advertencias: fingering, sexo sin protección, public sex, voyeurism.
resumen: la semana de exámenes finales estaba mandando al borde de la locura a todos los alumnos de último año, James y tú no habían podido tener ni un tiempo a solas y ambos se encontraban necesitados, así que decide hacer algo al respecto.
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Tus dedos se deslizaban ágilmente por las hojas amarillentas del libro de pociones tratando de memorizar cada ilustración de los procesos, pero tu mente estaba alejada de la realidad en una ilusión dónde James besaba y tocaba tu cuerpo. Estabas harta de lo que tus hormonas estaban causando en ti, así que decidiste ir a la torre de astronomía a despejarte un poco.
En tu camino Potter te noto desde su lugar y dejo de escuchar la explicación de Remus para seguirte sigilosamente entre las viejas paredes hasta las angostas escaleras de la torre. Una vez llegaron pudo ver la tranquilidad en tu rostro mientras el aire mecía tu pelo.
—¡Mierda, James! —gritaste cuando este paso sus brazos por tu cintura dejando caer su mentón en tu hombro y soltó una carcajada pidiendo, —lo siento linda —se disculpo dejando un suave beso en tu mejilla.
Te volteaste para poder abrazarlo correctamente y esconder tu cabeza en el hueco de su cuello, —te extrañe tanto —admitiste sobre sus labios antes de juntarlos en un suave beso, su lengua no tardo en atacar tu boca y rápidamente el tierno ambiente se evaporaba poco a poco con sus manos arrastrándose tentadoramente desde tu espalda baja hasta el borde de tu falda subiéndola para amasar tu trasero.
—James... —suspiraste, su vista bajo a tus ojos entrecerrados por el placer y eso fue mas que necesario para que pegara tu cuerpo a la pared mas cercana y empezar a crear un suave recorrido con sus labios por la extensión de tu cuello. —Alguien podría vernos — trataste de razonar con las caricias de sus dedos en tu húmedas bragas.
—Entonces, deberás guardar silencio —dijo haciendo a un lado la tela que cubría tu zona, dos de sus dedos partieron tus pliegues encontrando tu hinchado clítoris, tus manos se hicieron puños sobre su pecho mientras soltabas un suspiro sobre su cuello cuando sus dedos se movieron circularmente sobre tu sensible carne.
—Por favor, James~ —escuchar tus dulces pedidos sobre su oído lo motivaron a penetrarte hasta que las yemas de sus dedos tocaron tu cálido interior, rápidamente encontró un ritmo causando que mas gemidos salieran de tus labios.
Su mano libre se envolvió en tu cuello atrayéndote a un descuidado beso, la velocidad de su muñeca acelero hasta que lo único que podía escucharse era el chapoteo de tu coño, —¿vas a correrte con solo mis dedos cariño? —pregunto burlonamente sintiendo tus paredes apretándose a su alrededor. Solo asentiste con tus ojos cerrados firmemente y tu boca abierta con un rastro de saliva bajando por tu mandíbula.
—Hazlo, se una buena chica —dijo regresando su atención a tu clítoris, sintió tu cuerpo tensarse y el ritmo de tu respiración acelerarse, estabas a punto de gritar, pero poso dos de sus dedos en tu boca y te corriste sin mas viendo luces de colores detrás de tus parpados.
Tu cuerpo estaba entumecido y James pensó que tal vez esto había sido suficiente, pero tus manos bajaron torpemente al botón de sus pantalones, —tan necesitada por mi —ronroneo cuando tus dedos jugaron con la banda de su ropa interior bajándola dejando a la vista su duro miembro.
—Follame, por favor —tomo tu pierna apoyándola en su cintura y se alineo con tu entrada viendo como saltabas por la sobreestimulación que estabas recibiendo y sin más se enterró en ti, hasta que sus caderas chocaron.
—Tan grande, mierda~ —seguiste gimiendo sin control, su polla golpeando cada punto que te hacía quieres llorar de la gran cantidad de placer que estabas recibiendo, hasta que escucharon los pasos de alguien subiendo las escaleras, trataste de hacer parar a James, pero este solo te dió una sonrisa y te cargo comenzando a penetrarte fuertemente.
Tus gemidos siguieron, pudiendo ver la sombra de la persona quieta en la entrada, algo con la idea de que fueran vistos te excito aún más. Esto no paso desapercibido por James y se burló de ti, —una chica tan sucia.
Sus labios se dirigieron a la piel expuesta de tu pecho dejando marcas rojizas que probablemente se tornarian púrpuras, tus dedos se arrastraron por los mechones de cabello jalando los cuando la punta de su pene golpeó tu punto.
—¡Justo ahí, James! —jadeaste al borde de un nuevo orgasmo, simplemente todo era una explosión de emociones que te mantenían temblando, podías sentir perfectamente las venas de su miembro y su curvatura llevandote cada vez más cerca de la liberación.
—Correte alrededor de mi, amor —ordeno aumentando sus embestidas haciendo que su pelvis chocará contra tu adolorido clítoris, los suspiros de la otra persona detrás de la pared y los gruñidos de James en tu oído te hicieron llegar, los fluidos se deslizaron por tus muslos y a los pocos segundos el castaño baño tu interior con su semen.
Sus labios besaron tus mejillas suavemente y limpio las lágrimas que se acumularon en tus ojos, —te amo —susurro saliendo de tu interior. Acomodo tu ropa, asegurándose de que no saliera nada de ti.
Peinaste con tus dedos sus desordenados cabellos y pasaste un brazo sobre su cintura comenzando a caminar hacia la salida. Notaron como el chico de Ravenclaw los vio con las mejillas sonrojadas, James solo soltó una carcajada palmeando su cabeza mientras se dirigían a su habitación para tomar una ducha y regresar con los chicos a estudiar.
