Divergente (Cuatro/Four)

Capitulo 7- Tatuajes

Cuando llegué a la habitación asignada a los iniciados no había nadie, era el momento perfecto para una ducha, rápida pero que relajara mis músculos, que no habían soportado estos niveles de esfuerzo físico en mis 16 años.

El agua no llegaba a calentarse por completo, no era como cuando vivía en Erudición, dónde podía calentar el agua hasta que casi se evaporara al tocar mi piel, pero no estaba mal. Escuché ruidos que provenían del interior de la habitación, así que me apresuré a taparme con una toalla para evitar ojos curiosos. La causante de los ruidos eran Lexi, Emily y Tom, el último se sonrojó al ver que solo llevaba una toalla, un gesto tierno que hacía que diera la impresión de que llevaba un minuto aguantando la respiración.

- ¿Dónde estabas?- preguntó Emily en tono preocupado.- Se supone que no podemos salir del recinto, pero no te encontramos por ninguna parte después del entrenamiento.

- Salí a tomar el aire, solo corrí por el mismo camino que al principio del entrenamiento...- Tom me interrumpió.

- ¿Corriste sin que te obligaran?- mi única respuesta fue un leve balanceo de mi cabeza de forma afirmativa, provocando una mirada aún más incrédula por parte de Tom.- ¿Por qué?

- Me ayuda a pensar.- dije encogiendo de hombros.

- Oye Mad... Josh ha estado diciendo...- Lexi habló por primera vez, pero en cuento descubrí que quería decir la interrumpí, sabía que este momento llegaría tarde o temprano.

- ¿Que Eric es mi hermano?, lo sé, es cierto.- suspiré, odiaba dar explicaciones- No sabía que estaba aquí, mis padres nunca me dijeron que facción había elegido, solo sabía que se había ido. Descubrí que estaba aquí cuando nos pidió que saltáramos desde el techo de aquel edificio, el también se sorprendió al verme. -a estas alturas no podía evitar sonreír recordando mi primera impresión cuando lo vi en su apariencia de osado- No lo reconocí al principio, está muy cambiado. Josh me alcanzó cuando estábamos corriendo por la mañana, tratando de echarme en cara que era un enchufada, lo cual no es cierto, pero supuse que iría diciendo eso a los demás.

- Estuvo hablando de eso mientras golpeábamos a los sacos, tu estabas lejos y no lo escuchabas.- una sonrisa fue ocupando poco a poco la cara de Lexi hasta casi opacar sus grandes ojos azules- Se le cerro la boca cuando vio como dejaste a Sam, tenias que haberle visto la cara, a el y a sus amiguitos.

- ¿Dónde aprendiste a hacer eso?- preguntó esta vez Emily mientras ladeaba la cabeza en gesto interrogante.

- Llevaba un tiempo pensando que no encajaba en Erudición, pero sabía que este era un sitio duro, así que empecé a entrenar en mi tiempo libre, no es lo mismo que estar aquí, pero algo es algo.- suspiré, siempre se me ha dado bien contar verdades a medias, me gustaba llamarlo el arte de las palabras, decir que no encajaba en lugar de sufría maltratos por mis padres, era un claro ejemplo.

- ¿Algo es algo? Dejaste a Sam inconsciente, ¡creo que pasará la noche en la enfermería!- Tom se puso nervioso a medida que decía esto, se levantó de la cama donde se encontraba sentado durante toda la conversación y me sujeto por los hombros mirándome con sus ojos desorbitados- ¿Me enseñas?

- Para empezar no estoy orgullosa de haberla dejado inconsciente, eso fue cosa de Eric y sus estupidos cambios de normas, y Tom estamos aquí para aprender a pelear, estoy segura de que Cuatro te enseñará mejor que yo- la mirada de perro desolado de Tom era algo a lo que nadie podría negarse- ... pero podemos entrenar juntos cuando quieras.

- ¡Bien!- exclamó un Tom emocionado que rápidamente se aparto al darse cuanta de que seguía vestida únicamente con una  toalla y me había abrazado de la emoción.