Esniel a la Intemperie

Legado

he decidido que mejor cambio los >>> y <<< por el clásico ***, se sobreentiende cuando es un flashback, un cambio de perspectiva o el paso de determinado tiempo.

jaja el darsoul
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Wellack ensillaba a su cuarto de milla. Era una yegua de pelaje alazán. Puso unas pocas monedas en las alforjas, lo suficiente para un par de noches en algunas tabernas. Gener le dio los buenos días portando un bello montante itvanés. Medianamente ligero y un poco largo; de empuñadura de tungsteno bañada en plata. La hoja de acero tenía grabado en erén "Lo único más importante que la vida es el honor"

—Tu padre dejó esto para ti —dijo Gener extendiendo la mano hacia Wellack.

—Por muchas espadas que me hubiese dejado —gruñó rechazando la espada— no lo voy a perdonar por lo que me está haciendo hacer.

—Wellack, tu padre fue un gran hombre en la Flama del Dragón...gracias a mí tuvo un puesto aquí.
》Esto fue lo que le permitió a tu familia una buena vida —prosiguió—él me juró lealtad por todo esto.

—Le juró lealtad a un asesino y me hizo prometerle que yo le juraría lealtad también.

—Le juró lealtad al hombre que va a cambiar el mundo...para bien.

—Solo quieres poder, ambos sabemos eso.

—Wellack —dijo apretando el puño—estimaba mucho a tu padre, esa es la razón por la que no has terminado en la orilla de algún lago.
》Tu padre murió por tu culpa, por tus descuidos. Lo mínimo que puedes hacer es honrarle con tu ayuda, al fin y al cabo en tu linaje lo más importante es el honor.

—Si, el honor...los términos de honor y esa mierda.

—¿Ya le has dado un discurso a tus acompañantes?

—¿A los ocho tarados que me has dado? A esos solo se les anima con un par de tetas.

—Te las das de moralista pero te importan una mierda aquellos que no sean antiguos hombres de tu padre —dijo con tono burlón Gener.

—Creo que no me entiendes —le corrigió indignado—puede que sean ocho energúmenos pero ahora son mis hombres y mientras lo sigan siendo no dejaré a ninguno morir, no al menos hasta que encontremos a La Agenda y volvamos.

***

La cuadrilla atravesaba el Verdecio, llenando de lodo los cascos de sus caballos.

—Joder ¡Hostias! —se quejó Esniel—si hubiese llegado a saber que iban a ser cuatro meses de viaje hubiese obligado a Swency a crear un portal.

—Siempre es mejor perder una pierna a un viaje —bufó la hechicera.

—Swency ¿Cómo funciona esto de la magia? —preguntó Marlo.

—En sí, es un arte arcano. Solo se sabe que funciona a base de algo parecido a un aura llamada maná.
》Cuando se acaba el maná empieza a consumir sangre, sin embargo a grandes cantidades sin importar la magnitud o duración del hechizo...—agregó

—Swency hasta ahora nunca te he visto hacer algo —le interrumpió Marlo.

Swency frunció el ceño, agitó la mano derecha y la extendió hacia Marlo. Una pequeña onda expansiva salida de la nada lo empujó haciéndolo caer del caballo hacia el barro.

—Vale...me cayo —escupió barro—sigue explicando.

—Lo que puede hacer un hechicero depende de dos cosas, una es con lo que nace y la otra es el momento o la situación que se tiene que dar para "desatar" por así decirlo su poder.
》Me refiero a que por ejemplo yo puedo manipular perfectamente el entorno, dentro de lo posible y a duras penas puedo hacer algo por mi misma sin alguna fuente de maná o energía vital.