Levihan-Historias

Atrapados

Nota:

El capitulo es un poco atrevido. Disfruten.

🌹❤🌹

Narra nuestra querida Hange:

Erwin nos había invitado al parque de diversiones este año. Caminamos alrededor de media hora y nos detuvimos en un bazar a comprar algunas bebidas.

—Buenas tardes, cuatro por favor —dijo Erwin sacando su billetera y hurgando para proceder a pagar.

—Un gusto atenderle, pero señor, debe hacer fila —respondió amablemente señalando a diez personas atrás.

Viendo esto, Mike, Levi y yo, dimos media vuelta a tomar asiento afuera del bazar.

—No sé porque accedí a venir, en este lugar solo hay juegos para mocosos, además de estar extremadamente lleno —estaba fastidiado, hacía demasiado calor y tenía razón en estar así.

—Eso no es verdad, ¡mira! —señalo a la distancia unas montañas de fierros que eran del mismo juego— ese no había el otro año y no se ve como si fuera para un niño. Va~mos —estando en frente de este pequeño hombre me recuesto en la mesa en su dirección fingiendo la cara más triste posible, estiro mi pie dándole algunos golpecitos en su pierna.

—Tch, no hagas eso... —mira discretamente hacia abajo con disgusto, en ese momento con un costado de mi pie derecho le comienzo a dar caricias en donde lo había golpeado, subiendo cada vez más hasta acabar en su rodilla. No había un mantel que cubriera la mesa hasta el piso, estaba a vista de todos mis movimientos, pero no me molestaba, ni a él—. No sabes si han limpiado bien estas mesas. Deja de verme con esa cara de medio morir. Mira a Mike —voltea su cabeza al lado contrario de donde estaba Mike, señalándolo, trataba de ocultar su mirada avergonzada por lo que hacía—. Está entusiasmado por ir, como un perro sin correa, ja —Baja su tono de voz con este último comentario y parecía reírse del mismo.

—No tienes que tener pena en decirnos que no quieres ir por obvias razones —dijo Mike.

—¿Ah? —apenas inclinó la cabeza hacia atrás y lo miró con un ojo arqueando su fina ceja.

—Ese juego claramente no es para un niño, posiblemente saliera volando de ahí. Mejor dicho, si vas, no te dejarán ingresar porque te confundirán con uno —Deja de acariciarse la barbilla para hacer un gesto con su mano a la altura de Levi.

—Pfff —solté y abandoné la mesa en la que me recostaba sin dejar de acariciar su pierna, trataba de calmarlo.

La diferencia de sus estaturas era abrumadora y temas como ese le molestaban al punto de noquear a quien se atreviera a burlarse.

—Bien, no se permite que ingresen niños en ese tipo de juegos, pero se prohíbe el ingreso de mascotas en todo el parque —se acomoda para quedar frente de Mike al mismo tiempo que señala un cartel cercano en el que se tachaba a un perro. Su mirada fue suficiente para bajar la temperatura del lugar.

—Cof, cof —Erwin interrumpió. Nos había encontrado.

Dejé de tocar la pierna de Levi al momento que la bandeja con esas refrescantes bebidas palpa la mesa. Mike, como de costumbre, comienza a olfatearlas e ignora a un Levi furioso.

—Deberías esconderte —prosigue Levi e intenta sacar la pequeña tapa innecesaria de su bebida para tomarla de la forma usual.

Fui rápida al escoger la siguiente a la que Mike hizo buen gesto.

—¿Por qué debería? —su mano seguía el recorrido de su ex bebida y se detuvo cuando fue a parar en mi boca.

—Ahí vienen los de control animal —advierte apuntando con la cabeza a dos hombres corpulentos.