One Shot: también me gustas
Shipp: Yoon Bum x Reader.______________________________
El problema conmigo es que ella es la chica más bonita del instituto, todos siempre la miran y la admiran sin importar qué, es perfecta.
De pies a cabeza, físicamente es muy atractiva, aunque su vida puede ser una mierda ella sigue sonriendo.
Es San Valentín llenaron su casillero de cartas, su escritorio lleno de chocolates, se sienta adelante en medio y yo al fondo, el mío está vacío como siempre.
-Vaya éste año igual recibiste muchos dulces-dijo una de las chicas- a pesar del cambio de salón
-Que envidia te dieron dulces incluso los mayores-decían mientras miraban las tarjetas, ella se las quitó-
-Vamos, no lean las tarjetas-dio un suspiro- Pueden tomar los dulces si quieren pero las tarjetas no
-¿Acaso esperas alguna de alguien? - preguntaron, ella se cruzó de brazos-
-Oh vamos, te enojaras porque leamos los sentimientos de chicos que mueren por ti?
-Son cosas personales-dijo rodando los ojos-como sea
-Bien, yo iré a dejar el chocolate de mi senpai antes de que llegue-dijo una de ellas-
-Yo igual, van en el mismo salón-se puso de pie otra-
-¿Tu no vienes? - el grupo de 5 se iba a ir sin la más bonita, la cual había negado- Si te hacen problema los chicos podemos dejar tu chocolate o tus chocolates
-¿Mis? -
-Vamos, esa hipocresía falsa no engaña, seguro trajiste muchos para devolver el chocolate a cada uno de esos chicos-empezó a levantar la pila de cartas y la soltó, cayeron en el piso,, la silla y la mesa-
No entendía bien porque ella seguía juntándose con esas chicas, a diferencia de ellas la más bonita del instituto suele ser amable y detallista con todos incluso conmigo.
En muchas ocasiones se había quedado a ayudarme y muchas veces se ofrecía para darme sus libros, cuadernos y apuntes cuando faltaba a la escuela. A pesar de ello nunca le he dirigido la palabra, ni quiero que piense que soy alguien obsesivo.
Le preparé una carta y con lo que junté pude comprarle un chocolate, pero no se lo iba a dar, habían chocolates caros y finos ahí, regalos costosos.
-Oye! - le gritaron- ¿Vieron el patio? Hay un oso gigante!-giré para ver el patio y había un cartel grande,, globos y un oso, el cartel tenía el nombre de ella. Ahora sí,, ella no iba a saber de mi.
-Ese es mi... - dijo una ellas- maldita!
-No te enojes conmigo, te he dicho mil veces que no estoy interesada en él-rodó los ojos-
-Deberías ocultarte o faltar éste día-dijo otra- Así no habrá peleas ni nada
-Nadie pelea por mi-dijo ella- Bien, debería empezar a leer o no acabaré
-Nosotras nos vamos~
Ella se sentó ahí cuando recogió todas las cartas, leía una por una, hasta que sonó la campana. Ya en la merienda se quedó en el salón leyendo las otras cartas. Ella había dicho que mejor le dieran cartas pero todo el mundo sabe que le encantan los dulces, me incluyo, no había nadie en el salón quería darle mi chocolate. Vi que otro chico ingresó y me quedé de pie viendo la situación.
-S-senpai...-dijo el chico y se inclinó--Acepta mis sentimientos y ten una cita conmigo-le entregó una rosa-
-Que lindo...-aceptó la rosa- Me encantaría pero creo que no debería, lo siento