[COMPLETA] [EDITANDO]
¿Quién lo diría? Que él chico que creía que todas las mujeres eran más que simples juguetes, terminaría enamorándose perdidamente de su apuesta. De la chica que prometió destruir.
Fue todo gracias a una apuesta ambiciosa. Él l...
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Rose Smith.
Me aleje de los labios de Jungkook empujándolo, al estar a una distancia considerable, pase el torso de mi mano limpiando mis labios lo que provocó que Jungkook arqueara una ceja.
—No vengas aquí pretendiendo que no estoy molesta contigo —caminé hacía la ventana abriéndola—. Así que sal por donde entraste, no te quiero aquí —soné firme, Jungkook se acercó a mí. Y aunque en cierta parte manera algo en mi quería seguirle el beso y el hecho de que se quedara, aun así tenía que mantenerme al margen.
—Por eso mismo vengo, a arreglar las cosas —comenzó a explicar mientras tomaba la pequeña puerta de vidrio de la ventana cerrándola—. Pero tienes que responderme rápido.
—Habla entonces —me crucé de brazos, Jungkook soltó un suspiro.
—Tú y yo sabemos que Skyler y Lucas les gusta festejar a lo grande —asentí como respuesta—, bueno pues los padres de Skyler nos prestaran una propiedad cerca del lago, así que hemos venido por ti.
Al escuchar sus palabras comencé a negar enseguida, no podría irme y menos en sábado.
—No, no puedo ir. —respondí negando y sentándome en mi cama, Jungkook se sentó a mi lado.
—Por favor, el cumpleaños de Hoseok se va a cruzar —lo miré frunciendo el ceño.
—No tengo una amistad con Hoseok, ¿Tendría que ser algo importante?
— ¡Claro que sí! —Tomo mi rostro entre sus manos—. Hoseok es la luz del grupo, sin el seriamos unos amargados. Tenemos que estar para él, además el hecho de que seamos algo más que amigos, convertiría a Hoseok en tu amigo.
Termino dejándome sin palabras, Jungkook tenía razón y aunque no quería aceptarlo, la relación entre Jungkook y yo ya no era la de antes, ahora éramos algo más que amigos, no éramos pareja, pero éramos ese "casi algo". Y aunque aún no me acostumbrara a aquello, tenía que darle la razón a Jungkook, sin contar que un viaje no me vendría mal.
— ¿Cuántos días estaremos haya? —Pregunté comenzando a ceder y Jungkook esbozo una sonrisa victoriosa antes de revolver mis cabellos.
—Todo el fin de semana, desde el viernes hasta el domingo —respondió luego de que lo mirara mal después de despeinarme, este comenzó a pasar sus dedos por mi cabello regresándolo a su lugar.
— ¿Sabes que hoy es sábado verdad? —Jungkook asintió.
—Iremos el próximo fin de semana —se levantó de su lugar caminando a la puerta—. Asegúrate de hacer tus maletas y de pedir permiso.
—Espera —dije deteniéndolo antes de que saliera—, ¿Adónde iremos exactamente?
—Será como un campamento al lado del lago. —respondió antes de tomarme por la nuca y darme un corto beso que me dejo descolocada—. Adiós.
