C A R A M E L M A C C H I A T O. [ K O O K M I N]☕

V E I N T I T R E S

Ya pasaba medio día y Jimin estaba saliendo de sus clases para dirigirse a la empresa. Con su mochila colgando de uno de sus hombros empezó a caminar fuera de su instituto cuando se topó con un rostro familiar.

En su cara se dibujó una pequeña sonrisa pues hacía mucho Yoongi no iba por él, se acercó rápidamente y lo envolvió en un abrazo el cual el pelinegro correspondió al instante.

- ¿qué haces aquí? Crei que estarías con Namjoon...

-¿Qué? ¿No puedo venir por mi novio a la escuela?.- sonrió ampliamente dejando un tierno beso en la punta de la nariz del chico.

- eso ni se pregunta, solo me sorprendió.  Pero debe haber una razón más aparte de verme para que estés aquí...

- y estas en lo correcto... por eso me encantas, eres muy listo.

Jimin sonrió mostrándo sus mejillas ligeramente rosadas.

- el caso es... que estuve viendo departamentos y encontré uno que nos beneficiaría a ambos.

- ¡¿en serio?! .- park celebró alegremente.- eso es genial cariño ¿y dónde es? Quiero ir a verlo.

- ¿ahora? No tienes que ir a la empresa.

- oh cierto... le enviaré un mensaje a la secretaria diciéndole que no podré ir hoy, no creo haya inconveniente.

Después de enviar dicho mensaje el par se fue caminando hacia aquel departamento del que el mayor había hablado, llevando una plática amena de como habia ido su día, Jimin hablo de lo aburrido que era el profesor de literatura haciendo su materia favorita algo desagradable, por su lado Yoongi hablo de cosas de musica y de lo que según había hablado con Namjoon.

Sin darse cuenta ya habían llegado al edificio, Jimin observó el lugar sintiéndolo algo familiar pero no tardó tanto y el mayor ya lo había jalado hacia el elevador para subir al piso correspondiente.

Algo dentro de la cabeza del rubio hizo click cuando se bajaron en el séptimo piso. Era el edificio donde solía vivir Rosé.

Intento esconder su sorpresa lo cual no pasó desapercibido del mayor quien lo miró y le sonrió intentando calmarle. Más el pecho de Jimin se encogió cuando se pararon frente a la puerta con el número 412.

Yoongi abrió la puerta con una llave que se le había sido entregada en recepción, la cerradura lucia nueva, cuando este le abrió el paso notó que el lugar estaba limpio, ya no había polvo, ni papeles o fotografías esparcidas por el piso, Jimin miró a Yoongi y le regalo una sonrisa esperando se viera lo más natural posible.

- ¿te gusta?.- preguntó.

Jimin sonrió y asintió  sin decir algo al respecto.

- vi un anuncio en línea y lo compré hace un par de días, el precio era bueno aparte lo limpiaron por nosotros hoy por la mañana, esta cerca de tu escuela y de tu trabajo y la disquera no está tan lejos. Podemos mudarnos en cualquier momento ¿que dices?...

Jimin miró a Yoongi algo preocupado ya que lo más probable es que el pelinegro no tenga la menor idea de dónde estaban, o al menos eso pensaba. También se encontraba angustiado ya que era consciente que el espíritu de Rosé seguía ahí, adherido a ese lugar y probablemente ella no le guste el hecho de que ahora tanto Jimin como yoongi, su supuesto ex, vivan juntos en donde ellos solían vivir, sería demasiado como si la estuvieran corriendo de aquel lugar... ya era algo más que respeto, si, Rosé estaba muerta por demasiado cruel que suene así era, pero Jimin le había empezado a tomar demasiado cariño que eso le parecía una falta de respeto.

Estaba a punto de decir que no se sentía cómodo ahí y que pensara en llegar a un acuerdo con el casero del edificio para ver si un reembolso era posible pero su celular sonó anunciando una llamada entrante, era Jungkook, Jimin miró su teléfono y luego a Yoongi quien lo miraba atento esperando una respuesta del rubio.