ᜰꦿ➢Destino༒ [kv]

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Entre los muertos todo se sabe

Jungkook soltó a taehyung suavemente, sorprendiendose al notar que no se había inmutado por todo lo que había sucedido. No pudo evitar comparar su actual reacción con la que tuvo al momento de pedirle perdón a Yoongi, antes parecía un cachorro asustado y ahora parece todo un hombre adulto. Pero decidió ignorar su análisis sobre la personalidad contraria.

A pasos suaves jungkook, empezó a dar vueltas en torno a la marca en donde estaba el halo, inspeccionando de manera perspicaz cualquier movimiento de parte del poseído.

Poseído, es una manera más bella de llamar a esto.

Pensó observando el cuerpo inerte de barnabi sentado en la mitad del circulo.

La neblina empezó a despejarse y la gran figura oscura desapareció fundiendose en el cuerpo de yoongi. La luna volvió a todo su esplendor, pero el aire sigue tan frío como navajas de hielo, que con cualquier movimiento pueden atravesar tus huesos. Taehyung tembló y jungkook lo volvió a apresar entre sus brazos, divertido — Es un gusto volver a hablar contigo después de tanto tiempo — contestó jungkook, posando de forma atrevida su barbilla en el hombro de taehyung. — Siempre has tenido una gran forma de hablar para hacerme querer cortarte la lengua, quiero ver con que saldrás ahora.

Mirándolo de forma periférica, taehyung observó el vaivén atrevido de su mandíbula apoyada en su hombro al hablar — Te estás tomando muchas retribuciones. —susurro de forma cortante, haciendo referencia al atrevimiento .

Jungkook decidió ignorar sus palabras, no sin antes dirigir sus ojos penetrantes hacia él. Observándolo cómo si fuese un engreído, enumeró en su cabeza las dos razones por las que lo recubre, A) la ropa es térmica y cálida; debido a que como no-muerto no tiene temperatura corporal y les gusta la sensación  calida contra su fría piel, B) la energía vital de los humanos, para invocaciones, es un faro en un mar de oscuridad. Que haya tenido lastima, y lo tomará de nuevo entre sus brazos fue por mero sentido de responsabilidad, después de todo es por su culpa que está en peligro.

— Siempre tan agrio, a como te recuerdo veo que te has ablandado un poco — rezongo ignorando la impertinencia del humano, chasqueando su lengua. Se fijo con ojos recelosos en el brazo de su viejo amigo, rodeando al hominem. Su postura erguida y elegante demuestra por cualquier lado cuál era su posición social en su época de gloria. En su rostro se estiró una pequeña y ladiada sonrisa  misteriosa e intrigante. A Vlad no le faltaron ganas de darle un buen golpe, pero luego  recordó que el tipo muerto era amigo de jungkook, y que de algún modo u otro, como dice el adagio :—

Dios los hace y ellos se juntan

Así  que vlad solo suspiro y espero junto a Yoongi, que volvio a su actitud del asco normal.

— Pero lo que quieres no es una reunión con un viejo amigo — afirmó barnabes con precisión —  deduzco que, según lo que oí, quieres información.

— Siempre fuiste un charlatán certero. Pero, dime, ¿cuál es la trampa?.

— Si, tengo una condición — confirmó su sospecha y jungkook le sonrió con ironía. En un ademán de su mano trato de restarle importancia y continuó, como si la sospecha no fuese lo suficientemente traicionera — Quiero que protejas a mi hijo y lo reconozcas como alguien de tu linaje, según lo que oí ni siquiera él está seguro. Ella sabe que aún tienes el sello y te hace débil, sabe que barnabi es mi hijo y que vendrías a mí. Entre los muertos todo se sabe, y jungkook, ella regresó de entre los muertos sólo para jugar contigo y reclamar su recompensa.

Todo el mundo quedó paralizado, por primera vez en toda su larga vida la cara de jungkook demostró más emociones que sólo diversión o seriedad, lo que no tranquiliza es que se ve casi en shook. Notaron lo cristalizados que están sus ojos; en un rojo impotente, empezó a reír de manera histérica —  No puedes estar hablando enserio — respondió incrédulo alejando a taehyung de un tirón, casi tumbando lo y en el fondo disfrutando un poquito su venganza.

Barnabes solo guardo silencio, entendiendo su reacción. Los demás, que no entienden nada de la situación , pueden ver y oler la desesperación de jungkook. Pero eso sólo los alarma, al parecer van a morir.

— Esto definitivamente es uno de los otros muchos castigos de Dios — expresó, con una sonrisa que oscila a la Psicópatia en toda la palabra. Su mirada azul se perdió en el oriente intentando recobrar el sentido. Este no es momento de desbordarse en emociones, es el momento de ir detrás de la persona que se supone que tiene el deber de hacer pasar a la mejor vida O al infierno, como quieran llamarlo. — Bien, entonces la psicótica lo sabe y cree que puede hacerme jugar su juego. Le daré lo que quiere, pero después haré que vuelva a pasar a mejor vida y esta vez para siempre, me aseguraré de ello. Acepto tu condición, barnabi se quedará conmigo aquí en Forest, está ciudad le sentará bien.

—  Entonces,no tengo más nada que decir, Adiós viejo amigo. Espero lo logren. Cuida bien de mi hijo —  se despidió, pidiendo su último deseo en el poco aliento de vida que conserva en el limbo. En un segundo el cuerpo de barnabi cayó al duro suelo, Vlad y yoongi lo levantaron y lo montaron en una furgoneta negra que había sido dejada allí para cuando llegarán. El chico quedó sin ningún tipo de energía, asi que al llegar tendran que darle una buena cantidad de plasma.

Todos se subieron en silencio, jungkook solo comdujo perdiéndose en el camino lleno de árboles y oscuridad.

Tres horas de carretera,fria y solitaria. Tan tenebrosa.

Los primeros rayos del sol salieron justo cuando llegaron al complejo lujoso de departamentos en donde vive. Jungkook tomó a barnabi descuidada mente, y se adentro al lugar chocando la cabeza del pobre chico contra cada superficie, los demás no se atrevieron a mediar palabra temiendo que vuelva a explotar, así que solo subieron al ascensor rumbo al penthouse teniendo lastima por el chico .  —  Ahora, ¿quieres, no se, tal ves decirnos quién es la loca y cómo haremos para matarla? — preguntó Yoongi, con su burla habitual sin importarle que lo demás le miraran mal, él conoce a jungkook, así que no se tragara ese teatro que armo allá .

Taehyung miró maravillado todo cuando el ascensor se abrio, ignorando la conversación. La decoración se basa en colores sobrios y muchos objetos antiguos de diferentes épocas. En toda la sala principal se sitúa una lámpara hecha de cristal, de la época victoriana, muy contemporánea. Maravillado, observó el piso en madera y la alfombra con piel de oso, tal vez fue eso lo único que no le gustó, detesta el maltrato animal.

Jungkook tiro a barnabi en el sofá de su sala, y cuando volteo tenía su sonrisa habitual y arrolladora — Ella es una loca muy inteligente. Ven a este chico, su padre sólo quiere protegerlo asi que les informaré que nos traicionó — comentó con tranquilidad,  se dirigió a tomar una botella de buen whisky Dalmore de un estante. Tomó del refrigerador dos cubos de hielo, y con fina elegancia los virtio en el vaso, luego miró con astucia a los demás y les regalo una sonrisa intrigante. En su gesto característico los invito a sentarse en el largo sofá y ellos se sentaron mirándolo, esperando a que hablara. Y para su mala surte, el rostro de sus acompañantes no se ven nada alegres.

—  Entonces todo eso de que casi lloras y tenías un crisis existencial ¿fue actuado? — preguntó taehyung, molesto — osea que casi me tiras al piso por gusto y no porque hubieses estado alterado.

— Oh, si que me altere, pero exagere un poco. Ya sabes, son gajes del oficio, además tenía que hacerle creer a barnabes que ella me afecta para que se lo diga, a cambio ella no hiere a barnabi — explicó con tranquilidad. Taehyung puede jurar que lo vio del tamaño de una hormiga, aún no se explica como una persona puede hacerle perder la paciencia tan rápido cuando eso es difícil para cualquier otro. Tomo una corta respiración, se acomodo mejor en el sofá y le lanzó una mirada con mucho veneno.

— Hm,ahora, respondiendo a tu pregunta Yoongi, la loca que nos busca es mi madre — confesó como si nada revoloteando levemente su vaso — Y la única manera de matarla es buscando su debilidad. Apenas regresamos de un viaje y hay que hacer otro. — susurro lo último con cansancio, desabrochando dos botones de la camiseta de su traje dejó a la vista sus blanquecinas claviculas.

¡Su madre!

Pensaron los demás, de diferentes maneras, pero igual de contaríados con la misma idea principal. Después de digerirlo, lo analizaron un poco y llegaron a la conclusión de que con jungkook se puede esperar cualquier cosa, así que mejor aguardaron en silencio y esperaron a que continuará — Su única debilidad es una pequeña planta que en estos momentos solo crece en un lugar.

— Y eso está
— indagó Yoongi, con su pequeña sonrisa pícara y ojos serios.

— En el amazonas. En Colombia.— aclaró con cansancio, no físico, mental.