Drakon¹ KM_VM

Capitulo 7 🤴🏼🐉

Cuando Jimin llegó a su habitación, se sorprendió de ver que Jungkook le esperaba en su cama. A pesar de la nota que le mandó a Jimin, Jungkook debió tener la esperanza de que Jimin volvería a su habitación por la noche. Jimin suspiró ante la visión, el hombre parecía aún más hermoso dormido. 

Oliendo el humo y el olor del club en su piel, Jimin puso al dragón en una silla al lado. 

—Sé buena y no despiertes a Kook, —le dijo en voz baja. 

El dragón hizo un sonido que Jimin tomó como el sonido de estar de acuerdo. 

—Así es, sé buena. 

Desnudándose rápidamente, Jimin se quitó toda la ropa y se dirigió al cuarto de baño. Una fuerte corriente de agua caliente salió de espiga. Satisfecho de que no fuera una ducha de partículas, Jimin entró en la corriente, gimiendo cuando la tensión de los músculos se relajó bajo el calor del agua vaporizada. Una vez que salió de la panadería no volvió a ver al hombre de su hermano. No sabía si estaba más tranquilo o asustado. Si su padre estaba en lo cierto, Jimin estaba en peligro de asesinato. El hecho de que Brill pudiera haberle encontrado en las calles sin testigos, y no lo hubiera hecho se destacó en su mente.

¿Qué podía estar haciendo?

La gran pregunta era si realmente su hermano mayor lo quería muerto. Todavía no podía creer en la historia de su padre. No es que su padre le mintiera intencionadamente, pero su hermano nunca le había mostrado ningún rencor antes, y volverse así de fanático era un gran salto. 

—¿Puedo entrar?
Jimin dio un grito asustado. 

—Lo siento, —dijo Jungkook riendo. Dio un paso dentro de la ducha y su gran cuerpo ocupó la mayoría del espacio, pero a Jimin no le importaba siempre y cuando esas grandes manos siguieran acariciando su piel y dándole suaves toques en la espalda

—. No quise asustarte. 

Los latidos de su corazón volvieron a su cauce cuando se apoyó contra Jungkook,  su gran cuerpo sosteniendo a Jimn como un gran muro protector contra el mundo. Suspiró cuando Jungkook le acarició con sus cálidas manos. 

—Pensé que estabas dormido. —Dijo con voz tranquila. Sonaba mejor que “podrías haber sido un asesino”. Uno sexy con el que se estaba restregando en la ducha, el otro de vuelta a casa—. Oh, justó ahí. —

Jungkook excavaba con los dedos masajeando la tensión de la espalda de Jimin. 

—Te estaba esperando, —dijo Jungkook con voz baja y caliente, haciendo que Jimin se calentara en los lugares justos, hasta que su amante le olfateó el cuello—. Has estado con otro hombre. 

—Sí. —Jimin se sintió abrumado por la vergüenza, haciendo que perdiera su erección. ¿Cómo pudo engañar a este maravilloso hombre? Una disculpa se atoró en su garganta. Antes de que saliera por sus labios, Jungkook inclinó su cabeza hacia atrás dándole un caluroso beso. 

—Bueno. Entonces cumpliste con los requisitos ¿Tuviste relaciones?

—No. —Jimin no podía hacerle frente. Se tapó la cara contra el pecho del otro. Visiones del hermoso rostro de Tae brillaron en su mente, pero las apartó sin piedad. 

Jungkook le inclinó la barbilla, lo que le obligó a mirarle a los ojos. 

—Pero llegaste al clímax, ¿verdad? No cuenta a menos que te corrieras. —Los ojos de Jungkook eran salvajes. Por primera vez Jimin vio al dragón que estaba escondido en el interior. 

—Sí. 

La tensión que estaba en el cuerpo de su amante desapareció. 

—Bueno.