No se qué pasó, ni cuándo pasó, solo recuerdo haberlo conocido en un tonto sitio donde podías hablar con prisioneros para que no se sintieran solos.
Que tonta idea, pero fue inevitable no buscar aquella página...
Ahí fue donde lo vi... me llamó la a...
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No me conoces,
Nunca dejaré de odiarte.
En lugar de romperme solo sonreí sin quererlo,
Mientras pienso en como te atraparé en mis brazos.
• ° Cry For Me - Twice ° •
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— ¡Wow ____! Te ves terrible.
—Gracias por el halago Harley.
—No hay de qué, pero ¿por qué pareces panda?
—Me desvelé con el celular.
— ¡____! ¡¿Acaso hiciste sexo telefónico?!
— ¡¿Qué?! ¡Nooo! ¡Y no lo grites como si fuera cualquier cosa!
— ¡Señoritas! ¡Estamos en examen por favor!
—Lo sentimos...
Genial. No hay nada mejor que este Martes.
Dos horas después por fin terminó esta clase.
—Creo que reprobaré ____.
—Tranquila Harley, siempre apruebas aunque digas que no lo harás.
—____.
El llamado de alguien detrás de mi me hizo voltear, solo que no esperaba que fuera él.
— ¿Jeon? ¿Qué haces aquí? Digo, se que vas en muestro mismo salón, pero en el receso nunca estás aquí. —aunque de ahora en adelante tenemos que sentarnos con nuestra pareja de proyecto, sin embargo, para el examen el profesor nos movió.
—El bebé.
Señaló al bebé que estaba en mi mesa.
—Ah... ¿vienes por él?
Él solo asintió.
—Es mi turno.
—Okey.
Le entregué al bebé y la pañalera. Después de eso él desapareció de ahí.
—Wow. Él habla poco.
—Si, me sorprende que digan que es mujeriego, porque no tiene pinta de serlo.
—____, las personas no siempre son lo que aparentan.
—Vaya, que sabio tu consejo.
—Siempre.
—Mejor vamos a comer.
Ambas fuimos a la cafetería para comer. Tomamos asiento en una mesa cerca de las ventanas ya que así no nos sentíamos tan encerradas.
Este día no fue muy irrelevante o importante. Así que se pasó de volada el día.
Las clases han terminado y estoy recogiendo mis cosas para irme a mi apartamento y seguir viendo a mi bello novio actuar. Y no, no hablo de Nam hehe.
Rápido salgo de ahí ya que Harley siempre quería ir a tomar, esta mujer en serio esta algo loca.
Logré salir con éxito de la escuela, pero ahora tengo que ir a comprar el mandado, ya casi no tengo para comer.
Entré al supermercado para comprar cosas indispensables, como huevos, leche, tocino, lechuga, jitomate, cereal, yogurt, gelatinas, fresas, plátano, mis compras se vieron interrumpidas por un fuerte trueno, el cual me espantó.
Terminé rápido mis compras, no quería que el agua me atrapara.
Bastante tarde, al salir ya estaba lloviendo horrible.
Puse mi mochila sobre mi cabeza y salí corriendo hacia mi apartamento.
Pero ya casi al llegar me pareció escuchar unos chillidos.
— ¿Eh?
Me fijé bien a mi alrededor. No veía nada, hasta que bajé mi vista, el sonido venía de una caja de cartón ya mojada.
Me importó poco mojarme, así que abrí la caja y lo que vi ahí me partió el corazón. Era un perrito indefenso, mojado y espantado por la lluvia. ¿Quién lo había dejado aquí? Personas sin sentimientos.
Lo tomé con cuidado y lo cubrí con mi suéter.
Seguí corriendo con cuidado de no lastimarlo y al fin llegué a estar frente a mi apartamento.
—Bien, aquí estarás bien.
Saqué la tarjeta para abrir la puerta. Pasé y dejé mi abrigo y zapatos en la entrada. Pasé con el cachorro a la sala.
Parecía que estaba agradecido conmigo, porque no para de lamerme la mano.
¡Mierda!
No tengo comida de perro. ¿Y ahora que le daré? ¿Pollo? ¡No! Lo enfermarás ____.
Bien, piensa.
Mmm, creo que no habrá de otra.
Tome de nuevo mi abrigo y salí de ahí hacia una tienda donde vendieran croquetas.
Sin paraguas, otra vez.
Esto me pasa por salir a las prisas.
Llegué a una tiendita preguntando por croquetas. Por suerte si tenían, compré una bolsa mediana. Aproveché para ver si tenían platos para perros, pero no. Iría a comprar cuando cesara la lluvia.
Suspiré y de nuevo corrí hasta mi apartamento. Espero no enfermarme, el agua está realmente helada.
Llegué toda empapada.
Cuando estaba por abrir mi puerta, alguien me llamó.
— ¿____?
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