Nigthmare- Zayn Malik

Capitulo 16

CALY POV

Creo en la magia desde que era pequeña. Creo que campanilla me va a dar un poco de sus polvos mágicos y que algún día, voy a volar. Creo que un día Peter Pan va a aparecer en mi ventana y me va a llevar al más allá. Creo que un día me despertará mi príncipe azul, como a Bella Durmiente. Creo en Mery Poppins, en lo Reyes Magos, en Papa Noel. Creo en el destino. En el Karma. Tengo fe de que después de la muerte hay caminos dónde tu vida puede seguir. Creo en los finales felices, por qué si no es un final feliz es que aún no es el final. Pero, no puedo creer en el amor por qué nunca nadie me ha hecho creer en él.

Pero, Zayn.  En el instante que nuestros labios se juntaron, sentí la magia. Una especie de sensación nueva recorría mi cuerpo, algo que nunca había sentido. Estaba en la octava gloria. Su mano se apoyaba en mi mejilla provocándome una especie de calor corporal. Mi pecho se juntó contra el suyo. Nuestras respiraciones agitadas iban sincronizadas con el beso.  Sus manos pasaron a mi cintura apretándome hacía él. Me quedé en stop. Demasiados sentimientos juntos, demasiadas sensaciones nuevas. Un fuego artificial saltó dentro de mí. Y luego otro, y otro. Pero luego me percaté de que estaba pasando. Me despegué en menos de un milisegundo.

-¡¿Se puede saber qué haces?! No vuelvas a besarme.

-¿Por qué?-preguntó el. Sus labios estaban hinchados y rojos. No podía controlar lo que sentía, no podía parar y decir “Corazón deja de acelerar” Me estaba palpitando a toda hostia y no me gustaba esta sensación. No me gustaba para nada. Lo último que me faltaba era enamorarme de un gilipollas como él.

-Por qué no. ¿Es que acaso no lo entiendes? Tu y yo no podemos hacer esto Zayn. Yo te odio y… yo-me interrumpió.

-No, tu no me odias.-dijo acercándose más a mí. Yo retrocedí. ¿Lo odiaba? Después de todo lo que me había hecho sentir con cinco segundos de beso. Pero después de todas las cosas horribles que me había dicho, todos los momentos que me había hecho la vida imposible, si definitivamente le odiaba.

-¿Y tú? ¿Me odias?-reté. Cada vez había más distancia y eso me tranquilizaba un poco. Ahora mismo tenía la adrenalina por los máximos.

-Digamos que es un odio mutuo.

-¿Se puede saber qué te pasa, Zayn?-dije. Sus ojos color caramelo perforaron los míos, su mirada era tan intensa. Pero no iba a dejarme intimidar. Así que lo miré fijamente, y mil fuegos artificiales más recorrieron mi cuerpo.

-Lo mismo que a ti.-tiró de mi muñeca acercándome más a él. ¿Acaso él también había sentido algo en el beso?

-A mí no me pasa nada.

-Si te pasa. –Mojó sus labios, mientras miraba los míos.-La pequeña diferencia es que yo no tengo tanto orgullo como tú. Yo cuando quiero algo voy a por ello, a ti te come el orgullo pequeña.

-No me llames así.

-Pero si te encanta.-su rostro se iba acercando al mío inconscientemente. Tragué la poca saliva que tenía en la boca. Estaba segura de que ya no tenía los labios morados, pues ya no tenía frío.

-¡Puedes dejar de hacer esto!

-¿Te pone nerviosa?-sus cejas estaban fruncidas de una forma divertida. ¡Arrgs!

-Eres gilipollas.

-Mimada.

-Imbécil.

-Niñata.

-Egocéntrico.

-Repelente.

Iba a contestarle pero puse su pulgar sobre mis labios silenciándome. Frotó su dedo contra mi labio inferior, y entonces me dejo llevar. Vuelo lejos. Cierro los ojos sintiendo su tacto que tanto me encanta. Sus labios chocan con los míos, otra vez y se mueven a un ritmo parecido al de mi pulso en ese instante. Pero Caly, ¿se puede saber qué te pasa? ¡Apártate! Pero no quería, había algo que gritaba desde mi corazón que no quería apartarse. Mis manos se desplazan a sus abdominales, dios, estaba muy fuerte. El beso coge mucha más intensidad, y doy paso a su lengua. Explora casi toda mi boca, el dulce sabor de su lengua me invade el sexto sentido. Él ríe sobre mis labios haciendo que mi corazón parase. Poco a poco, me separo de sus labios con sabor a caramelo. Nuestros ojos se mantienen cerrados, y nuestras narices rozan.