C12 ~ TRAS LA SOMBRA (PARTE I)

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—¡Mamá! —grité fuerte mientras abría de golpe la puerta de mi casa.

—¡Brida, estás bien! —se levantó del sofá y corrió hacia mí rápidamente.

—¡Mamá! —gritaba mientras corría a ella y en medio de la sala nos abrazamos fuerte por un par de minutos, sus abrazos siempre me hacían sentir mejor —es bu... Bueno estar en casa —dije tartamuda con voz llorosa.

—Hija... —decía dulcemente.

—Mamá... —las lágrimas comenzaron a brotar y a escurrir por mis mejillas —estaba muy asustada. Si te hubiera escuchado tal vez eso no habría pasado —no lograba contener mis lágrimas —lamento haber hecho que te preocuparas, por favor perdóname.

—Hija, ahora todo está bien —acarició mi cabello —pero necesito que respires profundo —ella respiró hondo para que imitara su acción —ahora dime como hallar a esos malditos.

Mamá tomó su teléfono y se comunicó con Yaneth, una amiga detective o algo así y en menos de diez minutos se encontraba ella en nuestra casa.
Lo primero que le pedí fue que me quitara las putas esposas, ya no lo las soportaba.
Le di todos los detalles de la zona y del lugar.

—Todo está en una especie de bosque... —continué, me pedía todos los detalles que fueran posibles recordar y felizmente se los ofrecía.

—¿Así que todo ocurrió en una casa en medio del bosque? —preguntó y asentí —¿casa color turquesa? —asentí nuevamente —y en cuanto llegaste a una carretera pediste que alguien te diera un aventón... —asentí por tercera vez —bien. Por lo que describes, tengo entendido que un escuadrón se dirigió a un lugar así hace algunas horas pero no he recibido información alguna.

—Pues... —iba a contarle que si hicieron acto de presencia en el lugar cuando ya me encontraba huyendo, pero me interrumpió.

—Déjame contactarlos inmediatamente —tomó su teléfono y comenzó a llamar en altavoz —Detective Smith, es la Detective Herrera solicito información sobre el caso de secuestro de Brida Lamoglia ¿que ocurrió con las tierras que inspeccionaron hoy?

—Detective Herrera, debo informarle que tenemos en custodia a los sospechosos pero no había señales de la joven, tememos que la hayan asesinado y ocultado su cadáver —las tres nos miramos con los ojos bien abiertos por la suposición del detective —ya que en la habitación habían pequeñas gotas de sangre que no coincide con la de ninguno de los sospechosos.

—Smith... —dijo la detective seriamente.

—Sí, Herrera...

—La joven está junto a mí en este preciso instante —informó la detective —saluda al detective, Brida.

—¿Que tal, detective? —saludé graciosa a través de la línea telefónica. Sé que muchos estarían abrumados pero, para mí era un gran logro haber sobrevivido sin ayuda de nadie a tal calamidad.

—¡¿Qué?! —gritó sorprendido —debe traerla a la estación de inmediato.

(***)     (***)

Todo fue una experiencia totalmente nueva y diferente para mí, el tener que hacer el reconocimiento a mis secuestradores fue muy placentero, aunque había algo que me preocupaba, en los días que me encontré encerrada tuve contacto visual con tres hombres, pero eventualmente escuchaba dos voces adicionales, no sé si solo eran amigos de ellos que no sabían de mi existencia o si eran cómplices y si así era, debía preocuparme y mucho.

Me encontraba en una de las sillas de la estación cuando sacaron esposado a uno de mis agresores (porque sí, me agredieron verbalmente pero también físicamente, aunque tampoco me habían roto un hueso o algo así) y lo vi nuevamente, y él solo me observaba con esos ojos grises, tan vacíos y llenos de odio.

—¡Maldita, perra! —gritó, tratando de zafarse de los policías que lo retenían.

—Quiero hablar con él —solicité a los policías y accedieron —te lo dije —me acerqué a él lentamente —te dije que sería libre y te vería caer, bastardo de mierda —escupí mis palabras.

—Nunca serás libre, pedazo de mierda —me miró de arriba a abajo —siempre habrá alguien detrás de ti —sus ojos no reflejaban ni una pizca de remordimiento —siempre habrá alguien persiguiéndote, siempre habrá alguien tras la sombra. La hermandad no deja nada a medias —me quedé muda, no entendía de que me hablaba, pero mi cuerpo se tensó ante sus palabras...

Luz, Cámara... ¿Amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora