Epílogo

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Es una tarde agradable en el Nexo de Luna. Las cosas aquí han cambiado mucho desde su primera visita. Los edificios y jardines son muy parecidos, pero Lujanne tiene compañía ahora. Al principio era extraño ver a Lujanne con un humano, pero ahora se veían más relaciones mixtas y la elfo parecía muy feliz.

Callum estaba feliz de ver que Ellis y él no eran los únicos humanos presentes.

El calor del día de mediados de veranos ha dado paso a una noche templada, perfecta para sentarse y conversar con amigos y familiares. La música suave flota en el aire y en todas partes las personas (elfos y humanos) van y vienen. Ezran y Soren se divierten tomando un poco de tartas de gelatinas.

—¿Estás bien allí?— Rayla se acerca más a él, deslizando su mano entre las suyas.

Él le sonríe, admirando la forma en que su cabello platino brilla a la luz de la luna. —Sí. Simplemente estoy feliz, estamos aquí todos juntos de nuevo.

Ella sonríe radiante. —Idiota.

Él resopla. —¿Tú ... quieres salir a caminar?—  Su corazón comienza a acelerarse. Debería ser un castigo estar tan feliz.

Rayla se encoge de hombros y toma un sorbo de jugo Moonberry antes de ponerse de pie. —Por supuesto.

Callum termina su vino, esperando que le ayude a no parecer más emocionado de lo normal.

—¿A dónde van? ¿Puedo ir?— Ellis les sonríe y Callum no está seguro de sí ella solo está bromeando como lo hace a menudo.

—Solo vamos a estirar las piernas—  Callum espera que el ligero temblor en su voz no sea obvio. Sonrió mientras se apoyaba en un bastón para caminar, aún no estaba recuperado del todo, pero Ibis y Lujanne le habían dicho que pronto estaría como nuevo.

— Callum — Dice Rayla viéndolo. — ¿Que pasa?

El joven príncipe sonríe y señala el lago en el Nexo — Solo pensaba en como hemos cambiado desde que estuvimos aquí siendo más jóvenes, en como vamos a seguir cambiando... Y que seremos más, no se si Lujanne este feliz de que seamos más personas profanando sus trampas y el lugar sagrado de los elfos de luna.

Rayla se rió, era cierto que Lujanne les había dicho algo así antes, y que no era la persona más sociable del mundo. Pero cuando Callum estuvo en ese estado vegetal ella se había unido con todas esas cartas y preguntas.

— Sabes que ella puede usar magia para saber... Podríamos preguntarle — Rayla toca su abdomen abultado.

Callum sonrió, pero rápido se pudo serio — No, no voy a caer, será sorpresa. ¿Que tiene de malo que sea una sorpresa? 

— No lo sé, no soy buena con las sorpresas.

— ¡Hey! Conocernos fue una sorpresa.

— Y casi te mato.

— Quizás no fue el mejor ejemplo de sorpresa — Admitió Callum

Ambos sonrieron, los últimos meses habían sido difíciles, Callum vio el lago, habían pasado tantas cosas desde que eran unos adolescente queriendo cambiar el mundo. — Creo que ellos te hubieran amado. Me refiero a mis padres.

Rayla sabe que hablar de sus padres es algo que Callum casi no hace, le duele pensar en ellos y en los últimos años a pesar de ser alguien que expresa lo que siente, cuando se trata de los anteriores reyes simplemente no puede hablar mucho.

— Me hubiera gustado hacer algo ese día... Pude haber intentado

— Rayla, está bien... — Callum aventó una pequeña roca al agua — Ese día te conocí, no cambiaría nada, porque entonces no estaríamos por ser padres... Solo tengo miedo de no saber que hacer.

— Serás un buen padre, lo sé, como sé que la luna está ahí arriba siempre, aún si no podemos verla algunas noches.

Callum siempre se sorprendía por la facilidad que tenía Rayla para hacerlo sentir tranquilo.  Los meses pasados habían estado llenos de acontecimientos y hubo momentos en los que no pensó que llegarían aquí, pero de alguna manera, las cosas parecen haber funcionado.

Están de vuelta juntos. A punto de embarcarse en el próximo capítulo de sus vidas.

—¿Qué?—Ella presiona su frente contra la de él mientras Callum la mira fijamente.

— Nada.— Él la acerca más a ella. —Solo estoy feliz.

Rayla no puede evitar sonreír  — Sí, yo también soy feliz.

Ambos vieron el lago, habían pasado muchas cosas desde la primera vez que se conocieron y ahora estaban ahí junto a su familia y seres queridos festejando que están juntos. Callum sentía que estaba haciendo lo que su padrastro le había escrito: construir una historia en base al amor.

Las Formas del amor Donde viven las historias. Descúbrelo ahora