Cicatrices Bajo la Superficie

XXI. Posibilidades

—Ow.

—Lo siento —murmuró Sungmin mientras intentaba ser más gentil al cambiar el vendaje alrededor del brazo de Kyuhyun. La herida, aunque sólo un roce de bala, le hizo hacer una mueca. Limpió la sangre alrededor y añadió un poco de crema para desinfectar la herida. Luego agarró el vendaje nuevo y procedió a envolverlo. Sus ojos recorrieron el brazo hasta el tatuaje en su antebrazo, luego su mirada se dirigió al torso desnudo, sintiendo un ligero sonrojo en sus mejillas.

—¿Vas a terminar de envolverlo? —Preguntó Kyuhyun rotundamente.

Sungmin ni siquiera se había dado cuenta de que sus movimientos se habían detenido cuando su mirada se desvió, pero rápidamente se aclaró la garganta y reanudó sus acciones. —Deja de quejarte. Estoy tratando de ser amable.

—Realmente debe estar matándote, ayudando a un cazador y todo —dijo Kyuhyun, sus ojos marrones fijos en el rostro de Sungmin con una sonrisa arrogante.

Sungmin frunció el ceño ligeramente y se encogió de hombros. —Si Donghae es el Jefe de los Cazadores entonces tendré que aceptarlo.

—Hmm —Kyuhyun simplemente tarareó con una sonrisa—. Tú también podrías ser un cazador, si quisieras.

—No gracias.

—Oh, vamos, realmente no te puede gustar trabajar para el rey Hongjun.

—No es tan malo como parece.

—Eso es lo que tienen los Grifos, tan dependientes y fieles —suspiró Kyuhyun y se inclinó sobre su espalda, solo con su brazo en el aire mientras Sungmin lo sostenía, asegurándose de envolverlo firmemente—. De todos los cazadores, no es que seamos muchos, solo hay un descendiente de Grifo —Sungmin se sintió un poco complacido por eso—. ¿Hankyung?

—Yep —dijo Kyuhyun—. Creció sin hogar, ¿sabes?

Sungmin hizo una pausa cuando sus ojos se encontraron con los de Kyuhyun. Sintió simpatía por el cazador cuando escuchó eso. —¿En serio?

Kyuhyun asintió. —Sus padres no podían cuidarlo, así que se fue a los quince años. Deambuló por las calles, fue al palacio a pedir trabajo. Ninguna de las familias reales lo ayudó. Entonces, asumo que conoció a Donghae de alguna manera y Donghae confió en él lo suficiente como para dejar toda su organización con él —Kyuhyun suspiró perezosamente. Luego inclinó la cabeza mientras estudiaba a Sungmin—. No lo entiendo. Si eres un grifo, ¿por qué trabajas para el rey dragón?

Sungmin respiró hondo. Esta era una pregunta que le hicieron bastante. —Mi familia son sus sirvientes. Logré subir algunos rangos.

—Algunos rangos... —Kyuhyun se burló con una mirada de incredulidad ante la modestia del otro. Levantó una ceja—. ¿No fue difícil? —preguntó sin rodeos—. ¿Siendo un grifo y todo eso?

—Sí, por supuesto —murmuró Sungmin y había pasado un tiempo desde que realmente habló de sí mismo con alguien—. Pero sólo tienes que ponerte al mismo nivel que ellos. Les gusta menospreciar a cualquiera que parezca más débil, así que tuve que demostrarles que no estaba por debajo de ellos. Así es como se sobrevive allí —Kyuhyun tarareó mientras asimilaba las palabras.

Sungmin se mordió el labio pensativamente, —Pero no basta con actuar, tienes que ser capaz de defenderte y mantenerte fuerte.

Ante eso, Pegaso se rió entre dientes, con los ojos brillando de diversión. —Guau. No tenía idea de que fueras tan inspirador.

Sungmin apretó el vendaje y Kyuhyun hizo una mueca. Sungmin le lanzó una pequeña mirada, admitiendo que sí, había sonado un poco cursi, pero todo había sido verdad.