La hija de Endeavor, Hanabi, porta un quirk problemático: conserva y roba la energía vital de otras personas, para transformarlas en juegos pirotécnicos explosivos.
Sin embargo, su cuerpo es incapaz de retener la energía de otros, y producto de sus...
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AMAJIKI TAMAKI
Intenté guardar el máximo de sigilo para salir de casa pero, como siempre, ella estaba sumamente al pendiente del momento en que abandonaba el lugar, y el hecho de que volviera a la U.A, era el peor de sus sufrimientos. No se iba a quedar callada.
Nuevamente tendríamos la misma conversación de siempre.
—Tamaki... —me detuvo mi madre en cuanto toqué la manija de la puerta—, ¿de verdad irás?
—Ya te lo dije, tengo que volver a clases.
El fin de semana había acabado y mañana sería el festival cultural, por lo que debía dormir en las residencias y así estar bien temprano en el salón de equipamiento.
Sin embargo, mi mamá se acercó a mí mientras temblaba. Podía dar miedo si no la conocías, pero yo ya estaba acostumbrado.
—Estoy harta, no me gusta que estés en esa escuela. Estuviste en el hospital, saliste muy herido de esa misión...
Mentiras. A ella lo único que le molestaba era que yo hiciera uso de mi don.
—Sé lo que estás pensando, ¿acaso no crees que una madre se preocupa por su propio hijo?
El don de mi madre era uno bastante molesto, que podía volvernos locos a ambos.
Ella podía leer mentes al mirar a los ojos a alguien.
Por eso procuraba nunca mirarla directamente.
Por eso y más le temo a mirar a la gente a los ojos.
—Aunque sea peligroso, es lo que elegí cuando decidí volverme un héroe —sentencié agarrando el bolso, pero nuevamente insistió y me contuvo ahí dentro—. Mamá, no podemos tener la misma discusión cada vez que me voy.
—Hijo... para mí no es fácil que te marches y uses tu don indiscriminadamente. Me recuerda a tu padre... cada día te pareces más a él. ¡¿Crees que ha sido fácil para mí criarte?!
Me volteé hacia ella porque dejarla sola cuando comenzaba a lloriquear, era el peor desencadenante de su locura.
Pero ya estaba harto de ese discurso.
''Te convertirás en un monstruo, igual que él...''
—No porque luzca como él, o porque use el don que heredé de él, significa que me convertiré en un criminal. ¿Ok?
Mi madre volvió a usar aquel arma psicológica contra mí.
Levantó su mano y demostró el dedo anular que le faltaba.
Le quité la vista disgustado, pues desde que era niño era su manera de atormentarme.
—... Dices que alguien que tiene sus genes, a tal punto de heredar su don, no podría verse corrompido para hacerle daño a las demás personas... ¡Lo llevas en tu sangre, Tamaki!
