Algunas ideas que me rondan mientras debía escribir Gopher... No me arrepiento de nada... (Tal vez ni esté al día con la actualización de Gopher... ;-; ¿por qué soy así?)
Probablemente ninguno tenga relación entre sí, pero si hay alguno con más part...
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Lo encontré en Twitter y no pude evitar escribir (es de principios de mes 7-7, debí prestar más atención, pero quería hacerlo al menos antes de que se acabe el mes)
Iba a subir Bifurcación, ¡¡pero decidí esta historia primero!!
...
La mañana había empezado de forma normal en la familia de cuatro. Song Lan preparó el desayuno mientras Xiao XingChen iba a despertar a los dos niños de 8 y de 3 años.
Rió cuando vio al pequeño Xue Yang colgando de las sábanas que estaban enredadas en su torso y piernas, evitando que su rostro impactara el suelo. Aunque él parecía seguir durmiendo tranquilo ajeno a su pronta caída si se movía un poco más.
Sonrió mientras se acercaba, levantó al niño y le quitó las sábanas.
-A-Yang, despierta –le dijo con voz suave mientras le daba pequeños golpecitos con su dedo índice en la frente, era divertido como el pequeño fruncía el ceño y se removía pero no abría los ojos aún.
Después de un rato de hacer lo mismo lo vio frotarse los párpados, él solo lo dejó en su cama para que se levantara tranquilo.
-Vamos, tu padre está haciendo el desayuno –le frotó la cabeza sabiendo que se enfadaría un poco– hay panqueques –luego intentó persuadir mencionando su desayuno favorito– voy a despertar a A-Qing, así que ve al comedor.
Xiao XingChen salió y se dirigió a la habitación contigua. Al entrar fue sorprendido por un pequeño abrazo en su pierna.
-¿No es demasiado temprano? –él levantó a la niña que reía feliz mientras agitaba las manos.
-¡Le dije a papá que comería sus panqueques primero! –respondió ella removiéndose para bajar, a lo que XingChen le hizo caso.
-Cierto, cierto. A-Yang ya está despierto –y como si esas palabras fueran un gran detonante, la niña salió corriendo aún en piyamas hacia el comedor.
-¡Yo llegaré antes! –él solo pudo reír de nuevo por las ocurrencias de sus hijos.
El desayuno pasó con tranquilidad, bueno, lo que se consideraba tranquilidad en su familia de cuatro. Con Xue Yang molestando a A-Qing en cada ocasión, ella quejándose con Song Lan, Song Lan obedeciendo de inmediato lo que le decía la pequeña, y Xiao XingChen sonriendo y evitando la posible guerra de comida que armarían esos niños si no los detenía cuanto antes.
Al acabar de comer, Song Lan y Xiao XingChen se encargaron de llevar a ambos niños a la escuela. Además de ello, Song Lan también fue directo al hospital para revisar unas muestras que tenía en el laboratorio.
Así que Xiao XingChen decidió matar el tiempo ya que ese día no tenía citas para pediatría.
Solo podía decir, para resumir, que intentó de todo hasta que finalmente fue el momento de recoger a los pequeños. Aunque antes de salir recibió una llamada del hospital, al parecer tendría que ayudar a cubrir el turno de un colega.
