ASM4SH FANFIC. La viajera de otro mundo IV. Los Forasteros.

Capítulo 10. El espíritu dragón.

Cuando Mel al fin pudo abrir los ojos, despertó mirando al techo de la enfermería. Tardó un momento en reaccionar y procesar en dónde se encontraba.

Cloud tenía la espalda apoyada en la pared mientras se cruzaba de brazos, casi dormido. Fue a quien buscó primero la chica, suspiró de un ligero alivio al verlo a un lado de ella. A pesar de todo aquel respiraba tranquilo.

Mel se levantó algo rápido, por lo que el mareo volvió y evitó que se levantara, sólo alcanzó a poner los pies en el suelo, se encontró a sí misma descalza. Buscó su calzado mirando a todas partes, encontrándolo cerca de la puerta de salida.

Cloud abrió los ojos despacio al sentir movimiento.

-Al fin despiertas – susurró parpadeando varias veces.

-Podría decir lo mismo de ti – se burló - ¿Cuánto tiempo estuve fuera?

-Una hora a lo mucho – bostezó y volvió a cerrar los ojos – Vuelve a dormir

Mel puso mala cara.

-Tienes que explicarme tu poder, fue lo único que no le pregunté a la fuente mako – hizo un puchero.

Cloud entreabrió los ojos hacia ella y suspiró.

-¿Realmente fue lo único que no le preguntaste? – levantó una ceja

La chica se llenó de rojo en las mejillas y aspiró todo el aire que pudieron tomar sus pulmones.

-Está bien si no querías decírmelo – se quejó – Con un "No me interesa" – hizo muecas al decirlo – Me bastaba.

Cloud se rio un poco, apareció una dulce sonrisa en su rostro, haciendo a Mel parpadear un par de veces y redirigir su vista hacia otro lado, el chico sintió la tensión de igual manera y tragó saliva mirando ahora al techo.

El silencio de nuevo les atacó, la chica se relamió los labios pensando en qué decirle.

-Acerca de lo que vi... yo... sé que no debí hacerlo sin tu permiso – Mel miró a sus propios pies – No era mi intención hacerlo, ni si quiera sabía lo que iba a pasar cuando me sumergí o, bueno, cuando Aerith y Tifa me empujaron a la fuente.

-¿Te empujaron? – levantó ambas cejas - ¿Cómo?

-Es difícil de explicar, fue como si se me presentaran físicamente sólo por breves instantes.

-Hmm – Sonaba pensativo - ¿Qué querrán hacer ese par de locas?

Mel se le quedó viendo a Cloud procesando la pregunta que él hacía, lo cual, la hizo reír.

-La verdad, no tengo ni la más mínima y remota idea – se dejó caer a la cama, esperó unos minutos para hablar, miró fijamente el techo, sus pensamientos rebobinaban hacia la mañana, recordaba que él le había dado permiso de hacer lo que quisiera, pero... – Qué desperdicio.

-¿Eh?

-Sí, es un desperdicio no salir a la fiesta del pueblo, ya casi es media noche.

-Oh

-¿Hmm? – Mel se sentó correctamente un poco más animada - ¿Quieres ir?

-Nunca dije que sí.

-Ahhh, qué aguafiestas eres.

-Sólo soy alguien que intenta mantener su cabeza en su lugar – se quejó – No haces más que meterte en problemas.

Ella le sacó la lengua y comenzó a reír.

-Hace años nadie me regaña así – soltó ella – Siempre iba al frente de la pelea, con la espada hacia delante – hizo un ademán bastante curioso; levantó la mano izquierda y movió el brazo como si celebrara algo – Pero siempre iba de carne de cañón, me sacrifiqué por muchas personas y ellas sólo dijeron "Sí, gracias"