Episodio 3

3 2 0
                                    

**

La mayoría del tiempo Savannah se sentía sola, llevaba 4 días en la casa de Harry, todavía sentía dolor por no poder casarse, obviamente odiaba a su ex por eso, lo que nadie sabía era que el la engañaba con su prima segunda.

Estaba en su recamara cuando recibió un mensaje de su ex, diciendo que la extrañaba y que quería volver, ella lloro en silencio porque sabía que era un engaño. Ya no lo amaba como antes, así que simplemente no contesto y salió de su recamara a tomar un poco de agua. Al pasar por la sala y se dio cuenta que alguien estaba en la terraza, ese alguien era. Harry. ¿Qué le pasaba? Se pregunto.
Tomo la manija y abrió lentamente la puerta sin hacer el mayor ruido posible, pero era como si él la oliera, supiera que estaba detrás. Se dio vuelta para verla allí preciosa como siempre, ella era mucho más pequeña que él. Sonrió al recordar que ella media solamente 1,52m muy bajita. Se veía tierna en frente de él

-¿Te pasa algo?- pregunta ella caminando a su lado, él desvió la mirada de ella. Negó lentamente

-No, tranquila – la despreocupo pero también sabía que no sería tan fácil engañarla. Dos minutos de silencio y ella seguía a su lado – solo... recordé mi boda –murmuro, ella lo miro, miro su perfil y ahí lo empezó a detallarlo como nunca. Su nariz perfilada, su mandíbula cuadrada, su cabello estaba recogido en una cola, sus labios finos y rosados. De pronto quería besarlos.

-¿Qué recordaste?... ¿Que fue la peor boda que alguna vez fui?- bromeo ella, pero al ver que su compañero no hacia ningún gesto facial se retracto- Digo... no lo digo por ti, tú estabas excelente ese día... lo digo por la engreída de Camill- y una sonrisa apareció en sus labios, Savannah se sintió aliviada.

-Lo sé- fue lo único que dijo – aun recuerdo cuando te vi –susurro, Savannah lo voltea a ver de nuevo, esta vez sorprendida por sus palabras

-¿Qué?-murmuro ella

-solo... por un momento dude –su mirada estaba triste como él, se sentía nostálgico.

-¿Cómo? ¿Sobre qué?- ella no entendía de lo que hablaba, o de lo que él intentaba explicar

-De si debía casarme con ella- murmuro- estaba justamente ahí, en ese altar desconfiando en mi mismo... luego te mire en ese maldito vestido plateado – Savannah solo lo miraba- te veías jodidamente hermosa... y llegue a... a imaginarte a ti caminando hacia mí, siendo tú con la que me casaba- culmino él mirándola, clavando sus grandes ojos Grises sobre los de ella, ella respiro pesadamente

-¿Qué?.. ¿Por qué dices... esas cosas? – dijo ella alejándose poco a poco

-Annah era inevitable... lo siento

-No Harry, no puedes...- murmuro ella mientras las lagrimas se acumulaban en sus preciosos ojos azules – No puedes decir esas cosas... estás loco- culmino caminando hacia el centro de la casa, mientras un Harry alocado y con ilusión la seguía

-Annah ¿Por qué soy loco? ¿Por quererte? –pregunta desesperado

-Yo... no, Harry no puedes decir esas cosas como si nada, y menos a esta hora. ¿Qué te crees? – Harry la miro confundido, ella se le acerco y lo tomo por sus mejillas, que estaban cubiertas por su barba bien afeitada – Te quiero... pero los dos sabemos que no... no estamos para estar juntos. Tú tienes una perspectiva muy extraña de divertirte y no puedo con eso

-Dijiste que no me cambiarias – murmuro cerca de su rostro

-Y no lo estoy haciendo, tampoco te lo estoy pidiendo... simplemente no puedo estar en una habitación donde pueda escucharte tener sexo con cualquier extraña como ayer... no puedo. Y tu... no puedes decir que me quieres- suspiro- fue mala idea venir – miro los labios de aquel chico, y su deseo por dejar un beso retundo ahí era muy necesario, pero abstuvo hacerlo y solo le dio un pequeño beso en su mejilla que duro más de la cuenta.

-No te vayas – dijo Harry mientras la seguía a su recamara. Se había convertido de ella. Ella solo repetía "Lo siento" mientras metía todas sus cosas en la maleta- Prometo cambiar – dijo en un tono desesperado, ella negó y lo miro

-Quiero darte tu espacio- murmuro

-¡NO! ¡NO QUIERO MI PUTO ESPACIO!- Grito, haciendo que ella se echara para atrás – Te... te quiero a ti

-Harry no llevo ni una semana aquí y estás diciendo estupideces, no puedes decir de la nada que "querías que fuera yo la que caminara al altar" simplemente no – dice ella agarrando su maleta, entrando al cuarto de baño

-¡Tú me preguntaste que me pasaba!-dijo a la defensiva. Y era cierto, pero él tenía la costumbre de llevar chicas allí y ella era un estorbo- solo te respondí sinceramente- paso por su lado para meter las cosas personales en su bolso

-Tomare un taxi- susurro- primero iré a un hotel y mañana a nueva york... mi padre está enfermo, desde hace tiempo y... yo estoy aquí

-Te puedo llevar – la interrumpe – tengo un jet – ella niega. Sale de la habitación con sus cosas, y Harry detrás como un perro faldero. Se detiene en la puerta principal para darse la vuelta y verlo por última vez – Es la última oportunidad... no voy a ir detrás de ti como un idiota – le avisa

-No puedes... porque no somos parejas ¿o sí?- de esa manera lo callo – espero te diviertas... y trata de protegerte si traerás a muchas personas para hacer... esas cosas. Ahora debemos estar en caminos separados, como siempre ha sido - Harry sonrió mentalmente, sabía que ella era muy sofisticada o educada para decir esas palabras como "Orgia" "Masturbarte" o "Trió" lo cambiaba por unas simples palabras como "Personas para hacer esas cosas" "Darte auto placer" que al final siempre decía asco, "Tres personas sin pudor"

-Bien- dijo al final, ella sonrió triste y le dio un beso de despedida en la mejilla.
La vio marcharse para no verla más. Se sentía humillado, mal y devastado

*Harry*

¿Cómo podía? ¿Cómo podía simplemente decir tal cosa? Que tonta... cualquier mujer le encantaría estar conmigo... excepto mi ex esposa, y hasta ahora ella. Pero... yo la conozco y ella no caería en mi truco tan fácil, eso me atraía de ella.
Nunca le dije lo que sentía porque ella estaba con el idiota de Christopher.

Pero aquel día que estuvimos en la playa, y solo estaba en traje de baño era fantástico mirarla.
Y era difícil no mantener calladas a las chicas que solamente iban para solo darme placer, y por culpa de eso no me di cuenta de lo que tenía en mi cara... no la vi a ella, debí fijar mi mirada en ella.

Ahora me sentía perdido en los besos que me daba aquella chica, Savannah tenía tres semanas que se había ido y el Harry volvió. La chica que tenia encima de mi regazo se centraba en dejar besos por mi cuello y pecho, pero no me daba ningún placer... nada. Gire mi mirada aquellas personas que estaban ahí, amigos y chicas desconocidas se besaban por todas partes, me sentía mareado... y al parecer todos ahí estábamos muy drogados y borrachos, demasiado. 


SAVANNAH (Entre sus ojos)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora