XV. Confianza Entre Dos

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—Está empezando a confiar en Hyukjae.

La sombra de una persona parpadeaba contra el pasillo oscuro de una vela solitaria. Oculto a la vista había otra persona que hablaba con la otra, —Esto es bueno. Nos dará más opciones.

—Entonces, ¿qué hacemos una vez que lo averigüe todo?

—Tendremos que esperar y ver. En este momento, podemos o no tener otro problema. Ese Pegaso, me está preocupando.

—¿El de cabello largo?

—No. El otro.

—Puede que tengamos que sacarlo del camino.

—Algo me dice que no va a ser fácil.

***

Donghae tiró de su pañuelo, que estaba atado en la parte de atrás de su cuello para poder levantarlo y usarlo como una máscara alrededor de la mitad de su cara, más arriba para que quedara justo debajo de sus ojos. Podía sentir los ojos clavados en él mientras los cuatro caminaban por las calles de la ciudad.

—Este lugar es tan diferente —Hyukjae respiró con un ligero asombro.

La ciudad de los descendientes de Dragón había sido llamativa y todo sobre luces brillantes, y Hyukjae sabía que la ciudad real Fénix era principalmente tiendas y montones, montones de mercados. La ciudad de los descendientes de Grifo tenía casi una sensación antigua. No era como Hyukjae lo había imaginado en absoluto. Debido al hecho de que los descendientes de grifos eran muy inteligentes y avanzados, pensó que sería como la ciudad de los descendientes de Dragón, pero era todo lo contrario.

—¿No es genial? —miró a Donghae automáticamente con una sonrisa.

Donghae no estaba seguro de cómo reaccionar ante el entusiasmo porque, bueno, lo había visto antes e incluso entonces no había quedado tan impresionado. No como si eso fuera sorprendente. Se encogió de hombros con indiferencia. —Seguro. Si te gusta este tipo de cosas.

Hyukjae tal vez se dio cuenta de que le estaba pidiendo una opinión a Donghae, el rey de la indiferencia, mientras se mordía el labio y miraba hacia otro lado, volviendo a mirar las calles y los edificios.

—Entonces... eh... ¿solo vamos a encontrar un paciente y luego Donghae lo va a curar? —Heechul preguntó rotundamente. Aunque sonaba aburrido, había aprovechado la oportunidad de salir cuando ya comenzaba a sentirse claustrofóbico en el enorme palacio.

—Sí —respondió Hyukjae.

—Plan sólido —murmuró Heechul.

Sungmin estaba parado al otro lado de Donghae. Por alguna razón, tenía una aversión mayor a la habitual hacia Heechul. ¿Había pasado algo ayer?

—Simplemente iremos al hospital. Tendrán montones allí.

—De nuevo, ¿por qué Donghae está haciendo esto? —Heechul continuó interrogando.

Hyukjae le dio una mirada rápida a Donghae, pero cuando permaneció en silencio, decidió responder en su lugar. —Los síntomas son muy parecidos a los de Sora... Sé que podría ser una coincidencia, pero... me preguntaba si tal vez es lo mismo.

—¿Pero eso no significaría que la infección se ha propagado? —Sungmin preguntó, elevando la voz—. Y Sora estaba en peores condiciones que las personas de aquí, ¿verdad?

—Bueno, sí —Hyukjae se mordió el labio—. No lo he descifrado todo... Es solo una corazonada.

—¿Vas a arriesgar la salud de Donghae por una corazonada? —Heechul preguntó con bastante dureza.

Cicatrices Bajo la SuperficieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora