❀ live ❀『 Kth +Jjk 』

❀Tengo miedo pt. 2❀

El estruendo del cielo, acompañado por la luz de un rayo dió comienzo a la tormenta.

Desde el sillón y con una taza de chocolate en mano, Taehyung miró por la ventana para ver la lluvia cayendo a mares y de forma casi violenta. Claro que él disfrutaba bastante de ver la lluvia, pero al parecer, Jungkook no tanto. El castaño no podía evitar dar un respingo por cada trueno fuerte que sonaba, y se negaba rotundamente a mirar por la ventana a la lluvia.

-Seguro eres de esos niños que le dan miedo las tormentas -comentó Taehyung, Jungkook lo miró con ojos de perrito asustado, y algo se rompió dentro del pecho del pelinegro.

Taehyung abrió los brazos sentado en el sillón, invitando a que el castaño fuera hacia él, y así lo hizo.

Con el rostro escondido en el cuello de Taehyung, una mano del pelinegro pasaba de acariciar su cabello hacia su rostro mientras la otra sostenía la taza de chocolate. El celular de Taehyung comenzó a vibrar, hasta que lo alcanzó, aún con Jungkook sin moverse de encima suyo, vió que era una llamada de JinAh.

-¿Hola? -dijo, colocándose el aparato junto a la oreja.

-¡V! ¿Cómo estás? -la chica se escuchaba tan alegre del otro lado de la línea, que extrañamente le hizo bostezar de sueño a Taehyung.

-Bien, bien, supongo. Estoy en casa.

-Ya me había enterado de eso. Jimin me dijo que iba a hacer una fiesta de bienvenida esta noche, pero la acaba de cancelar por la tormenta. -Taehyung no pudo evitar fruncir el ceño con la palabra 'fiesta'.

-Bendita tormenta -agradeció el pelinegro, escuchó la risa de la chica.

-Como no podré ir a la noche, que es una lastima, ya había comprado una botella de vodka... -dijo con pena-, pero en fin, llamaba por si querías hablar de algo, ¿Cómo llegaste?

-Perfectamente -respondió Taehyung bajo la mirada hasta Jungkook, quien había dejado de esconderse para escuchar la conversación-, aunque no quiero hablar de nada en este momento -añadió el pelinegro, notando la mirada atenta, casi celosa de Jungkook-, te llamo en la noche por si quiero hablar contigo.

JinAh pareció comprender que Taehyung estaba con su pareja.

-Bueno, tigre -dijo alegremente, para confusión de Taehyung-, te veré luego.

Taehyung cortó la llamada sin despedirse y sin esperar a que la chica lo hiciera. Aprovechando que Jungkook se había levantado de encima suyo, dejó la taza y el celular sobre la mesa, antes de envolver de nuevo a Jungkook en sus brazos. Un nuevo estruendo hizo temblar los vidrios de la casa, y Jungkook no pudo evitar estremecerse un poco por el miedo. Por el contrario, Taehyung rió, en parte por la ternura, en parte por la idea de siendo el castaño un adulto joven, se asustara por unos truenos.

Acarició el cabello de Jungkook, comenzó a dejar besos pequeños por todo su rostro, mientras seguía acariciando de forma tranquilizadora la mejilla regordeta del castaño con su pulgar.

-Kook, pareces un niño de cinco años -comentó Taehyung bajo, cerca del oído del otro. Una risa nerviosa surgió de los labios del castaño.

-No me gustan las tormentas -dijo-, siento como que algo malo va a pasar.

Taehyung no dijo nada.

Comprendió que quizás, Jungkook se escondía en su abrazo no por los truenos, sino porque ese "algo malo" tendría que ver consigo, y se consolaba con su presencia porque en ese momento, nada malo había ocurrido. Aún.

Taehyung sabía que Jungkook tenía tanto miedo como él, por la incertidumbre de lo que podría hacer en un futuro.

-Jungkook... También tengo miedo -confesó, mirando a los ojos oscuros del castaño. Sin decir nada, esta vez fue Jungkook quien abrazó con firmeza a Taehyung. El incidente con las pastillas no era una herida cerrada, y por más fuerte que actuaran, ambos seguían rotos por dentro. -Tengo miedo de hacerte daño -confesó Taehyung.

-Yo tengo miedo de perderte -dijo Jungkook-. No me importa el daño, mientras sigas a mi lado, todo se puede recuperar.

Taehyung no supo qué contestar.

-Aunque te pido que me digas todo lo que sientes -añadió el castaño, en un momento de silencio-, soy fuerte, Taehyung, puedo soportarlo.

-Creo que-

-¿La gente tiene mucho con sus propios problemas? -completó Jungkook-, estupideces. De ser así no habría psicólogos.

De nuevo, Taehyung no tenía palabras.

-Tampoco quiero que lleves una carga -Taehyung continuó su frase anterior.

-Tú no eres una carga, Taehyung -replicó Jungkook-. Eres una persona, eres mi novio, y eres quien quiero tener a mi lado toda mi vida -una pequeña risa se escapó de los labios de Jungkook-, aunque eso ya te lo dejé bastante claro.

Taehyung sólo asintió. Jungkook miró por encima del hombro de Taehyung hacia la ventana, la tormenta había calmado y sólo era una lluvia algo fuerte, el cielo se veía un poco más y no sonaba ningún trueno. El castaño se sintió más aliviado.

-Preparé la comida -anunció separándose del abrazo-. Hay que cenar bien, después de todo, es tu fiesta de bienvenida.