Baboo!

Capítulo 22

Yuri había decidido pasar a buscar a Kai a su salón, quería ser el primero en recibirla después de su prueba, sabía que sería en el último periodo cuando presentase su examen y faltaba poco para que el tiempo terminara, así que decidió esperar junto a la puerta.

Vio salir a varios chicos, algunos incluso se acercaron a saludarlo, pero la única que le importaba no estaba ahí, pensó en irse hasta que vio salir a Toono.

-Oye~

Este volteó con cara de terror al identificar la juguetona voz.

-¿S-sí, Yuri-senpai?

-¿Kai?

-¿Hmm? ¿Estaba esperándola? – cambió su expresión cuando el contrario asintió - fue la primera en salir, ya ha pasado un tiempo desde entonces

Yuri inmediatamente sacó su celular, presionó una tecla y después se pegó el aparato a la oreja. Le pareció tierno a su kohai ver que el pelirrosa tenía a Kai en marcación rápida.

-¿Baboo~?... Ujum.... Voooy~- colgó, alzó su mochila y se acercó al otro chico- gracias~- palmeó su hombro y comenzó a correr

Toono se quedó unos segundos mirando por donde su senpai se había ido, ¿Dijo "gracias"? Aunque no quisiera admitirlo aún, él ya sabía que Yuri adoraba a Kai, no pudo evitar suspirar y esbozar una sonrisa al pensar lo extraño que era el cambio de su senpai.

Aunque también le preocupaba el hecho de Yuri tuviera problemas en el club por haber dejado de asistir tan súbitamente, había ido a un par de juntas, pero escuchó por Tamura que hace tiempo que no se acostaba con alguien, y eso estaba molestando a Akemi.

-Ojalá que todo resulte bien para ellos- pensó en voz alta y se fue a su club, al que obviamente su senpai no asistiría de nueva cuenta

[...]

Sus cosas estaban recargadas en el tronco de un árbol y ella estaba sobre una rama, miraba las nubes que el follaje le permitía mientras escuchaba música. Estaba tan ensimismada que no notó cuando su compañía llegó.

-Baboo~- es verdad que lo estaba esperando, pero no creyó que llegaría tan rápido, su asombro fue tanto que casi cae de su lugar- ven- extendió sus brazos y la cargó para ayudarla a bajar

Sin embargo, Kai nunca tocó el piso, Yuri se sentó en el césped con todo y la chica en sus brazos, después la acomodó en su regazo.

-¿Comiste?- le preguntó y ella negó, ganándose una mirada severa de parte del chico- ¿Por qué?

-Estaba tan nerviosa... creí que si comía algo, lo vomitaría- la mueca que acompañó su comentario, le hacía imposible molestarse con ella por demasiado tiempo

Yuri sonrió y la pegó más a su pecho.

-¿Me acompañas a comer?

-¿Tú tampoco has almorzado?- lo miró asombrada- no es bueno que te saltes comidas

-No creo que estés en posición de reclamar eso- se burló

-Touché- se levantó y extendió su mano- pero no puedo dejar que mi Yuri se malpase

El chico no sabe si Kai fue consciente de cómo lo llamó, pero definitivamente ese adjetivo había logrado mover sus entrañas.

La elevó nuevamente y aprovechó para esconder su rostro en el cuello con olor a vainilla que tanto le gustaba. Esperó unos segundos para recuperar su tranquilidad, cuando estuvo seguro de que Kai ya no vería su sonrojo, tomó ambas mochilas y comenzó a caminar con ella en brazos.