Solo Ojos Para Ti [NaTzu]

Capítulo 12

Nayeon po'v
Habían pasado dos semanas desde que volvimos del lugar donde habíamos ido con las chicas.
Aprovechamos los últimos días del otoño los cuales eran calurosos para que después comenzará el invierno y así llegó el frío y deberíamos abrigarnos para no enfermarnos.

En esas dos semanas que estuvimos ahí, Tzuyu me contó que había planeado dónde juntarse con Jihyo para confesar sus sentimientos y si ella los aceptaba pedirle que sea su novia.
Yo opiné que quizás va muy rápido que esperará a confirmar que Jihyo si siente cosas por ella pero ella dijo que lo averiguaría cuando se declare.

Actualmente estaba caminando por los pasillos de la escuela en un día nublado y apunto de llover; típico de invierno.
Caminaba con mi mochila hasta que me crucé con Jeongyeon y Dahyun quienes estaba entrando a clases.

-hola conejo- me saludó Jeongyeon moviendo su mano mientras ambas caminaban hacia mí.

-hola oppar y dubu- sonreí mostrado mis dientes de conejo. Dahyun sonrió tiernamente y ambas me dieron un corto abrazo para después irse casi corriendo a sus clases.

Mientras tanto, yo caminaba por el parque con la capucha puesta ya que llovía y no había traído paraguas aparte de que no me gusta estar bajo ellos.
Por un momento la lluvia comenzó a caer con más fuerza y el viento comenzó a ser más fuerte así que para refugiarme aunque sea de la lluvia me pare en un callejón dónde los techos de los negocias justo a mis lados me cubrían.

Miré mí celular y le marque a mí mamá ya que hace menos de 30 minutos debía estar en mí casa pero con esto de lluvia, muchísima gente caminando por las calles y que había perdido el bus estaba llegando tarde y quizás ella y mí abuela se estén preocupando.

-hola mamá. Sé que debería haber llegado hace tiempo pero perdí el bus y ahí muchas gente caminando aparte de la lluvia fuerte que comenzó- dije suspirando mientras le explicaba a mí mamá todo esto por teléfono aparte de comerme el regaño de mí vida.

Mientras escuchaba que mi mamá me regañaba, al frente de la calle donde yo estaba, ví a Tzuyu hablando, parecía seriamente, con Jihyo.
Por alguna razón, sentí la necesidad de cruzar la calle y tratar de escuchar la conversación que ambas mantenían, pero pensé que sería demasiado controladora y a Tzuyu no le gusta las personas chusmas o que se metan en lo que no deben, aparte de que prefiero ver todo desde aquí y si algo sale mal ahí si cruzar la calle.

De repente, ví que Tzuyu le dio a Jihyo como si fuera un ramo de flores con una caja de lo que yo asociaba eran chocolates y al cabo de unos minutos, ví que Jihyo se los devolvió para acto seguido hacer una reverencia e irse del lugar.

Noté y sentí que Tzuyu me miró con los ojos lagrimosos así que rápidamente me crucé de la calle.
Me pare frente a Tzuyu agachandome un poco para mirarla cara a cara ya que ella mantenía su cabeza baja.

-¿Tzuyu? ¿Por qué lloras?- dije mientras la tomaba de ambos brazos levemente.

-J-jihyo...- dijo mientras de ella salían sollozos. Pensé en ir trás Jihyo por hacer llorar a Tzuyu y así lo hice pero ella me detuvo tomándome del brazo y jalandome hacia ella para abrazarme por los hombros mientras lloraba sobre mí hombro.

-¿Qué pasó, Tzuyu-ah? Sabes que no me gusta verte llorar- dije mientras acariciaba su espalda y apoyaba mí barbilla sobre su hombro.

-m-me declaré a Jihyo, unnie- dijo entre sollozos.

-¿Y qué dijo? ¿Aceptó tus sentimientos?- pregunté para seguidamente tomarla del rostro y mirarla fijamente.

-n-no unnie. E-ella no siente nada por mí y prefirió que seamos amigas- dijo y esta vez lloró más fuerte. La tomé de las manos y la senté en una banca que había justo cerca de nosotras debajo de un árbol.

Saqué de mi mochila un paquete de pañuelos y le di uno para que se limpiara la nariz y las lágrimas que recorrían su bello y angelical rostro.

-mira Tzuyu-ah, te contaré algo- dije para mirar al suelo mientras jugaba con el paquete de pañuelos. Ella me miró.

-a veces, a las personas que nos gusta no le gustamos y sí, duele pero no hay nada que podamos hacer- dije mirándola de reojo y ella desvió la mirada.

-tu no lo entiendes, unnie- dijo limpiándose la nariz.

-si, si lo entiendo. Sé que se siente cuando alguien no siente lo mismo; alguien en que no dejas de pensar, duele pero no puedes obligarla a gustarle- dije desviando la mirada y mirando el suelo.

En todo lo que estoy diciendo estoy diciendo mí situación de desamor y amor no correspondido por Tzuyu.

-n-no me gusta...la amo- bajo la cabeza y volvió a llorar.

-Lo sé Tzuyu pero el amor no se trata de los grandes gestos o la luna y las estrellas, solo es suerte y a veces conoces a alguien que se siente igual que tú y a veces no trae suerte pero un día, conocerás a alguien que te quiera como eres.
Hay 7 billones de personas, sé que una de ellas subirá a la luna por ti- dije para tomarla del rostro y le acaricie el rostro.
Ella sonrió y me abrazo.

No sé imaginan lo que me gustaría ser esa única persona de 7 billones que la llevé a la luna. Sé que ella nunca se dará cuenta y cuando lo haga será muy tarde.

...continuará...