𝑯𝒊𝒔𝒕𝒐𝒓𝒊𝒂𝒔 𝑺𝒂𝒔𝒖𝑺𝒂𝒌𝒖

Rotos. One-Shot

"¿Qué ironía no? Se necesita tristeza para conocer la felicidad, ruido para apreciar el silencio y ausencia para valorar la presencia"

...

Summary: Universo alterno entorno al SasuSaku

Se sentía confundida.

Después de cuatro meses de haber terminado su antigua relación, sentía que había alguien que le volvía a a hacer sentir ese cosquilleo, y vaya sorpresa, porque se trataba de aquel amigo suyo del que menos se lo esperaba.

Uchiha Sasuke.

Al entrar a la preparatoria lo había conocido junto a Naruto, el rubio se convirtió en novio de una de sus mejores amigas, y gracias a él había llegado a entablar una amistad con aquel azabache que la tenía tan confundida. 

Al terminar su relación con Gaara había llorando día y noche con su recuerdo, no es para menos después de un año que habían durado. Pero entonces, Sasuke se volvió mucho más cercano a ella. El chico no era de muchas palabras, pero le había brindado apoyo a la pelirrosa, la llamaba para escucharla 2 horas enteras deshogarse por su ruptura, y aunque el azabache no era bueno dando consejos, con tan sólo querer esucharla, darle pequeñas muestras de cariño y su compañía, era suficiente para que la Haruno se sintiera mejor. 

Era bastante complicado que el Uchiha fuera cercano con alguien, por ello, a todos les sorprendió su lazo que había formado con la oji-jade. 

La pelirrosa estaba luchando con su propia mente e ilusiones, había cosas que tenían sus emociones al máximo, y todas eran por su pelinegro amigo. En primera, aunque ella ya sabía que empezaba a sentir algo por Sasuke, no sabía del todo si él la veía más que como amiga, o si sólo había tenido esa cercanía para tratar de ayudarla en su ruptura, y aunque sentía que el chico en ocasiones le daba señales, también otras veces parecía no verla de una manera amorosa. En segunda, tenía muy poco tiempo de haber terminado su antigua relación, y que le guste alguien más podría ser mal visto, aunque ella creía que no tenía porqué seguir sufriendo por alguien que la cortó sin más. Y en tercero, pese a sus sentimientos, había aprendido que una amistad se puede arruinar fácil cuando se involucra el amor más allá de la amistad, y no quería que eso le pasara con el oji-onix. Tantas razones para que su corazón estuviera echo un caos y no sabía qué demonios hacer. 

Mientras pensaba en todo lo anterior, caminaba afuera de su preparatoria, se vería en la salida con Sasuke, y últimamente, el estar yendo a casa con él al terminar la escuela le causaba nervios.

-Ehh Sakura-san ¿Cómo estás?-Habló un rubio de ojos miel mientras le pasaba el brazo por sus hombros en forma de abrazo y salían de la escuela.

-Bien, gracias Nohara-chan.-Oh claro, su amigo rubio, lo había olvidado. Nohara es un chico del mismo salón que la Haruno. Él había sido otro de los que habían apoyado a la chica en su ruptura, le había mandado bastantes mensajes durante los cuatro meses. Era un buen chico, guapo e inteligente, pero la pelirrosa tenía un pequeño problema con él: era demasiado inconciente ¿Por qué? Fácil, una semana después de romper con Gaara se le declaro a la chica, diciéndole que la amaba, que no llorara por el idiota de su ex, que jamás le había gustado su relación con él, ¡Incluso le mandó un dibujo que hizo de ellos dos juntos! Era tierno, en verdad agradecía sus apoyo, lo quería y todo, pero justo cuando se sentía pésimo  le empezó a decir cosas así sólo para lograr que Sakura pensara lo muy irritante que era. Ella sólo necesitaba tiempo, porque obviamente una semana después de cortar lo que menos quería era a un intenso que se aprovechaba de la situación en la que estaba.