❤️Capítulo 20❤️

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–¡Abrí la puerta!– grito golpeándola enojada.

El maldito la había cerrado con llave y lo único que podía escuchar eran los gritos de Gabriel del otro lado.

 –¡DÉJALA EN PAZ! ¿QUÉ ES LO QUE BUSCAS?

Con dificultad me agaché y miré por el orificio de la cerradura. Solo pude ver como bruscamente Gabriel cayó al suelo y Eros se abalanzó sobre él.

–Busco dejarte en claro que debes de alejarte de lo que me pertenece, maldito idiota– dice el ojiazul entre dientes y lo siguiente que escucho fueron varios golpes y quejidos de parte de mi amigo

–¡NOOO! ¡EROS! ¡POR FAVOR, PARA!–grito golpeando más la puerta.

–¡Señor, suelte al joven!– gritó un tercero que no pude visualizar.

Luego sentí más pasos y de repente Eros se alejó.

–Lo siento, pensé que entraría a mi habitación para robarme– se disculpa con la voz agitada.

Gabriel, sin levantarse o moverse, es atendido por un hombre que se arrodilla a su altura y revisa su pulso.

–Acaba de noquearlo– dice preocupado el desconocido.

–¿Enserio? oh, lo siento...no soy muy consiente de la fuerza que poseo, llévenlo a un hospital y si quieren puedo hacerme cargo de los gastos.

¿Por qué habla tan formal y correcto?

Agh, hipócrita.

Gruñendo me levanto y gritando golpeo por tercera vez la puerta.

–¡AUXILIO! ¡ESTOY ENCERRADA!

Con fuerza moví el mango de la puerta, llamando seguramente la atención de los hombres.

–¿Y eso?– preguntó una voz que antes no había hablado.

–Disculpen, es mi novia...está un poco alterada porque discutimos y al irme la encerré, ya que la última vez se fue y no pude encontrarla, pero ya mismo hablo con ella– explica con paciencia.

–¡ES MENTIRA! ¡ES UN MANIPULADOR! ¡NO LE CREAN!– grito rabiosa.

–¿Ya oyeron? no querrán verla enojada, mejor lleven al idiot...al niño a un hospital– susurró él, pero a pesar de eso lo escuché.

Los hombres intercambiaron un par de palabras más, pero frustrada me levanté y comencé a dar vueltas en la habitación buscando una ventana abierta, pero no tuve éxito. Sin contar que había olvidado que estamos en un primer piso.

Un minuto...si todo esto fue una trampa, entonces Eros envió el mensaje, eso quiere decir que ¿También secuestró a Connor?

Entonces no me puedo ir...no, no, no. Debo averiguar qué es lo que éste loco trama.

Impaciente miré el reloj por un buen rato, esperando a que la bendita puerta fuera abierta, hasta que vi por la ventana como una ambulancia se estacionaba, seguramente para buscar a Gaby.

Pobre...solo me quiso ayudar.

Al recordar al pobre chico tirado en el suelo mi ira regresó y decidí buscar algo con qué defenderme.

Analicé con más detalles la habitación y me quedé helada.

La lujosa habitación además de contar con adornos y cuadros caros, tiene cama King repleta de pétalos de rosas, hay una botella de vino en la mesita de noche junto con dos copas.

¿Acaso está con una mujer? ¿y si es la que me llamó?

Con temor revisé el baño, pero no hay nadie;  solo me sorprendí al ver lo enorme que era el lugar, lleno de azulejos, con tina y hasta un estante con cremas y perfumes extraños.

Obsesión en Línea (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora