APUESTA | JJK | BTS ©

C A P Í T U L O 27.

Mi chica.

Rose Smith.

—¿Ha que hora te iras? —le pregunté a Jungkook mientras tomaba un puñado de papas fritas y me comía una por una. 

—¿Ya me estas corriendo? —preguntó fingiendo estar ofendido. 

—No es solo que ya es muy tarde —miré la hora en mi celular— son siete de la noche. 

—Me iré hasta que tu madre llegue —respondió mientras comía papas fritas.  

—Llega a las diez —Jungkook asintió. 

—Me siento más cómodo si no estas sola.  

—Jungkook no pasará nada —tomé el plato de las papas fritas y lo deje en la mesita de noche, me incorpore sobre mis rodillas y me acerque a Jungkook sentándome a horcajadas sobre él, Jungkook enseguida me tomó por la cintura— Estaré bien, cerraré bien todas las ventanas y las puertas.  

—Aún así me sigue pareciendo peligroso —dejó un casto beso en mis labios— Mudate conmigo, estarás bien a mi lado. —solté un suspiro.  

—No lo sé Jungkook —rasque mi nuca— No se si mis padres lo aprueben.  

—Lo harán —dejo otro beso en mis labios— Prometí protegerte y lo voy a hacer.  

—Lo sé —junte mi frente con la suya— Pero, ¿cómo conseguiremos un departamento? ¿cómo lo pagaremos? Mi cuenta bancaria no cuenta con tanto.  

—Ya dije que no te preocupes por eso, yo me encargare —me alejé un poco de él. 

—No puedo vivir de "mantenida" —hice entre comillas con los dedos— me hará sentir incómoda. 

—Por mí no hay problema —tomo mi rostro entre sus manos— pero para que te sientas más cómoda, yo me encargare del alquiler por unos meses y ya cuando nos establezcamos bien nos turnaremos.  

Vaya no había pensado en eso. 

Ahora no tengo otro pretexto, pero no es que no quiera hacerlo, simplemente siento que es una decisión muy precipitada que puede terminar mal por no planear bien. 

—Está bien —respondí finalmente Jungkook sonrió. 

—Esa es mi chica —y sin más beso mis labios. 

Con una sonrisa seguí el ritmo que estaba comenzando a marcar, en un movimiento rápido cambió de posición dejándome debajo de él.  

—No puedo esperar para que vivamos juntos —dijo con una sonrisa mientras dejaba besos por todo mi rostro, no pude evitar reír con mis mejillas totalmente sonrojadas— Tendremos más privacidad, más momentos juntos y mucha intimidad. 

Golpee a Jungkook con una almohada este no pudo evitar reír.  

Si seguía diciendo cosas así mis mejillas se pondrían realmente rojas. 

—Deja de decir eso —pedí tratando de ocultar mi rostro sonrojado con mis manos, Jungkook abrió el compás de mis piernas y se colocó en medio de estas, solté un leve grito de la sorpresa— Jungkook ¿qué haces?  

—Eres una mal pensada, solo quería acomodarme mejor —en un movimiento inesperado se pegó a mí provocando que sintiera su dura erección hacer presión en mi feminidad. 

—Eres como un microondas, te calientas muy rápido —Jungkook soltó una risotada. 

—No puedo evitarlo cuando tengo a tremenda mujer frente a mí.