Capítulo 3

9 1 0
                                    

_ Creo que acabo de morir... mis pies me están matando. –Se quejó Chim mientras lanzaba sus zapatos lejos-

_ ¿Tienen hambre? –Preguntó KyungSoo acomodando su abrigo y el de nosotros- Traje un poco de lo que quedó.

_ Esta vez el cansancio es más grande que mis ganas de comer, me voy a dormir. Buenas noches chicos. –Dijo Jimin para ir directo a su habitación-

_ ¿Tú tampoco vas a comer?

_ El cansancio nunca es más grande que mis ganas de comer. –Aclaré-

Seguí a KyungSoo hasta la cocina donde comenzó a preparar dos platos. Nos sentamos uno frente a otro y comenzamos a comer en silencio. Era casi la una de la madrugada y solo podía pensar en comer y luego dormir unas diez horas seguidas.

_ SeokJin me dijo algo raro hoy día en la mañana. –Mencionó KyungSoo de repente-

_ SeokJin siempre dice cosas raras. –Me burlé-

_ Le diré que te estás burlando de él para que nunca más te invite a comer. –Amenazó-

_ ¿Qué te dijo? –Cambié el rumbo de la conversación por mi propio bien-

_ Dijo que tú harías cualquier cosa por mí.

_ No veo lo raro. Eres mi mejor amigo, claro que haría cualquier cosa por ti.

_ Creo que fue la forma en la cual lo dijo... pero no importa.

_ En realidad –Me quedé pensando un momento- Parece que se pusieron de acuerdo para decirnos cosas raras. Jimin también mencionó algo...

_ ChimChim está loco. –Estaba completamente de acuerdo con Soo, pero esta vez algo era distinto-

_ Sabes que soy el primero en estar de acuerdo con esto, pero esta vez dijo algo que nunca había mencionado antes.

_ ¿Qué cosa?

_ Algo sobre la forma en la que nos veíamos...

Me quedé viendo fijamente a KyungSoo. ¿Siempre había tenido esa piel? Se veía tan suave que me invadieron unas ganas de estirar la mano y comprobar si era tan suave como se veía. Por otra parte, siempre había escuchado halagos sobre los ojos de KyungSoo, y ni hablar de sus labios. Paso muchas horas de la semana con él y creo que es primera vez que me dedico a verlo de forma tan detallada. Definitivamente, las personas no mentían... sus labios eran simplemente perfectos. ¿Acaso esa forma era real? ¿Cómo se sentiría besarlos?

_ ¡Creo que es hora de dormir! –Grité para alejar esos pensamientos que se estaban formando en mi mente. Pensamientos bastante extraños por lo demás-

_ No grites ¡loco! –Me dio un golpe en la cabeza-

Ninguno tenía ganas de lavar, por lo que, solo dejamos las cosas ahí. Nos fuimos a mi habitación cada uno haciendo la rutina tan conocida. Sin darnos cuentas KyungSoo había comenzado a dejar un par de sus cosas en mi habitación y viceversa. Muchas veces Jimin había bromeado diciendo que tal vez KyungSoo debería vivir con nosotros de una vez por todas, ya que, al final siempre estábamos aquí.

KyungSoo fue el primero en salir con su pijama puesto y los dientes cepillados. Lo vi ir directo a la cama, mientras yo entraba al baño. Al salir, Soo ya se encontraba durmiendo, me quité la polera del pijama porque el ambiente estaba un poco caluroso y me metí en la cama junto a mi amigo.

Había escuchado miles de veces a los demás hablando sobre nuestra relación diciendo que no deberíamos mentir y aceptar que somos novios. Pero, la verdad, es que nadie entendía la profundidad de nuestra relación.

Nuestros padres eran amigos de toda la vida, es por eso, que prácticamente nos criamos juntos. Cuando Do tenía ocho años su madre murió. Su padre buscó refugio en mis padres y, como buenos amigos, mi madre se convirtió casi en una mamá para KyungSoo. El pasar tanto tiempo junto al otro para mí era algo normal, nos habíamos criado juntos y sentía la necesidad de protegerlo. Había sufrido tanto que me sentía en el deber de cuidarlo.

Estiré mi mano para quitar un mechón de pelo que cubría su frente. Era tan bonito, tan frágil. No me importaba lo que el resto opinara, yo lo quería y lo iba a tener siempre junto a mí. Me acerqué mucho más y, como cada noche, lo abracé fuerte a mi pecho.

P.O.V. KyungSoo

Fingí estar dormido porque JongIn se estaba comportando un poco raro, además me sentía muy agotado luego del largo día. Podía sentir su mirada sobre mí provocando una cierta incomodidad. No sé cuánto tiempo pasó, pero ya quería golpearlo. Sin embargo, sentí su mano acomodando mi cabello, necesitaba calmarme para que no notara la tensión en mi cuerpo.

Se apegó más a mí para abrazarme. La verdad es que eso era algo a lo que estaba acostumbrado. JongIn siempre terminaba abrazándome a la hora de dormir. Cuando sentí que su respiración se volvía más lenta abrí los ojos.

JongIn no tenía ni las más mínima idea de lo que causaba en mí. Hace un tiempo había notado que mi corazón se aceleraba más de la cuenta cuando me abrazaba para dormir, pero solo quería ignorar esas sensaciones. JongIn era una de las personas más importante en mi vida, por no decir la más importante, y estos pensamientos solo arruinarían esa relación, es por eso que siempre lo ignoraba.

JongIn creía que debía ser mi héroe, quería mantenerme en una burbuja para que nadie me hiciera daño. No obstante, yo sentía todo lo contario. Estaba tan agradecido por todo lo que su familia había hecho por mí que me sentía con el deber de cuidarlo, no solo por gratitud sino porque lo amaba demasiado como para verlo sufrir.

Besé su frente y me di la vuelta para dormirme de una vez. Sus brazos se apretaron a mi alrededor y, aunque nunca lo iba a reconocer, sabía que ese era mi lugar, el lugar donde quería estar toda la vida.

Sing For You (JongIn & KyungSoo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora