Melodía Perfecta [Emiliaco]

Dieciseis 🎶

N🎶

Emilio se sentía confundido con respecto a lo que Gabriel le dijo, estaba desconcertado pues creía que era su amigo, le había confiado muchas cosas, pero se agradecía internamente por no haberle contado algo de Joaquín o de sus sentimientos, por alguna razón nunca sintió necesario hacerlo y ahora es que caían en cuenta que quizás era un presentimiento de que no era seguro hablar de eso. Ahora debía decidir si le contaba a Joaquín al respecto o simplemente disimulaba su amistad con él, puesto que, si le decía al chico, este con justa razón se molestaría y tal vez podría hablar con sus padres de eso, lo cual podría provocar problemas entre la orquesta y los Bondoni, una opción que no era favorable; por otro lado, si ocultaba si amistad con él y disimulaba después de los ensayos, Joaquín podría confundirse y molestarse con él debido a un cambio sin explicación. En definitiva, sus pensamientos no lo dejaban tranquilo, pero esperaba esperanzado que una favorable respuesta llegara a su cabeza, por lo pronto trataba de descansar y relajarse del día atareado en su cómoda cama, esperando un mensaje de su amigo Bondoni para charlar un rato.

Cuando llegó a su casa le platicó a su madre y a su padre acerca de las clases y el hecho de que querían pagarle por ellas, les pidió un consejo sobre el tema y ellos le dijeron que podría aceptarlo, pero no una gran cantidad, ya que son amigos y él tampoco es maestro, pero que al final de cuentas eso debían decidirlo ambos chicos.

Tras un rato, al fin obtuvo Emilio el mensaje esperado, entonces se dispusieron a charlar durante una larga llamada, normalmente platicaban por mensajes, pero un día se aburrieron de escribir y decidieron llamarse para poder charlar mejor, ahora es algo común entre ellos.
Platicaron de muchas cosas, entre ellas, Emilio le contaba un poco acerca de lo que vivió cuando aprendió a tocar flauta y que había estado investigando flautistas e información para sus clases próximas, lo cual les emocionaba más. Cuando llegó el tema del pago por clases Joaquín se adelantó a hablar, le dio una solución que le parecía bastante buena, debido a que de un principio Emilio dijo no querer cobrarles, el menor le dijo que aceptara lo que gastaría en pasaje para llegar a su casa e impartirle clases ahí, pues sería de esta manera y no quería que gastara tanto en taxis, a lo cual Emilio aceptó, le parecía una buena idea, así que ese fue el acuerdo al cual llegaron, ahora estaban prácticamente todos los detalles aclarados, listos para su primera clase.
Platicaron un rato más sobre cosas triviales hasta que llegó el momento de colgar y así evitar ser regañados por sus padres.

El resto del día cada uno se dedicó a convivir con sus respectivas familias, esperando con ansias la llegada del próximo domingo.

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Emilio seguía con los pensamientos inquietantes en su mente y le daba mil vueltas al tema de lo que le dijo Gabriel. En sus ratos libres entre clases le platicó todo a su mejor amigo Juan Diego, quien trató de aconsejarlo diciendo que debía contarle a Joaquín, pero al igual que en sus reflexiones personales, le dijo que eso podría ser contraproducente, logrando que simplemente quedaran en la misma situación sin ningún avance, pero al menos se sentía un poco mejor de haberlo contado a alguien, sobretodo en su mejor amigo, sabe que puede confiarle cualquier cosa y recurrir a él en caso de necesitarlo.
JuanDi parecía el más emocionado por el avance en la amistad de Joaquín y Emilio, le hacía bromas al respecto también, pero le alegraba ver que su amigo reflejaba cierto comportamiento más animado que de costumbre, miraba más su teléfono y sonreía como bobo viendo hacia él, incluso había cierto brillo de ilusión en sus ojos, solo esperaba que no lastimaran a su amigo.

Los días pasaban lento para ambos chicos, al menos eso sentían ellos, pues en verdad ansiaban la llegada de ese día en el cual compartirían una de las cosas más importantes y que los dos disfrutaban mucho, eso que de forma indirecta los unía y cada vez se volvía más directo, pues se sentía como un lazo el cual poco a poco se acortaba y los acercaba de una manera sutil pero significativa.
Cuando llegó el sábado en la noche decidieron hacerse una llamada para platicar y planear el día siguiente, Joaquín le dijo que las únicas personas en su casa son su hermana y Brenda, pero que tal vez sus padres llamen para supervisar la primera clase, aunque no era algo seguro, eso logró poner un poco nervioso a Emilio, pero lo tomó como un reto, dar una buena clase, sumado a una buena impresión a los señores Bondoni, no era imposible, definitivamente no podía arruinar esa oportunidad, así definitivamente daría lo mejor.
Hablaron durante un largo tiempo, incluso solo colgaron porque debían levantarse temprano al siguiente día y podrían hablar más en persona, pero ambos estaban felices por la relación y la amistad tan bonita que desarrollaron, ninguno de los dos pensó que sería así, claramente las mejores cosas llegan de forma inesperada y sin previo aviso.