Parte 10

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Heda... ¿estás segura?

No tengo dudas. O será todo o nada. -dijo – ya es la hora

Por favor... ¡silencio! -gritó – Os he reunido aquí por que me han llegado rumores, yo ya sabía que esto sucedería... pero no pensé fuese tan pronto, pero quiero dejar claras las cosas desde ahora mismo, quiero que vayamos a nuestro nuevo hogar con la situación muy clara, no quiero que haya ni actos de guerra ni nada parecido. Estos casi 7 años hemos convivido bajo tierra, hemos tenido nuestros problemas, pero los hemos resuelto... implantamos el diálogo... ¿no es así?

Si Heda – gritaron todos

Bien... quiero que alguien me explique por que se está poniendo en duda mi capacidad de liderar por que Clarke ha vuelto, y quiero una explicación clara y sincera.

Y entonces, de entre la gente apareció un hombre de unos 40 años, iba acompañado por unas 20 personas, algo que Lexa agradeció, ya que de las casi 1200 personas que había, la gente que iba en su contra no era mucha o no lo parecía a simple vista. Se puso a dos metros de ella y se dispuso a hablar.

Mi nombre es Siro, originalmente de la nación del hielo, y todos sabemos como cambió su mandato cuando apareció esta mujer, todos sabemos que usted Heda, tuvo algún tipo de relación con ella, y después de lo que vimos ayer no nos cabe duda. ¿Qué nos hace pensar que ahora no volverá a mirar por Skaikru en vez de por su pueblo?

No sé por que no me sorprende que las personas que den problemas sean originalmente de la nación del hielo...- dijo con una sonrisa – en primer lugar, da igual su raíz, ahora todos somos un clan, os recuerdo que los que entrasteis en el búnker fue porque YO lo decidí, yo miré por el bien de todos, sacrifiqué gente de nuestro pueblo, si, es verdad, pero también sacrifique gente de Skaikru, exactamente murieron más de 100 personas de Skaikru, y eso es algo que llevaré en mi consciencia siempre. Usted esta vivo gracias a mi, si solo mirase por Clarke y sus amigos, usted no estaría aquí, ni usted ni ninguno de sus secuaces... - miraba de forma dura a ese hombre, quien ante tal declaración no pudo evitar agachar la mirada, sabía que la comandante en eso tenía razón.

Pero, los comandantes miran por nosotros...¡siempre ha sido así! -dijo uno de los secuaces

Me he pasado mi vida, mirando por vosotros, os he puesto siempre por delante de mi propia felicidad. Me separaron de mi madre, si, la mujer que está a mi izquierda me tuvo que entregar cuando yo era muy pequeña... ¿sabéis cuanto he sacrificado por vosotros? -dejó ir la pose de firme y dejó caer sus brazos a los lados de su cuerpo – os he entregado mi vida a vuestro bien, y solo recibo quejas... y sí, es verdad, tuve una relación con Clarke del pueblo celeste, si, es verdad, me enamoré de ella apenas la conocí -dijo regalando una mirada de amor a la rubia que estaba a su lado y tenía los ojos como platos – ahora no os hablo como comandante, os hablo como Lexa. Soy una mujer, y sé separar mis sentimientos de mis obligaciones y creo que durante estos 6 años os lo he demostrado, pensaba que la persona que amaba y amo a día de hoy estaba muerta, pero yo no me dejé llevar por el dolor, me sobrepuse y os guié hacia lo que ahora sois. Un pueblo unido, sin problemas, ya no usamos la violencia, dialogamos como estamos haciendo ahora, y si, eso es algo que me enseñó esta mujer que tengo a mi lado, me enseñó que hay más allá de las armas y que estas solo tienen que usarse cuando es necesario. -dijo mirando a todos los presentes y había más gente que ella no podía ver, pero sabía que la escuchaban

¡Tiene razón Heda! - dijo uno de sus más fieles a lo lejos – siempre ha mirado por nosotros...

Si, es verdad... -dijo otra voz

Se empezaron a escuchar gritos alzando su nombre, y se oía a gente hablar entre ellos, y los que se habían rebelado al principio se habían alejado, y hablaban entre ellos, pero Lexa sabía que eso no acabaría aquí, tenía que seguir con su discurso.

Más que sobrevivirDonde viven las historias. Descúbrelo ahora