⋰ ⌑ Actualmente El Rey ⌑ ⋱ ; Taekook~

⋰ ⌑ Capítulo 1 ⌑ ⋱

Bebía café plácidamente. Posó su taza en el plato pequeño que tenía allí, haciendo que un sonido de cerámica chocando rebotara por las paredes de su estudio. Juntó sus manos y las entrelazó, mientras apoyaba sus codos sobre el escritorio. Cerró los ojos esperando una cosa.

— Aaagghh...mi cabeza... — Se escuchó una puerta abrir y cerrarse, después, enfrente de su escritorio, se encontraba la señora Chong, Jefa de la Secretaria del Reino, una mujer muy mayor y respetada. El rey, Kim Taehyung, estaba acostumbrado a que a esa hora la Jefa entrase quejándose.

— ¿Qué pasó hoy? — Preguntó abriendo sus ojos lentamente a la vez que alzaba apenas su cabeza para observar a la mujer. Muy bajita.

— Soy tu mayor, debes hablarme bien. — Exigió mirándolo indignada.

— ¡Y yo soy su rey! — Exclamó con el mismo sentimiento.

Pequeñas "discusiones" que se formaban constantemente, pero que daban más risa que otra cosa.

Se formó un corto silencio, y cuando la mujer estuvo apunto de romperlo, se volvió a escuchar el sonido, o más bien ruido, de la puerta abriéndose, causando que los dos presentes voltearan al instante.

— Oh, disculpe señora Chong y su majestad — La mujer de unos cuarenta años, Yooki, hizo una reverencia de noventa grados — Hay una publicación que le interesará ver, señor. — Se acercó al escritorio con una tableta en mano.

La volteó para que Taehyung pudiese ver dicha información. Este mismo se levantó y abrió un poco sus ojos y boca, ¿Quién osaba publicar tal blasfemia? Un artículo de una página web que describía "a la perfección" la experiencia de una chica teniendo intimidad con el rey.

— Decapitación. — Soltó.

— Desde 1899 se está prohibido, majestad. — Replicó la Jefa Chong.

— Entiendo, aunque de todas formas yo puedo cambiar las reglas si me apetece. — Ninguna de las presentes habló, no podían contradecir palabras ciertas — Busquen al culpable y encierrenlo. Hagan que ese artículo desaparezca, ahora. Y expliquen que es todo una mentira. — La mujer asintió y se retiró, seguida de la jefa, que debía encargarse de más asuntos por culpa de aquella publicación.

El rey se volvió a sentar y frotó un poco su sien.

Algo a destacar de los lugares en los que estaba constantemente, o sea su habitación y estudio, era que ninguno de los dos poseía relojes de ningún tipo, y el mismo Taehyung tampoco portaba en ningún momento. Por que esa era su habilidad, el tiempo y los números.

El rey podía saber cuánto tiempo había pasado exactamente de un momento a otro, y también podía saber el horario exacto en el que se encontraba, como un reloj mental. Esta habilidad desencadenaba otra, la cual eran los números, el era muy bueno con las cuentas matemáticas, no perfecto, pero muy bueno.

— ¿Y tu que piensas al respecto de las mentiras que están comenzando a circular? ¿Piensas igual que yo en que ya no hay más respeto por el venerado rey? — Le preguntó a el Guardaespaldas Real, Taeyon, que había estado desde un principio en la habitación. De hecho no se separaba del rey nunca, ya que esa era su misión. Solo se iba cuando el rey le daba la orden directa de hacerlo.

Taeyon se mantuvo callado, hasta que Taehyung se paró de su asiento, agitó su bata hacia atrás y repitió las mismas preguntas, en ese momento el muchacho respondió — Si, su majestad. — Directo y conciso. El rey ya estaba acostumbrado a la sequedad de su guardaespaldas por momentos, que también sentía como un amigo cercano.

Caminó hacia la puerta de su estudio y salió por la misma, seguido de Taeyon.

Mientras caminaba por el pasillo se topó con la ayudante y secretaria Nari. Le miró un instante y ella ya sabía que debía hacer.

— El día de hoy no tiene nada más que hacer, su majestad. — Le dijo.

— ¿Y mañana? — Inquirió el pelinegro.

— El día de mañana tiene que ver a la Primer Ministro Min Jaegi, y luego tiene todo el resto del tiempo para preparar el Festival del Jade. — Le respondió. Taehyung, inconscientemente, volteó los ojos, aborrecía en su totalidad tener que juntarse con la Primer Ministro, pero por lo menos luego podría preparar su festival favorito.

Se despidió de Nari y siguió su camino.

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Salió a paso apresurado del establecimiento. Tenía hambre.

— ¿Tan rápido que casi corres? — Inquirió su amigo Seokjin que intentaba seguirle el paso.

— No tienes una idea del hambre que tengo, ham-bre. — Jungkook separó las dos sílabas en el final.

— Y yo que pensé que querrías escapar por que tenías pareja. — Habló decepcionado.

— No, no tengo mucho tiempo para eso, hay mejores cosas que hacer, ¿Sabes? Como comer. — Le respondió. Su amigo negó por su comportamiento — ¿Vienes conmigo? —

— ¿A comer? Por supuesto. — Dijo con obviedad persiguiendo a su amigo hacia un restaurante.

Se sumergieron en un silencio tranquilo, abordado por los jadeos de Seokjin que intentaba seguirle el paso a Jungkook. Al llegar al restaurante eligieron una mesa y se sentaron.

— Pregunta, por cierto, ¿Irás al Festival del Jade? — Inquirió mientras leía la carta para elegir su comida.

— Por supuesto, como todos los años desde que tengo memoria. — Respondió con simplicidad.

Me gusta mucho el Jade, es verde
como el color de la esperanza.

[Revisado]

Atte ; {℘;℘}