SESENTA Y CINCO

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El lunes había llegado más lento que rápido y las clases de química y matemática no habían ayudado a su mal humor. Mucho menos había sido agradable encontrarse con sus amigos, Zayn y Niall, porque éstos no habían hecho más que regañarlo por su estúpida actitud como si él mismo no supiera que había hecho mal las cosas. Lo sabía, lo tenía muy claro, no tenían por qué recordárselo.


Pero en fin, aunque el día fue horriblemente largo y tedioso, la hora de salida había llegado y su piernas no hicieron más que moverse con paso apresurado hasta la calle esperando encontrarse con Harry y poder pedir una disculpa formal. Quizás darle algunos besos y decirle que realmente gusta de él, que no es un niño idiota del que tiene que andar cuidando pero que aun así le agradecía lo que hacía por él.


Sin embargo, nada de eso pasó. Absolutamente nadie esperaba por él afuera de la escuela.

Harry no apareció en ningún momento y si seguía esperando por él su madre podría enterarse que tardó más de la cuenta en volver a casa y su castigo sería aún más duro.


El día martes y el que le siguió no fueron diferentes y había mantenido la ilusión de ver a Harry hasta ese jueves a las dos con dieciséis minutos.


— ¿Y si vas a su casa?- dijo Liam para tratar de relajar a Louis que empezaba a respirar pesado. —Lou, relájate.


—No me digas qué hacer Liam.- arrojó con acidez mirándolo con la mandíbula apretada. — Y no iré a su estúpida casa ¿qué se cree? Hacerme esperar cuatro días por él.- soltó una risa amarga. — Si cree que me arrastraré por su perdón está muy equivocado.


—Quizás le pasó algo.- trató de razonar aunque no quería contradecir a Louis, pues no quería que éste le dejara de hablar como había hecho con Zayn y Niall.


—No, mamá me hubiera contado si algo le pasó.- dijo después de pensarlo unos minutos. No, Harry simplemente lo estaba ignorando. — Nunca le gusté y ésta es su excusa perfecta para hacerme a un lado. Es más que obvio.


—No lo creo.- respondió negando con la cabeza. — Viene por ti al colegio, se preocupa por tu bienestar y más de una vez te ha dicho que eres hermoso, tú mismo nos contaste.- lo señaló con la mano como si estuviera diciendo lo más obvio.


Pero Louis no escuchaba, no, Louis estaba muy ofendido y herido. — No estaré atrás de él, no vino a escuchar mis disculpas, se comporta como un niño.


— ¿Estás seguro que es él quien se comporta como un niño, Louis?- preguntó y sin esperar una respuesta se dio la vuelta dejando a Louis con un insulto en la boca a medio salir.


Y sí, la angustia de haber cometido un error se había sublimado en una furia irracional contra sus amigos, su madre y, con mucho pesar, contra Harry también.



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Ok, este drama no va a durar nada pero lo necesito, recuerden que Louis es un adolescente y sus emociones son completamente cambiantes. Ya se viene la parte bonita de Larry y todo eso :)

HARRY... CONÉCTAMELADonde viven las historias. Descúbrelo ahora