preguntó Leah.

—Será que están tan aburridos de querer readmitirla. —comentó Lexi.

—Dejadla hablar. —las calló Mercedes.

—Pues, como RAW necesitaba un Manager General, los McMahon pensaron en mí y me han contratado. —explicó Saraya.

—Pues no veas cómo nos alegramos por ti, colega. —le dijo Rebecca, pasándole el brazo por los hombros.

—Es bueno tenerte de nuevo. —sonrió Ashley, y entonces se percató de algo— ¡Aaah! ¡Vamos, chicas, que vamos a llegar tarde a la fiesta!

—Pero si faltan cinco minutos. —le dijo Lexi.

—Ah, ¿hay una fiesta? —preguntó la recién llegada, sin entender.

—Sí, es una larga historia. Si quieres venir, date prisa y arréglate. —le dijo Mercedes— Yo te presto un vestido si hace falta.

Los cinco minutos restantes los pasaron ayudando a Saraya a vestirse y a maquillarse para la gran noche.

Y esa no iba a ser la única sorpresa.

Por el lado de los chicos, Joe y Jon estaban junto a Colby; el Big Dog y el Lunático sentados en el sofá del camerino del Matabestias, quien se estaba retocando la camisa frente al espejo. Los tres iban elegantes e informales con unos vaqueros y sus mejores camisas.