ᜰꦿ➢Destino༒ [kv]

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Desconfianza

Una especie de madre aterradora, un romántico, un erudito, un mal hablado, un muñequito y el escritor novato con personalidad dual. Qué  más podria pedir un retorcido como jungkook para ser feliz. Tal vez ahora estén en un momento muy incómodo, pero jimin sentado muy quieto casi sin respirar ; en todos sus cabales, rodeado por todos, es algo suspensivo pero muy divertido para él. — Les presento a mi hermano , un poco más relleno y con gafas. Ahora se ve tan tierno, en mi tiempo era considerado un adonis, pero ahora es tan apachable Hm —  su boca bailo de forma divertida, ese brillo cautivador en sus ojos relucio inmensamente , y su relleno labio inferior sobresalió levemente con burla.

Y como si las cosas no fuesen lo suficientemente extrañas, Vlad se acercó a jimin invadiendo su espacio personal, centímetros quedaron entre ellos, un poco más y sus bocas colisionarían. Asustado, se alejo de forma brusca hacia atrás, y como no tuvo en cuenta la gravedad y la fuerza, cayó del sofá, jimin empezó a gatear nervioso; buscando a ciegas sus gafas, que se cayeron del puente de su nariz durante la caida; apenas las tanteo las tomó, se levantó de un brinco, muy avergonzado, pero su aura se oscureció después de unos segundo en donde observó de forma fija a Vlad. Su mirada ardió en fuego, brillo de un rojo intenso —  No puedes simplemente tocarme. Soy Henoc, el primer noble existente de la tierra. Hijo legítimo del matrimonio de Cain y Awan, Heredero de Henoc ; Reino de mi padre.

— Si, si, no te pongas tan temperamental hermano. —  interrumpió jungkook, Henoc le lanzó una mirada mortal, pero retando más su suerte se acercó y rodeo sus hombros de manera juguetona. — Vlad también es un noble, no un plebeyo. Ya sé, nunca te gustó rodearte de gente común, vivir esta vida te ha de volver loco, así que no te engañes con su cara de bastardo corriente, es igual de sangre azul, tanto como tú. Aunque me parece que ambos se parecen mucho, sin nobleza en la actualidad y con ganas de joder a todos — concilio con una pequeña sonrisa desdeñosa. Ambos le fulminaron con la mirada y él solo sonrió de forma inocente.—  Ahora, porqué mejor no hablamos sobre cómo conservas tus ojos distintivos, Henoc.

Se zafó bruscamente de su fraternal agarre y jungkook resoplo divertido, no sería fácil ganar la confianza de Henoc, o que por lo menos no estuviera constantemente pensando en que lo apuñalaria por la espalda y lo volvería a asesinar, eso sería una gran avance. Pero eso solo pasa en los cuentos de hadas, porque en la dura y cruel realidad Henoc lo detesta, y lo único que evita que lo traicione, es su conocimiento sobre lo peligrosa que es su madre. Además aunque le cueste aceptarlo, sabe que el idiota de jungkook puede ser lo que quiera excepto un mentiroso — No vuelva a tocarme — exclamó aterrado jimin, sus ojos en el color miel habitual.

—  Así que no me quieres responder, ¿por eso te vas? — hablo  mandando su mensaje directamente a Henoc.

— Él tiene sentimientos encontrados hacia usted, no es por eso que se fue. Lo siento Henoc, pero te quiero liberar — expreso sacando valentía de alguna parte, susurro lo último y controlando el temblor de su cuerpo continuó  — Te quiere, era lo único que evitaba tu muerte. Su cariño hacia ti evitó que Cain te matara, y por el contrario, te convirtiera, pero decidiste ver desde tu envidia y admirar el caparazón que utilizaba para ocultar sus sentimientos. —  con cada palabra su confianza aumentó hasta el punto de casi gritarle con impotencia, cada imagen sobre cómo lo defendió en un pasado, Henoc vino a su cabeza, como si él estuviese recordando mientras mencionaba las acciones que tuvo entre las sombras. Cerró sus puños tan fuerte al igual que sus ojos, hablar es lo único que liberará a esa parte de si mismo que reencarno atormentada, sin descanso y con sed de ver por el suelo a quien lo traicionó. Pero muy en el fondo también se siente culpable por no haberle mostrado esa parte de la historia a jungkook cuando tuvo la oportunidad, ni en sus últimos suspiros de vida.

La esbelta y recta postura de jungkook flaqueo por un pequeño momento, todas esas revelaciones llegaron y calaron hasta los más profundo de sus huesos. De forma leve, y en un traumatismo biológico arraigado, empezó a dar pequeñas respiraciones observando y oyendo todos los momentos que jimin está revelando. Henoc se sintió tan vulnerable al ser descubierto, que no pudo evitar bajar sus escudos ante jungkook, dejándole confirmar todo lo dicho, le permitió ver sus recuerdos . —  Al principio todo ese rencor lo lanzaba sobre mi, pero al estar ahí y conocerme no pudo evitar transformar todo ese odio en lástima. Con el tiempo en vez de lastimarme se hizo mi amigo, me habló del pequeño chico de cabellos dorados y que guardaba el océano Pacífico en sus ojos, ese pequeño que solo recibió desprecio suyo, uno que en realidad no sentía y que sólo recibía de su parte para protegerlo. En pocas palabras, su karma en esta vida fue ver en primera fila el cómo te sentías.

—  creo que de mi larga vida, estos han sido los días más descontrolados que he tenido, todo parece ser emocional. — exclamo fingiendo una gran sonrisa — ¡Brindemos! Vamos, porque si antes me sentía culpable o no, ahora si lo tengo que sentir. —  Vlad, que habia avizorado que esto pasaría; desde que jungkook se encerró en ese cuarto a interrogarlo, le paso la botella de whisky, que fue creada por jungkook, precisamente para momentos como estos de desbordante adrenalina, o camonos más allá, momentos estratégicos. Una botella que es capaz de derribar en alucinaciones a cualquier nosferatu, un alcohol capaz de relentizar el rápido proceso regenerativo. Una botella capaz de embriagarlo. —  Dime jimin, ¿cómo te sentiste con tantos exorcismos? —  indagó intentando darle su punto de vista. De forma leve y desinteresada destapó su creación, acercó su nariz y sintió el fuerte olor quemar sus fosas. La copa que dirigio hacia sus labios logro cubrir su sonrisa ladeada, miro disimuladamente hacia su gran ventanal viendo el imperceptible movimiento a simple vista, de una silueta.

  — Yo no quiero hablar de eso.

El silencio es infernal, todos miran el juego de tira la pelota con palabras, las revelaciones son impactantes. Todo es denso. Los demás se miran entre sí, casi comunicándose con la mirada, sus posturas son rectas e incomodas, casi con miedo de hacer estallar, supuestamente, por tercera vez en su larga vida a jungkook, ya sea por los comentarios o la culpabilidad que siente y ellos observan aparantemente en su mirar. — Hm, verás, así me siento yo. Pude ver toda tu infancia cuando henoc bajo las barreras, fuiste despreciado. Todo ese odio que sientes yo no lo sentía, así no me creas, yo admiraba a Henoc, pero fue hasta que lo escuche hablar sobre cómo me desterrarian que pude convertir toda mi ingenuidad en el monstruo que soy ahora —  confesó de forma desinteresada bebiendo el primer trago. —  La infeliz que esta allá afuera no creyó en mi, me dio un arma y estuvo dispuesta a deshacerse de mí. Si moría a manos de su legítimo esposo serían la familia perfecta, no amante, no hijo bastardo; es igual a felicidad. La familia original, los primeros nosferatus. Pero lo logre, por su egolatría, casi moribundo enterre esta cruz de plata fina en el corazón de Cain , lo mordí.

Huye park jimin, mientras puedas.