El plan no había salido del todo bien, se suponía que tenía que asustar a Xiao Zhan para que este se alejase de Wang Yibo de una jodida vez, pero en ese momento le había parecido una excelente idea asustarlo matando a esa mujer embarazada frente a sus ojos, y ahora ese modelo imprudente estaba muerto ¿sospecharían de él?, no tenían porque, después de todo, había sido discreto, nadie sabía quién era, ni qué relación podría tener con Yibo o Xiao Zhan, había arrojado el arma al acantilado de las monedas, era enorme y estaba seguro que nadie la encontraría hasta que con el calor esa cosa se convirtiera en polvo de hierro.
Hizo la enorme cola en el aeropuerto para comprar un pasaje hasta China y desaparecer de ese infierno caliente y horrible, no había traído mucho equipaje, compro el pasaje y se sentó a esperar los 20 minutos que faltaban para el vuelo, leía un libro que se había traído de China, estaba tan concentrado que no se dio cuenta cuando fue fotografiado desde una distancia prudente.
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Cuando abrió los ojos Xiao Zhan se encontró totalmente perdido, su mente trabajaba tratando de comprender donde estaba y que había pasado, el pulsante dolor en su cabeza hizo que frunciera el ceño, le costaba respirar y todo su cuerpo estaba adolorido, una chica embarazada, un hombre armado y el saltando con la chica al acantilado, fueron lo que su mente le hizo recordar, lo que había vivido era peor que una película de terror, giro su cabeza con desespero buscando la presencia Helena.
La chica estaba tendida a su lado aun con sus ojos cerrados, trato de moverse, pero el dolor en sus costillas le hizo flaquear, necesitaba asegurarse que Helena estuviera bien y él bebe también.
Esta podía ser la segunda vez en su vida que había sentido tanto dolor en su cuerpo. No supo cómo tuvo la sangre fría de hacer lo que hizo, pero la adrenalina junto con el miedo fue más fuerte que su razonamiento. Agradeció que siempre fue muy observador y antes de arrojar la moneda se había inclinado hacia el acantilado, no vio gran cosa por la neblina, pero lo que si alcanzó a ver por unos instantes fue una saliente de rocas, en el momento en el que ese sujeto apunto a Helena con su arma él supo que tenía que ayudarla.
Xiao Zhan en ese momento pensó sinceramente que hubiese preferido recibir el balazo, porque si ese sujeto mataba a Helena en su lugar nunca se lo perdonaría, jamás, ella albergaba una vida dentro de su cuerpo, y se notaba lo entusiasmada que estaba por ello, a pesar de no tener al padre del bebé apoyándola, ¿Cómo dejar que alguien tan valiente muriese?, alguien que no lo merecía, además de que esa mujer sin siquiera conocerlo lo había animado notando que estaba triste, Helena le recordó un poco a su madre entonces.
Era mejor no pensar en ella, o tendría un ataque de pánico.
Helena comenzó a despertar, lo primero que hizo fue llevar una mano a su vientre con expresión de susto, Xiao Zhan uso todas sus fuerzas para acercarse a ella y saber si le dolía algo, al caer logro ponerse debajo de su cuerpo para amortiguar el golpe, lo logro con éxito por ello ahora tenía una costilla rota, y gran parte de su cuerpo molido, pero lo importante es que Helena y él bebe estuviera bien.
—¿Xiao Zhan? —Hablo ella con todo el temor cargada en su voz, dejando salir sus lágrimas. —tu estas...
—Estoy bien ¿Te duele algo? – le corto y pregunto preocupado, ella lloraba en silencio, debido al susto, Xiao Zhan se sintió tan culpable, casi habían matado a dos seres inocentes por su culpa, pero no entendía nada...Por qué ese sujeto quería que se aleje de Yibo. Acaso alguien sabia de su aventura con el perfumista.
—Estoy bien gracias a ti, no estoy muy segura, pero ¿caí sobre ti?
—Lo hice a propósito para que no te lastimaras y no les pasara nada, así que quédate tranquila el bien estar tuyo y el bebe es mas importante.
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Slave To Your Scent
FanfictionWang Yibo desde joven fue una persona... bueno no hay mejor palabra para describirlo que "Indomable", siempre inquieto, nunca estático en el mismo lugar, ¿que era lo que mas aborrecía?, la responsabilidad, la rigidez, como paredes encerrándolo impid...