Capítulo 2

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Abrió los ojos lentamente y analizó la habitación en la que se encontraba, definitivamente no era su casa, era un cuarto más pequeño. Su vista fue a parar a un par de maletas cerca del clóset y fue cuando recordó todo, seguramente este sería el cuarto que le correspondía en la academia.

Unos golpes en la puerta la sacaron de sus pensamientos, trató de calmarse y retomar la compostura. Fue hasta la puerta y la abrió.

-¡FRANK!- se lanzó a los brazos de su mayordomo e hizo una pequeña rabieta en su pecho hasta que se percató de las otras personas, unas de ellas eran el muchacho que conoció esta mañana y un chico de cabello castaño.

-Hola, te desmayaste fuera del salón, Toono y yo te trajimos a tu habitación.

Kai se rasco la nuca con una risa nerviosa.

-Muchas gracias, lamento las molestias - hizo una pequeña reverencia.

-Señorita Yamada, ¿Podría acompañarnos a la dirección? Necesitamos hablar sobre su situación – habló el director - joven Kyousuke, joven Takashi, regresen a su salón, su profesor regresará en cuanto terminemos.

Se encontraba con su mayordomo frente al escritorio del director, y el profesor a la derecha, recargado en un mueble

-Señorita, seguramente se percató de una escuela al pie de las montañas, mi esposa es directora ahí, el Sho es igualmente una academia prestigiosa y mixta, por lo que, al estar ligados de alguna manera, puede ser transferida ahí

Los ojos de la muchacha se iluminaron, todo parecía mejorar.

-Sin embargo, ya que estamos a mitad de curso, me temo que no será posible transferirla ahora, y además es un proceso largo, es por esto, que yo sugiero que acabe el año aquí, son 6 meses, en los que le garantizo educación de calidad, yo mismo me encargaré de los trámites para que su segundo año lo comience ahí- Se pasó una mano por el cabello, dio un corto suspiro y continuó- Hasta entonces deberá permanecer aquí y como disculpa por el error, le puedo permitir salir de la academia un fin de semana al mes. ¿Qué decide?

-El error fue mío, estuvimos meses buscando un lugar en el que Kai-san pudiera estudiar...- Frank comenzó a explicar todo-..., pero al parecer ha habido un malentendido con su nombre, ya que es mixto, creyeron que el heredero de la familia Yamada, era un varón. Kai-san, puedes terminar el ciclo aquí, o volver a casa, le diré a sus maestros particulares que regresen, como usted guste, sus padres aún no saben de esto.

Era una buena idea, pero ella ya quería salir al mundo de una forma u otra.

-Me quedo, no quiero volver a estudiar en casa.

-Perfecto, entonces le presento a su tutor, el profesor Fujinuma- dijo el director satisfecho con la solución dada.

-Mucho gusto, yo la cuidaré los próximos 6 meses, ahora si gusta, iremos al comedor ya que nos encontramos próximos al descanso para el almuerzo y acabando despediremos a su acompañante.

En el portón de la academia se encontraba la muchacha despidiéndose de su mayordomo mientras el profesor esperaba pacientemente.

-Nos vemos mi niña, vendré por ti cada mes, sin falta, lo prometo- Un corto abrazo, un beso en la frente y subió al auto.

Un sentimiento de tristeza se alojó en su pecho mientras lo veía alejarse y lo despedía con la mano, a pesar de que todos en la casa la trataban con amor, Frank es quien la ha cuidado desde su nacimiento y nunca se habían separado. Pero la oportunidad de estudiar fuera de casa es su puerta a la libertad, si, es un internado, y no es lo que pensaba, pero algo es algo.

Una mano en su hombro la trajo de vuelta

-Vayamos adentro señorita, y bienvenida, entraremos al segundo periodo.

Regresaron al salón y tomó aire antes de pasar, el profesor la esperaba adentro y cuando escuchó- Pase

-B.bue.nas tar.des- Miró a los chicos que la habían llevado a su habitación sonriéndole e inesperadamente se sintió más tranquila- Mi nombre es Yamada Kai, unos eventos inesperados me harán estudiar aquí, estoy muy feliz de conocerlos, por favor cuiden de mi- hizo una corta reverencia y les sonrió, el profesor le indicó tomar un lugar frente al escritorio y continuó la clase

Le harían unos exámenes para determinar si iba al corriente con los temas, y de ser necesario, le asignarían como tutor a uno de sus compañeros, serían el fin de semana y mientras tanto, esta semana tomaría las clases de manera normal.

Sonó el timbre y el profesor le daría un recorrido por la escuela.

-Profesor- dijo Yacchan- Si me permite, me gustaría darle yo el recorrido, la conocí esta mañana, por lo que ya no soy un completo desconocido- sonrió tiernamente

-Si la señorita está de acuerdo.

-Me encantaría, no quisiera seguir retrasando su trabajo, y Kyousuke-san es muy amable al ofrecerse.

-Sería una buena oportunidad para que hagas amigos, vamos- La tomó de la muñeca y salieron del salón.

-¡Yachhan!- una voz los detuvo en su camino

-Toono- le sonrió, pero algo en su mirada le parecía extraño

-Oh- dijo la muchacha e hizo una reverencia- muchas gracias por ayudarme en la mañana, fue muy amable.

-Es.está bien, no pasa nada, mi nombre es Takashi Toono- hizo una sonrisa modesta

-Gracias Takashi-san.

-N.no es necesaria tanta formalidad, puedes decirme Toono, es un gusto conocerla Yamada-san

-Si yo te dijeré Toono, tú puedes llamarme Kai, ahora somos amigos.

-Y a mi me puedes decir Yacchan, ¿Quieres acompañarnos Toono? Le daré un recorrido por la escuela

-Me encantaría, pero tengo reunión en el club, por cierto, Kai-chan, no te inscribas al club de fotografía- la agitó levemente de los hombros y la mueca de terror en su cara le pareció graciosa a la muchacha- nos vemos más tarde- y se fue haciendo señas con la mano.

Pasaron un buen rato paseando y el chico le presentaba a las personas que se encontraban, llegaron a los dormitorios y se despidieron.

-Muchas gracias Yacchan, eres muy amable.

-Por nada, ¿Tienes alguna pregunta?

-Ahora que lo mencionas, ¿A qué se refería Toono con lo del club de fotografía?

-Claro! -Se palmeó la frente- cada estudiante debe están en algún club por lo menos el primer año, verás, tenemos clubs deportivos como futbol, o artísticos como el de teatro o el de fotografía, pero...- No continuó al ver que la muchacha se había quedado ensimismada

- ¿Dónde me inscribo al de teatro?-Una pequeña chispa se posó en sus ojos, y es que desde pequeña, solía dar presentaciones a los sirvientes de la casa y tomó algunas clases con maestros particulares, pero sus padres no le permitían entrar a alguna escuela de actuación por temor a que se apasionara de eso y no siguiera el camino de la hotelería, después de todo, alguien debía encargarse de las empresas cuando sus padres faltasen y ella era la única heredera

-Mañana te llevaré con el presidente- le dijo con una sonrisa y le acarició la cabeza como a una niña pequeña, no sabía que era, pero algo en la muchacha le causaba ternura, quizá era por lo inocente que parecía o el hecho de que era la única mujer y sentía la necesidad de protegerla

-Gracias otra vez, Yacchan! Nos vemos mañana

-Nos vemos

Estuvo lo que restaba de la tarde desempacando y acomodando todo lo de sus maletas, en la noche cenó el cereal que Frank le había mandado entre otras frutas y cosas por el estilo.

Gracias a todos los cielos que su nana le había envió su pijama de peluche, ya que en la montaña hacía mucho frio, se cercioró que su uniforme estuviese listo, respondió el mensaje de buenas noches de Frank y se fue a dormir.


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