ASM4SH FANFIC. La viajera de otro mundo IV. Los Forasteros.

Capítulo 2. El misterio del nuevo evento.

La muchacha que vestía ropajes rojos corrió a toda prisa, sacándose de la cabeza por varios instantes la presencia de aquel rubio de sus pensamientos para llegar a lo importante, donde estaban sus amigos.

Una vez llegó a ellos unas voces fuertes y claras, proveniente de algún lugar por medio de altavoces colocados en los techos, hablaron.

-¡Bienvenidos sean!

-¿Link, Zelda, Sheik? – Mel preguntó un tanto anonadada - ¿Ustedes también fueron invitados?

Los tres asintieron.

-El tiempo pasa volando, Suspiro – Sheik habló en su dirección – Me alegra encontrarte sana y salva.

Mel asintió con una media sonrisa.

-Te han tomado de tu tiempo, ¿Verdad?

-No me alegra demasiado, teniendo en cuenta las cosas en Hyrule de mi tiempo.

-Entiendo...

Zelda los miraba con una sonrisa en el rostro, era como si se diera cuenta con su infinita sabiduría de las cosas que Sheik y Mel sabían.

Link en cambio, no sabía mucho sobre la situación, pero intentaba entenderles.

Justamente ahí, las voces volvieron a hablar en medio de esa sala donde la multitud se encontraba. Era una especie de recibidor gigante, donde el azulejo se encontraba bien pulido de un color maple y dos escaleras dividían las estancias a cada lado del fondo del sitio. Cada escalera de madera daba lugar a un ala del castillo, este y oeste.

Debajo de las escaleras, era la entrada al gran comedor y a cada costado de la entrada, conectaban dos pasillos a otras salas más grandes.

Mel al verlo todo, quedó impresionada en demasía, era la primera vez que recorría los pasillos con la vista, de un castillo diferente al de Hyrule.

-Esperamos que nuestras invitaciones no les hayan llegado de improvisto y que su viaje haya sido de lo más cómodo posible- empezó una voz profunda detrás de los altavoces – Mi nombre es Master Hand

-Por otra parte, queremos da inicio con las indicaciones – se escuchó otra voz aún más grave – Mi nombre es Crazy Hand.

-El método de "juego"- dijo el que decía llamarse Master, haciendo énfasis en ésta última palabra – es simple – Mel se encontraba buscando el origen de aquellas profundas voces con la mirada, hasta dar con las bocinas de la parte superior, casi tocando el techo de la primera planta.

-Hemos podido construir un emulador, donde los llevará a pelear a una "realidad" diferente a la nuestra, la cual será escogida al azar por nuestro computador principal – prosiguió – Pero para las medidas de seguridad, hemos tomado los siguientes aspectos – Enumeró – El primero, no se podrán usar ítems ajenos a los que ya tienen a la mano, para evitar las ventajas en combate, segundo, se ha podido inventar además, un dispositivo que se pone en la muñeca del participante, lo estarán viendo justo ahora.

Ahí, un montón de pequeños robots se postraron encima de los participantes. El suspiro de las Diosas se puso en guardia junto a varios nuevos participantes, quienes no se esperaron el alboroto.

El joven rubio que había acaparado la vista de la muchacha no fue la excepción a la regla, junto a varios espadachines más.

Fue entonces que aquellos robots mostraron una imagen en el centro del recibidor, una muñequera electrónica que marcaba varias cosas sobre ella. Las voces continuaron explicando.

-Se preguntarán qué es lo que están viendo justo ahora – Master empezó hablando.

-Este dispositivo que ven en el holograma, con ayuda de sus sensores, puede detectar su ritmo cardíaco, señales de vida y heridas de gravedad realizando un escaneo completo sobre sus cuerpos al ser puesto por primera vez.